Es innegable que la tecnología se mete en la vida de las personas y la cama no es una excepción. ¿Conviene hacerle un lugarcito? “Internet puede ser una buena aliada como estímulo erótico”, confirmó a Entremujeres el doctor Walter Ghedin, médico psiquiatra y sexólogo.

“Muchas parejas suelen buscar alternativas para explorar y alimentar la sexualidad. Los sitios de Internet son una buena propuesta, así como también los videos pornográficos o los films eróticos”, coincide la licenciada Sandra Lustgarten, psicóloga y sexóloga.

¿Solos o juntitos?

Según Ghedin, lo mejor es que haya un acuerdo sobre el uso de la Web o que sea compartido. “Conozco muchas parejas que se sienten desplazadas cuando uno de ellos encuentra placer en estos sitios y la otra no. Hasta se llega a pensar que sólo es un refuerzo del autoerotismo”, cuenta.

En la misma línea, Sandra enumera lo que estos sitios NO son: no son un medio para distraerse, no son una demostración de falta de interés, ni son un indicativo de la falta de atracción. “La pareja debe entender que es en pos de mejorar la sexualidad. El diálogo previo para consensuar la finalidad del juego es importante”, agrega la licenciada.

Placer en un click

Según los especialistas, estos son los usos y beneficios de los sitios hot:

* Son un interesante recurso para la “entrada en calor”. Sin duda, nos ayudan a levantar la temperatura.

* Dan estímulos para enriquecer la vida sexual: hacer nuevas posiciones, probar juguetes eróticos y explorar nuevos lugares de la casa (o de la vida). En fin, nos ayudan a romper la rutina.

* Son generadores de fantasías sexuales, que nos dan creatividad para imaginar y conocer un mundo no explorado.

* Brindan una multiplicidad de imágenes para todos los gustos: heterosexuales, gays, swingers, tríos, etc. Y, para los más tradicionales, es una forma de conocer todo lo que existe. Probar o no, es otro tema. Somos adultos y podemos averiguar o chusmear sin correr riesgos.

Qué sitios mirar

Hay varias opciones que te pueden interesar:

* Lust Cinema: es una productora de “películas para adultos que son diferentes, pensadas para personas que disfrutan del buen cine”. Su fundadora es Erika Lust, licenciada en Ciencias Políticas, ultra feminista y autora del libro “Porno para mujeres”. Todos sus productos tienen una mirada femenina: “5 historias hot para ella”, “Prisión rosa”, “Xfemmes”, entre otros. En el sitio se pueden ver gratis los trailers y algunas escenas.

* Prime TV: la marca de preservativos lanzó un ciclo de videos. Con una estética seria y cuidada, abarcan temas como la primera cita, las fantasías y los juegos eróticos. Lo más innovador es la interactividad: la historia se detiene en un punto donde vos elegís qué camino seguir. Una especie de “Elige tu primera aventura”, pero para adultos…

* Candida Royalle: esta mujer, directora de la productora Femme, fue pionera (desde 1984) en adaptar el cine erótico al gusto femenino. Agregó diálogos antes y después de los encuentros y redujo los primeros planos explícitos. Podés ver gratis el trailer de una película. También el catálogo de filmes que están disponibles on line, con un costo.

* Playboy TV: su fuerte son las mujeres exuberantes. Tiene un amplio archivo de fotos, repleto de cuerpos anónimos y otros conocidos, como el de Luciana Salazar y Pamela David. Una sección interesante es la de videos, divididos en categorías y con rankings de los más vistos y los más votados.

* Tests para hacer en pareja: ¿Cuánto saben de sexo? ¿Lo de ustedes es pura pasión? ¿Qué tipo de pareja son? ¿Quién lleva los pantalones? ¿Necesitan una «puesta a punto»? Estos son los cuestionarios que te proponemos para divertirse y responder de a dos.

