El canciller y orador de orden de la Sesión Solemne de la AN por la Conmemoración de los 202 años de la Independencia, Elías Jaua, dijo que a algunos dirigentes europeos se les olvidó la lucha de independencia de «estos» pueblos, «que los sacó de aquí».
El canciller Elías Jaua, orador de orden de la Sesión Solemne de la Asamblea Nacional por la conmemoración de los 202 años de la Independencia, dedicó gran parte de su discurso a recordar la lucha del pueblo oprimido en lo que consideró han sido cinco revoluciones en la historia venezolana.
El ex mandatario Hugo Chávez, fue un leimotiv, en sus palabras, lo comparó con los héroes del pasado al decir que así como en el pasado, los héroes de hoy en día también provienen de las filas de los oprimidos.
Recordó que es el primer 5 de julio que se conmemora sin la presencia del ex mandatario Hugo Chávez. «Ha querido la historia que se cumplan hoy exactamente 4 meses desde que se proyectó ese relámpago que iluminó aquella madrugada del 4 de febrero de 1992 para seguir iluminándonos en el camino».
«Él (Chávez) no está físicamente con nosotros pero tenemos patria, la que él nos dejó», acotó para enseguida hacer una cita de Bolívar en «Mi delirio sobre el Chimborazo» de cómo se traspasa la muerte.
A esta reflexión de la cita de Bolívar agregó un fragmento de la Declaración de la Independencia para asegurar: «(La independencia) es un episodio que se inscribe en una larga tradición de lucha del pueblo oprimido por la emancipación», señaló al destacar que sin las clases «postergadas y oprimidas» no hubiese sido posible la independencia.
Consideró Jaua que la historia no es un asunto de archivos y bibliotecas sino un campo de batalla de la lucha de los pueblos por su liberación definitiva.
Citando al ex mandatario Hugo Chávez sostuvo que la nación ha vivido cinco revoluciones: «la india aborigen, la segunda es la de Miranda y Bolívar la del pueblo de hace 200 años, la tercera la Federal que también fracasó dirigida por Ezequiel Zamora, la cuarta la de Cipriano Castro, también traicionada y esta es la que estamos viviendo, la quinta gran revolución de nuestra historia. Y esta revolución bolivariana no nació para ser traicionada».
Las líneas dieron pie al canciller para asegurar que desde la revolución «estamos torciendo la historia de las tradiciones, gracias a todos los compañeros bolivarianos y chavistas, gracias a ti Nicolás (Maduro) por tanta lealtad y por demostrar que es posible otra historia: la del sentimiento profundo por el compromiso, las ideas y los valores profundos que guían a la humanidad».
Rememoró una a una las cinco revoluciones de las que habló, y en esos episodios comentó la acción en la historia de Juan Germán Roscio, su arrepentimiento al estar a favor de la venta de la patria. Fue este pasaje de su discurso el que le dio pie al canciller que ojalá en la oposición existieran «arrepentimientos históricos» como el de Roscio.
«Ojalá aparecieran muchos Rocios en la oposición venezolana, ojalá hubiera un acto de arrepentimiento de tamaña grandeza histórica por parte de quienes van al departamento de Estado Norteamericano a ofrecer la patria en el altar en el imperialismo yanqui, a cambio de apoyo para una aventura golpista que permita la restauración en el poder la burguesía venezolana», sentenció.
El repaso histórico por las «revoluciones nacionales» sirvió a Jaua para hablar de la mejor política social y económica para el país. «Sin duda alguna que nada más lejos del pensamiento de las doctrinas neoliberales que algunos insisten en venderla como la solución de nuestras problemas económicos y sociales, nada más extraño a nuestra nacionalidad que las tesis del Estado mínimo y del individualismo como elemento sustantivo de las sociedades».
Fue útil también para hacer mención una vez más al caso de «agresión» del presidente boliviano Evo Morales por parte de países europeos. «De Bolivia acabamos a llegar a testimoniar nuestra solidaridad en nombre del pueblo venezolano como lo hizo nuestro presidente Nicolás Maduro al pueblo boliviano al pueblo predilecto hijo del Libertador Simón Bolívar».
«Como decían los presidentes (de Unasur) el día de ayer parece que en Europa se les olvidó esta historia, creo que algunos dirigentes europeos hay que mandarle muchos textos de la lucha de la independencia venezolana para que aprendan a respetar a un pueblo que los echó de aquí a fuerza de coraje, libertad y conciencia».
Aclaró a las naciones de representación democrática en el país tienen garantías. » echamos de aquí a los embajadores de entonces, ustedes (los actuales) sí son bienvenidos. Aquí, no les vamos a revisar los aviones, ni las embajadas, los únicos que asaltan embajadas aquí son algunos sectores de la oposición».
Advertencia a la oposición
El canciller Elías Jaua lanzó una advertencia a la oposición del país. «Sepan que si ellos desbordan el marco de la legalidad democrática desarrollando una aventura golpista, propiciando una intervención extranjera, ejecutando un plan de magnicidio contra el presidente Maduro, no nos quedaría otro derecho que ejercer la rebelión total y profunda como está consagrada en la Constitución Bolivariana de Venezuela».
Agregó que «la revolución bolivariana tomaría otro carácter y la forma de lucha principal sería diferente a la que hemos usado en estos 14 años. Que nadie se equivoque. Estaríamos obligados a ello para preservar la paz. Para evitar una tragedia humanitaria al pueblo venezolano».
Jaua destacó que la frase «Tenemos Patria» «resume la historia de resistencia, lucha y victoria del pueblo. Hoy tenemos patria porque el poder político es expresión de la voluntad del pueblo o del pacto de elites que muchos quieren reeditar».
El canciller de la República sostuvo que el rebrote del fascismo no es un hecho solo de Venezuela. «El desarrollo de una estructura de vigilancia y control a escala global por parte de Estados Unidos denunciada de manera valiente por (Edgard) Snowden, el desconocimiento de las normas elementales del derecho internacional, como es el caso del campo de concentración en Guantánamo y lo más reciente, el atentado y secuestro del avión del presidente Morales, son señales inequívocas de que el monstruo está de vuelta».
Fuente: El Universal