Cada vez son más las mujeres (y los hombres) que llegan al consultorio del cirujano con ganas de verse mejor. Y cada vez son más, también, los que prefieren realizar un tratamiento mínimamente invasivo y no exponerse al rigor del quirófano y el bisturí.
Tanto el Botox como el ácido hialurónico son las sustancias más populares y las prácticas elegidas por médicos y pacientes. Tienen el mismo efecto -rejuvenecer la apariencia del rostro- pero hay muchas diferencias entre ellas. Te las presentamos.
¿Qué es el Botox?
BOTOX® es la marca comercial registrada de Toxina Botulínica Tipo A más estudiada y más utilizada en el mundo entero. La Toxina Botulínica Tipo A es una proteína que relaja temporalmente el músculo en el que se aplica atenuando las arrugas de expresión, aquellas que se forman con el rostro en movimiento. Cada vez que nos expresamos, reímos o lloramos, los músculos de la cara se contraen y, con el paso del tiempo, la actividad de estos músculos produce arrugas como las líneas de la frente, del entrecejo y las patas de gallo, entre otras.
¿Cómo se aplica?
La aplicación de Botox es un proceso mínimamente invasivo, rápido e indoloro que no requiere test de alergia, lleva pocos minutos y los pacientes pueden continuar con su ritmo de vida habitual sin inconveniente. Se aplica mediante micro-inyecciones directamente en el músculo responsable de la formación de la arruga y, al relajarlo temporalmente, previene la formación de nuevas líneas de expresión, ya que su efecto impide la profundización de las arrugas existentes y la formación de nuevas actuando de manera preventiva.
Los efectos iniciales son visibles entre 48 a 72 horas después del tratamiento, y los máximos resultados a los 15 días.
¿Hay una edad a partir de la cual se puede comenzar a aplicar?
El profesional médico es quien determinará, en función de cada paciente, cuál es el momento indicado para comenzar con el tratamiento. De todos modos, podemos decir que la edad promedio es a partir de los 30 años.
¿En qué zonas se aplica?
En el área cosmética, Botox está indicado para el tratamiento de líneas faciales hipercinéticas, es decir, las arrugas dinámicas visibles con el rostro en movimiento. Se aplica comúnmente en el área superior del rostro, la frente, el entrecejo y las patas de gallo, pero también puede usarse para las arrugas de la nariz (aquellas que se forman a los costados de la nariz cuando uno ríe), algunas zonas del cuello, las comisuras de los labios y para delinear el contorno de la cara y recolocar las cejas.
Se suele confundir a Botox con algunas sustancias de rellenos, y cuando se ve una boca contundente y hasta deforme se cree que es a causa de la aplicación de Botox. Pero vale la pena aclarar que Botox no se aplica en los labios, ni confiere volumen en las zonas tratadas.
¿Cada cuánto tiempo se debe volver a aplicar?
La pérdida del efecto es gradual y la duración de sus resultados es de 4 a 6 meses, dependiendo del metabolismo de cada paciente, la técnica de aplicación y dosis utilizada. Una vez que finaliza el efecto, el paciente vuelve al estado anterior a la aplicación, habiendo evitado durante ese período que el paso del tiempo siga dañando la piel: esa es la manera de hacer prevención.
¿Cuáles son los efectos inmediatos a la aplicación (hinchazón, etc.) y cuánto tiempo tardan en desaparecer?
Los efectos adversos aparecen en menos del 1% de los casos y, si suceden, son leves, localizados y temporales. Pueden ser enrojecimiento y/o dolor en la zona donde se inyectó el producto; algún pequeño hematoma o dolor de cabeza causado por la tensión en el momento de la aplicación. Si bien es baja la posibilidad de aparición de factores adversos, todos estos son menores y desaparecen en las primeras horas.
Todo sobre rellenos de ácido hialurónico
¿Qué son los rellenos de ácido hialurónico?
El ácido hialurónico es reconocido como la sustancia de elección para rellenos faciales debido a su excelente perfil de eficacia y seguridad frente a los rellenos permanentes como el PMMA, cuyas complicaciones también son permanentes y pueden surgir, incluso, varios años después de su aplicación.
El ácido hialurónico es una sustancia producida naturalmente por el organismo, presente de forma principal en la piel. Su función es la de retener agua, aportando hidratación y volumen. Con el proceso de envejecimiento, esta sustancia se degrada y el organismo disminuye su capacidad de reponerla. El resultado es la pérdida de volumen, contorno y la aparición de arrugas estáticas que dan al rostro una apariencia envejecida y cansada.
¿Cómo se aplica?
El relleno de ácido hialurónico es un gel que se aplica mediante micro-inyecciones directamente en la piel y, además de reponer el ácido hialurónico perdido, permite remodelar formas y contornos del rostro y labios, y otorgar volumen en las áreas modificadas por el proceso de envejecimiento; también permite rellenar surcos y arrugas estáticas, es decir, las arrugas más profundas y visibles con el rostro en reposo.
¿A partir de qué edad se puede comenzar a aplicar?
Si bien es indicado para mujeres que desean eliminar arrugas, recuperar el volumen y contornos del rostro, es el médico quien determinará la indicación más adecuada para cada paciente.
¿En qué zonas se aplica?
El relleno de ácido hialurónico se utiliza para “rellenar” o atenuar las arrugas estáticas, es decir, las arrugas que se ven aún cuando el rostro está en reposo, sin gesticular. También se utiliza para devolver volumen a las zonas en las que el mismo se perdió debido al proceso de envejecimiento, como mejillas, mentón y mandíbula, y para reducir las ojeras y aumentar el volumen de los labios.
¿Cada cuánto tiempo se debe volver a aplicar?
Al igual que el Botox, la pérdida del efecto es gradual y la duración de sus resultados es en promedio de 9 meses a 1 año.
¿Hay una nueva generación de rellenos? ¿Cuáles son sus ventajas?
Acaba de llegar al país una nueva línea de rellenos de ácido hialurónico que posee un exclusivo y patentado sistema de fabricación. Tiene varias ventajas en relación a otros rellenos: todas ellas radican en la combinación de diferentes moléculas de ácido hialurónico, dando como resultado un nuevo gel que permite lograr resultados nunca antes obtenidos en procedimientos cosméticos faciales. Es un gel uniforme, altamente maleable, que otorga una textura suave y natural apenas después de ser aplicado y, por lo tanto, la apariencia se vuelve aún más natural y satisfactoria. Esta consistencia suave hace que sea más fácil de inyectar y que se acomode delicadamente en la piel, ayudando a reducir la hinchazón en las áreas tratadas; la menor inflamación permite un rápido regreso a sus actividades normales.
Toda la línea posee lidocaína (anestésico), que garantiza el confort del paciente, durante y post aplicación y, además, permite trabajar con mayor precisión y seguridad. Otra de las ventajas es su duración, este nuevo y exclusivo proceso de manufactura con reticulación optimizada, resulta en un gel altamente resistente a la degradación, con un promedio entre 12 y 18 meses de duración -dependiendo del producto utilizado y el área de aplicación-.
El mejor consejo
Es imprescindible destacar que siempre que estemos por realizar un tratamiento estético, es fundamental elegir cirujanos plásticos, dermatólogos o médicos especialistas entrenados en la técnica de aplicación, y el mismo debe llevarse a cabo exclusivamente en centros de salud o consultorios habilitados; del mismo modo, debemos exigir al profesional que nos muestre el producto antes de ser aplicado.
Fuente: Entremujeres