“Todo es válido mientras exista acuerdo entre personas adultas”, nos dice Ghedin. Por eso, esta lista nació como un incentivo, que lejos de limitarnos busca todo lo contrario: ser una puerta abierta a las nuevas experiencias. Si te da vergüenza, no te preocupes: queda entre vos, tu pareja y tu computadora. /JM

Fuente: EM

Dentro de la multiplicidad de opciones de sitios eróticos y porno que brinda Internet, crece la oferta de distintos juegos pornográficos que pueden verse online, con dibujos parecidos a los mangas. Hay de todo tipo: desde escenas subidas de tono de sexo entre hombres y mujeres, entre mujeres o entre hombre solos, hasta juegos más románticos. La mayoría busca estimular la imaginación y el erotismo.

Para Guido Fischer, psicólogo, sexólogo y terapeuta familiar, estos juegos pueden ser una herramienta para enriquecer la sexualidad. «Estimulan lo lúdico en la pareja, la sexualidad y, por lo tanto, la intimidad en la pareja. Por eso, deberían ser tenidos en cuenta como una buena alternativa tanto para las parejas como para los que están solos y quieren disfrutar en soledad, siempre que no se viole la ley», explica.

La pornografía existe desde tiempos inmemoriales. Hay dibujos como las Venus Paleolíticas que exageran la sexualidad y en los templos hinduistas de hace más de 2.500 años, los decorados muestran parejas en pleno acto sexual. Pero, claro, la tecnología actual todo lo potencia.

«Pueden ser un entretenimiento divertido excepto si hay violencia, abuso o denigración de las personas. Ahí pueden ser sumamente dañinos», advierte la médica especialista en sexología clínica Elsa Astolfi, que está a cargo del consultorio de Sexología del Servicio de Ginecología del Hospital Italiano de Buenos Aires. El límite entre lo placentero y lo violento en la Web se vuelve peligroso y hay que tomar recaudos. (ver Evitar el…). «En general, lo pornográfico está pensado para la fantasía del hombre y puede resultar desagradable para muchas mujeres. Es lo erótico lo que puede estimular más a las mujeres», agrega. Ya lo graficó el escritor Georges Bataille: «El erotismo es cuestión de perspectiva».

Para Fischer, «el problema no es el porno sino la relación que cada uno instale con el objeto a consumir». Y agrega: «Los juegos pueden servir para estimular a la pareja, y la creatividad dentro de ella, lo cual es sumamente importante para mantener el erotismo a lo largo del tiempo».

En estas páginas web pueden encontrarse desde animaciones pornográficas de dibujos para niños como Dragon Ball Z, famosas desnudas, hasta animaciones de chicas perseguidas por consoladores, juegos hot, escenas en una playa nudista o en un auto, entre una gran variedad.

Como todo, tienen sus pro y sus contras. Entre los primeros aparecen «salir de la rutina y divertirse, siempre dependiendo del contenido y de la frecuencia con que se los use», asegura Astolfi. Por otra parte, «para los que están solos, si no tienen pareja y quieren gozar sexualmente, es una alternativa mucho más sana que buscar relaciones sexuales a cualquier precio y de forma irresponsable», suma Fischer.

Las desventajas, coinciden, pueden ser que generen adicción y se descuiden áreas de la pareja, o que las escenas de la vida cotidiana dejen de ser estimulantes. «Hay hombres que prefieren consumir pornografía a tener sexo con su pareja», expresa Astolfi. El problema llega, entonces, porque «en general crean una falsa idea o expectativa sobre el funcionamiento sexual de la mujer y también reducen la relación sexual a una relación genital, excluyendo la dimensión afectiva, emocional y espiritual de la misma», aclara.

Mientras no se pierda de vista que son juegos virtuales y se los considere como una diversión, la Web ofrece amplias posibilidades. Si se tienen en cuenta las precauciones para controlar el consumo, «el juego es un recurso más para la pareja», manifiesta Fischer. /JM

Fuente: EM