El placer sexual se puede conseguir de diversas formas, sólo basta con tener un momento lleno de pasión para excitarnos completamente, caricias, besos y después un poco de sexo…

No obstante, los seres humanos buscamos nuevas formas de encontrar la excitación, algunos mediante prácticas extremas como el sadomasoquismo, otros a través de prendas provocadoras, y unos más por medio del exhibicionismo.

Pero hay otra forma de obtener placer y esta es través de los fetiches; y es que como seres humanos todos tenemos algún fetiche, que no es otra cosa más que la excitación a través de un objeto o parte del cuerpo especifico, algo que nos causa placer con el simple hecho de verlo.

Hibristofilia. Es cuando se siente atracción por el “chico malo”, pero llevada al extremo. La padecen, por ejemplo, las mujeres que se sienten cautivadas por hombres que han cometido crímenes horribles.

Formicofília. Consiste en obtener placer sexual de los insectos (principalmente hormigas). Sucede cuando las personas se excitan al tener insectos recorriéndoles los genitales. Es más común en ciudades donde los sanitarios se encuentran al aire libre.

Agalmatofilia. Es cuando la persona se siente sexualmente atraída por las estatuas.

Plushofilia. Preferencia por tener sexo con animales de peluche. Las personas que la padecen se masturban con peluches o tienen relaciones con otras personas disfrazadas.

Vorarefília. El obtener placer de la idea de comerse, ser comido u observar mientras se comen a una persona.

Tecnosexualismo. Padecen de esta parafilia las personas que ansían tener sexo con robots. ¿Consecuencia de la era tecnológica?

Burusera. Se le llama así cuando los hombres se excitan con la ropa interior usada de mujeres jóvenes. Es una práctica muy común en Japón donde, hasta hace poco, existían incluso máquinas expendedoras de pantis usadas.

Retifismo. Atracción fetichista por los zapatos. Si, por los zapatos de tacón.

Nasofilia. El sentir excitación sexual por las narices.

Odaxelgania. Cuando las personas logran excitarse al morder a sus parejas en distintas partes del cuerpo

Fuente: Informe21

La pirata sensual, la bailarina exótica, la enfermera traviesa, la maestra sucia… ¡no importa! Todos estos disfraces son excitantes y fáciles de conseguir así que ¡ve por ellos!

Si estás buscando la forma de salir de la rutina y hacer algo completamente nuevo en la cama, ¿por qué no considerar darles una oportunidad a los disfraces sexuales? Además de satisfacerle una que otra fantasía sexual a tu galán, tendrás la oportunidad de adoptar una nueva profesión y hacer lo que sea con ella de una forma picante… y placentera.

Enfermera traviesa

Un disfraz de enfermera es de lo má sensual que puedes escoger en la habitación. Son conocidas por ser gentiles y amables así que puedes consentirlo con tus caricias y hacerle un chequeo para que todo esté en orden con su cuerpo. Una enfermera sensual lo excitará porque lo hará pensar que estarás ahí para cuidarlo en la cama y satisfacer todas sus necesidades. Así que inténtalo y busca un disfraz coqueto de enfermera.

El disfraz de enfermera es el más fácil de encontrar ya que no solamente es súper sencillo de hacer porque usualmente visten de blanco sino que también es la fantasía más popular entre los chicos.

Criada atrevida

Los hombres mexicanos tal vez no vivieron con sirvientes pero, gracias la creencia americana, se ha vuelto una fantasía cada vez más popular tener relaciones con una criada. Les da la sensación de autoridad y los hace ver cómo los maestros. Además les excita la emoción de aventura y tomar el riesgo de ser ‘atrapados’ haciendo algo malo. La pasión subirá a muchos niveles así que busca un disfraz de criada, atrévete a lucirlo al máximo.

Maestra o estudiante perversa

Vestirte como estudiante inocente definitivamente hará que tu chico se enfoque en ti por muchísimo tiempo. Además de regresar en el tiempo, les permitirá dejar suelto al adolescente que traen dentro y dejar que sus fantasías se vuelvan realidad. Es sensual acostarse con la maestra sexy pero también lo es satisfacer a la estudiante inocente y pura que… no tiene nada de pura en la cama.

Es muy fácil de hacer ya que solamente necesitas hacerte unas colitas de caballo, buscar una falda cortísima y ponerte unas medias sensuales.

Militar rebelde

Los hombres se sienten atraídos hacía el poder así que no nos extraña que el disfraz sensual de una chica militar los excite. Las soldados tienen confianza en sí mismas, son frescas y siempre están en control. Si quieres adoptar este rol, dile todo lo que quieres que te haga en la cama y deja de lado a la chica tímida que traes dentro. Será una noche inolvidable para ambos.

