El último balance de la agencia de Derechos Humanos de la ONU es escalofriante. «La crisis de los refugiados es la peor desde las masacres en Ruanda», advierte el organismo
«La cifra extremadamente alta de muertes actualmente, aproximadamente de 5.000 por mes, demuestra el drástico deterioro del conflicto», afirmó el subsecretario general de la ONU para los Derechos Humanos, Ivan Simanovic, durante una reunión sobre la guerra en Siria.
Simonovic sostuvo que en Siria se perpetran en forma sistemática crímenes de guerra y violaciones a los derechos humanos.
«No habíamos visto un éxodo de refugiados a un ritmo tan alarmante desde el genocidio de Ruanda hace casi veinte años», dijo por su parte el alto comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Antonio Guterres, a través de videoconferencia ante el Consejo de Seguridad.
Por su parte, la subsecretaria general de la ONU para Asuntos Humanitarios, Valerie Amos, indicó ante los quince miembros del máximo órgano de decisión de Naciones Unidas que unos 6,8 millones de sirios necesitan ayuda humanitaria de emergencia.
Guterres, que advirtió que desde que estalló el conflicto en marzo de 2011 casi 1,8 millones de personas han huido de Siria, hizo un llamamiento a todos los países para que mantenga abiertas sus fronteras a los sirios que busquen refugio.
El alto comisionado hizo un llamamiento especial a Egipto y aseguró que «entiende los retos» a los que se enfrenta en estos momentos pero confió en que mantenga su «tradicional hospitalidad» con los refugiados sirios.
El riesgo de que el conflicto pueda «incendiar» el resto de la región no es una exageración, añadió el diplomático portugués, quien dijo que los principales países receptores son Líbano, Jordania, Turquía, Irak y Egipto.
El alto comisionado, que pidió a la comunidad internacional que sea «solidaria» con los países vecinos que están acogiendo a los refugiados, detalló que dos tercios de los sirios han abandonado su país desde que comenzó el año, «a una media de 6.000 diarios»
Fuente: Infobae