Este año han sido víctima de los secuestradores por lo menos 114 personas, según cifras extraoficiales que maneja la policía judicial.
Durante este primer trimestre el cuerpo detectivesco ha recibido 105 denuncias de plagios en todo el país, algunos de ellos con múltiples víctimas. Las regiones con más cantidad de casos son Distrito Capital, con 41 personas; Miranda, con 23, y Aragua, con 7 personas. Esta relación no incluye las notificaciones recibidas y procesadas por la Guardia Nacional que atiende a los sectores rurales del país.
En los primeros tres meses del año no han iniciado averiguaciones de secuestros en Amazonas, Delta Amacuro, Mérida y Trujillo. Vargas también estuvo sin casos hasta el miércoles cuando hallaron en Las Salinas los cadáveres maniatados de Jerry Reyes y Leudis Peña, que aparentemente estaban plagiados.
Llama la atención que en la isla de Margarita hayan ocurrido tres secuestros en lo que va de año. En dos de ellos las víctimas fueron liberadas y en el otro aún el plagiado permanece en cautiverio. Se trata de un estudiante de 19 años de edad capturado por delincuentes en Juan Griego, el 28 de febrero.
A juzgar por las estadísticas de la policía judicial, el ritmo de secuestros ha disminuido en todas las regiones del país excepto en la capital y el interior del estado Miranda.
Las organizaciones dedicadas a este delito continúan muy activas en el eje Guarenas-Guatire y en Barlovento.
El martes pasado, por ejemplo, un grupo hamponil se llevó a un comerciante de 59 años de edad cuando llegaba a su residencia en la urbanización Los Naranjos, en Guarenas. El hombre fue liberado luego de que supuestamente pagaron un rescate.
Tres días antes, el sábado 23, los plagiarios tuvieron cautivo por horas a un estudiante de 15 años de edad, pero debido a la presión policial tuvieron que liberarlo en el caserío El Café, municipio Acevedo.
Fallecidos. En lo que va de año se ha constatado la muerte de 10 personas que estaban en cautiverio. La mayoría de estos homicidios ha ocurrido en el Distrito Capital. El último caso conocido fue el de un comerciante de 60 años de edad plagiado en el centro comercial Federal de Pérez Bonalde.
Esta cifra se considera alta y, según fuentes policiales, indica que muchos inexpertos están incorporándose al delito del secuestro.
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