Policía sensual

Les gustan muchísimo las fantasías con mujeres que tienen el poder sobre ellos; como las policías. Tienen el control y no se dejarán someter ante cualquier hombre a menos que les convenga. Es por eso que te recomendamos sacar un disfraz de policía y mostrar tu lado dominante y sensual. Puedes empezar por examinar todo lo que trae y tocarlo sensualmente.

Saca el cuero, las esposas, los lentes y vístete completamente de negro o azul marino.

Animadora exótica

Animadoras… Las número uno en la cadena alimenticia de las preparatorias. Por supuesto que los hombres se sienten atraídos hacia ellas; tienen faldas cortas, son flexibles y siempre son las más deseadas en todos los aspectos. Busca una faldeta corta, unos pompones y un brasier lindo que él pueda retirar fácilmente.

¿Alguna vez han utilizado disfraces?

Fuente: Veintitantos

Haz cosas diferentes y ‘no entregues el equipo’ sin haberlo explotado al máximo.

Lo que debes probar

Tener sexo en un lugar público.

Sexo en un lugar público ¡y que te cachen!

Un trío.

Que te venden los ojos durante toda la noche de pasión.

Relaciones sexuales con una celebridad, y si no puedes conformare con el más popular de la escuela, el más guapo de la oficina o de plano ese que tanto te alborota la hormona.

Con alguien mucho mayor que tú -unos 20 años más-.

Con alguien menor que tú – unos 10 años, y que sea ‘cancha legal’.

Saberte de memoria -y hacer bien- al menos unas 5 posturas del Kamasutra, ¡Las básicas no cuentan!

Hacer un video porno -aunque lo borres depués.

Tener sexo anal.

Usar juguetes sexuales.

Tener sexo casual, sin olvidarte de la protección.

Hacer la propuesta directa a alguien de tener sexo, aunque no lo conozcas; podrías hacerlo de la mano del punto anterior y matar dos pájaros de un tiro.

Sexo en un lugar donde haga mucho mucho frío.

Sexo bajo la lluvia.

Echarse el rapidín en un lugar donde haya muchas personas, una fiesta por ejemplo.

Tener sexo de reconciliación .

Fingir que eres otra persona durante el sexo, uses o no disfraz.

Dar y que te den un masaje erótico.

Jugar un poco con el sado.

Ver una pelí porno mientras la imitas.

Tener sexo con tu jefe… o con su jefe.

Sexo sin besos.

Volverte experta en la masturbación.

Sexo en una alberca.

Participar en una orgía.

Tener relaciones con un extranjero.

Sexo después de haber llorado mucho.

Fuente: SexoDatos

Para los hombres, la piel es sin discusión el mejor afrodisíaco. Las morenas, las rubias o las pelirrojas no tienen el mismo perfume de piel, ¡basta con oírlos hablar! Gracias a su aroma de pimienta, las morenas excitan la curiosidad. Las rubias evocan el heno fresco en el polvo veraniego. En cuanto a las pelirrojas, liberan connotacioens salvajes, animales.

Por supuesto, los aromas naturales pueden ser sublimados por el perfume. Envolverse en un aura sensual, como una llamada al amor, puede generar muchas fantasías. Practicar el libertinaje olfativo no se improvisa, aseguran los expertos.

La lascivia de los orientales

Esos perfumes inspirados del calor y la suavidad de un abrigo de pieles, con notas dominantes dulces e invasoras, nos traen a la mente los olores de Oriente. Y con ellos un millón de promesas de voluptuosidad. “Vainilla, especias, pachuli, incienso y mirra dejan a su paso un rastro de seducción” sostiene Béatrice Boissiere, autora de Plaisir de parfum («Placer de perfume»).

La condición, claro está, es asumir la fuerte carga erótica que viene incluida. Su mejor representación es Shalimar, la quintaesencia de la femineidad. El secreto reside en la forma en que uno se apropia de la fragancia, lo cual revela un acuerdo que da lugar a los escarceos amorosos…

El olor salvaje del cuero

Una mezcla que nace en el siglo XIX, cuando los soldados rusos enceraban sus botas con un ingrediente extraído de la madera de abedul. Una mezcla poderosa, con una fuerte impronta de virilidad.

Utilizar esta esencia más ‘masculina´ para una mujer puede revelarse como fuertemente afrodisiaco para los dos. El amor es un juego. En la provocación de los sentidos, la iniciación olfativa puede convertirse en un preludio del placer. No dudéis en intercambiar las fragancias.

El misterio de los chipres

Los chipres no tienen nada que ver con la isla del mismo nombre, sino más bien con complejos universos que nos recuerdan los bosques en otoño, con una gran impronta de misterio. Basados principalmente en mezclas de bergamota y con un corazón floral de rosa y jazmín, los chipres intrigan.

Menos lascivo que un oriental, un perfume chipre invita a un erotismo picante, que suscita la curiosidad. Una fragancia encantadora de cierta forma que conduce a la innovación olfativa y erótica.

