La presentación oficial a la prensa de las candidatas del Miss Venezuela 2013 se realizó y dejó a la gente comentando, criticando y haciéndose muchas preguntas acerca de la elección de las aspirantes a reinas y la calidad del espectáculo que ofreció Venevisión en ausencia del «mago de la televisión», Joaquín Riviera.
El evento fue animado por Kerly Ruiz y Osmariel Villalobos, quienes más allá de cualquier animosidad que pudieran despertar, lo condujeron con naturalidad y seguridad, dando una clara demostración que su paso por el magazine Portada’s les ha servido para ganar experiencia en su desempeño como conductoras.
Los productores Ricardo Di Salvatore, Peggy Navarro, Vicente Alvarado y el director Erick «El Pollo» Simonato hicieron un esfuerzo por mostrar en el escenario lo aprendido con Riviera. Idearon un openning en el que Keyén y Samy Hawk junto con el Ballet de Venevisión cantaron y bailaron vibrantemente al ritmo del tema Siéntelo.
El show combinó equilibradamente el objetivo de la producción -seleccionar a las jóvenes que aspiran a convertirse en la nueva soberana de la belleza nacional- y un espectáculo con tres números musicales con puro talento criollo.
En el segundo segmento musical de la noche participaron Romina y Arístides Barbella, vocalista y líder de la agrupación Malanga, quienes interpretaron Cuando se rompe un corazón, canción principal de la telenovela De todas maneras Rosa; y también Gabriel López, ex integrante de Los Kchorros, quien entonó Locura de amor.
A medida que la noche avanzaba y Ruiz pronunciaba el nombre de las seleccionadas y enviaba a las eliminadas al confesionario con Villalobos, las chicas se enfrentaban a las preguntas de periodistas de diferentes medios de comunicación nacionales y regionales. Había llegado la hora de poner a prueba lo que el profesor de Oratoria, José Rafael Briceño, intentó enseñarle en sus clases.
¿El balance? 24 respuestas con un toque bien pronunciado de «querer es poder» al mejor estilo de Conny Méndez y Lair Ribeiro. Eso sí, Victoria Coifman, Miss Portuguesa, no pasó malos ratos. Sin dudar, respondió que ella le ofrecería a un extranjero «una buena arepa y una cachapa con queso y pernil»; María Laura Verde, Miss Lara, aseguró que «lo más importante es vivir el ahora», y Mariella Agriesti, Miss Carabobo, remató con su frase: «Belleza y éxito no tienen edad».
En contrapartida, Deborah Menicucci, Miss Amazonas, se vio en problemas tratando de convencer a la audiencia de que ella se haría una mastectomía para prevenir el cáncer, «sin ningún tipo de prejuicio», pero los nervios la traicionaron; igual ocurrió con Alexandra Guerrero, Miss Trujillo, quien no pudo articular una oración coherente y con Georgina Mazzeo, Miss Táchira, con su escueto: «Imaginarme el perfil de una persona sin conocerlo», en respuesta a lo más difícil que le ha tocado hacer.
El último número musical estuvo a cargo de Rey Mercier, Danny Daniel y Jesús, integrantes del grupo Treo, quienes pusieron a bailar al público con Te gusta.
Hasta ese momento el evento se desarrolló con buen ritmo, pero llegó la hora de la imposición de las bandas y el tiempo ganado en la primera hora y media del programa se perdió cuando «el zar de la belleza», Osmel Sousa, escogió a las representantes de cada estado. En la tarea lo acompañaron: María Gabriela Isler, Miss Venezuela 2012, y Elian Herrera, Miss International 2012.
Mientras esto ocurría, el presidente del concurso de belleza intercambió con Isler y Herrera bromas acerca de sus vestidos y hasta de la estatura de Elian, así como también comentarios con las actuales candidatas acerca de si era la banda del estado que esperaban, entre otros temas. ¿El resultado? En la mayoría de los casos, chistes incomprensibles y continuos espacios de silencio que en la televisión, y en cualquier otro medio, valen oro. Para una próxima oportunidad, habría que tomar en cuenta estos detalles para que el televidente no se aburra y, en última instancia, cambie de canal.
Fuente: EU