El efecto ‘Lolita’ de las notas más dulces

Algunos olores conectados a la memoria de la infancia suscitan adicción desde el primer momento. El caramelo, la vainilla, el chocolate o el regaliz nos transportan al despertar del deseo juvenil, a un candor que puede hacer que más de uno se derrita.

Utilizar este tipo de fragancias lleva a sumergirse en un ritual íntimo, con acentos de inocencia y cargado de erotismo. Una fragancia que habla por ti y deja entrever que nada te gustaría más que someterlo a tus caprichos. Dulces y golosos, estos perfumes visten el cuerpo, convocan al deseo y habitan la memoria. No se olvidarán fácilmente de ti.

Inhalar a tu pareja

Más allá de las estelas y sus efectos, el libertinaje olfativo puede concebirse como un juego erótico. “Para una sexualidad más distendida, yo sugiero a la gente que huela a su pareja” propone el sexólogo Gérard Leleu.

Inspira a tu chico, olfatea su piel, el hueco del cuello, el calor de las manos, sus cabellos, como si fuera un ramo de flores o un vaso de vino. Respíralo, estremécete, reinventa los preludios como una forma de libertinaje olfativo, como un retorno a las fuentes de la animalidad, al poder de evocación del cuerpo y a sus pulsiones.

¿Qué perfume usas?

Fuente: Veintitantos

1. Boomerang: Por algún motivo regresa para un encuentro clandestino y veloz, pero no es algo de todos los días. Puede que también regrese y se vaya buscando arreglar la relación, pero al final no terminan en nada serio.

2. Buen amigo: La relación nunca funcionó, tampoco tenían mucha atracción física y finalmente la relación terminó, sin embargo tienen una hermosa y franca amistad. Hablan de todo y hasta comparten con sus nuevas parejas.

3. Resucitado: Lo creías muerto pero apareció al cabo de un tiempo con un aire renovador y muy feliz con su nueva pareja. Suele aparecer muy sonriente en algún evento social o lugar público, presentando a su nueva adquisición y se retira luego con alguna frase como «nos estamos viendo», «que gusto verte», etc.

Fuente: P24

4. Dandy: Se le suele reencontrar en fiestas o circunstancias propicias, en las que el sujeto despliega una galantería asombrosa. Aunque nunca piense realmente en reconquistar al antiguo amor, no perderá ninguna oportunidad.

5. Escombro: Encontrártelo te da mucha pena, desde el momento que terminaron se volvió feísimo, además se la pasa haciéndose el mártir con todos tus amigos y conocidos, ya que después de haber terminado contigo ha sufrido mucho y no sabe como vivir sin ti.

6. Ídolo: Por ser un ex tan lejano y porque la relación no concluyó con violencia explícita ni objetos voladores, gritos o groserías, se le recuerda como un héroe y es como un paradigma de buena relación, la mejor que has tenido.

7. Muleta: Resulta muy molesto de usar, pero ayuda a movilizarse, dadas las condiciones nefastas en las que se encuentra el afectado emocionalmente, es el ex que se utiliza en los momentos de soledad y es el único que en últimas nos presta atención.

8. Payaso: Cuando lo ves, te preguntas: cómo pude haber sostenido una relación con esa figura arlequinesca, pesada o por variadísimos motivos impresentables. Quieres evitar ser reconocida a toda costa por dicho sujeto, en la penosa circunstancia de un encuentro casual.

9. Pegajoso: Busca cualquier circunstancia para encontrarse contigo, busca activamente medios virtuales de comunicación: msn, facebook, mails, mensajes de texto.

10. Prócer: Desde que la relación terminó, se convirtió en todo un héroe para tu familia, todos lo mencionan en algún evento, reunión, etc. Suele ser una actitud muy común en suegras, que levantan al santo porque ya está muerto, o de abuelas, que nunca llegan a enterarse de los hábitos que tenía el «buen chico».

11. Reciclador: Ha transcurrido mucho tiempo luego de la ruptura, se ha curado milagrosamente del dolor, pero aparecen frases de la nada como: «no cambiaste en nada»; «sigues igual que siempre», «ahora recuerdo por qué te dejé». Intenta buscar en los escombros quien le ponga atención.

12. Villano: Es el culpable de todas nuestras actuales desgracias. Se intenta perjudicarlo con brujerías y todo tipo de supersticiones, además se habla mal de él con cualquier persona.

13. Gato negro: Verlo, oír su nombre, o encontrarse casualmente con una prenda suya, da mala suerte. No se le odia, ni se le recuerda habitualmente. La vida transcurre lenta y agradable, hasta que algún indicio de su persona confirma el mal agüero. Desafortunadamente cuando estuviste a su lado te pasó de todo y quieres alejarlo para sanar tu vida.