Y el porqué realmente deberías mover el esqueleto aunque te apetezca quedarte en la cama.
Tirada en el sofá con una bolsa de agua caliente y lamentándote de (casi) todo? ¿No es una fiebre, es la menstruación? Si es tu caso, ¡un momento!, quedarte parada por el dolor de regla es un error: el mejor remedio es mover el esqueleto. ¿Te preguntas qué tendrá que ver? Bien, el ejercicio alivia los calambres e hinchazón que tienes durante los días de menstruación, por no mencionar el mal humor que nos traemos algunas de nosotras (hemos dicho, algunas).
¿Por qué me duele cuando tengo la regla? Te lo explicamos. El revestimiento interno del útero libera prostaglandinas que causan el cólico, provocando así la contracción de los músculos uterinos, que duplica el dolor. ¿Y el ejercicio qué pinta en todo esto? ¡Muy fácil! Al hacer ejercicio aumenta el flujo de sangre y los niveles de endorfinas, que son a la vez los analgésicos naturales del cuerpo y de los refuerzos del estado de ánimo.
Y si además eres propensa al hinchazón o estreñimiento, el ejercicio es doblemente útil porque alivia la presión abdominal. Sólo tienes que asegurarte de beber suficiente agua: al fin y al cabo, cuando tenemos la regla perdemos más líquido. Y si sudamos, ¡todavía más! Así pues, aunque pienses en quedarte en casa y no te apetezca mover ni un dedo, ir al gimnasio en estos días es más gratificante de lo que imaginas.
Si crees que eres la única que quiere quedarse en casa cuando tiene la menstruación, aquí hay 10 ideas que todas tenemos durante estos días… ¿Con cuál te identificas tú?
“¿Qué diablos me pongo?” Prueba con un pantalón negro y una camisa holgada. ¡Comodidad ante todo!
“¿Tengo una mancha?” ¿Cada vez que alguien te mira el trasero en el gimnasio crees que tienes una mancha roja en él? Si resulta que es cierto, dale las gracias, ¡por avisar!
“Publicidad de tampones, ¡Arg!” ¿Cómo es posible que en los anuncios siempre tienen buena cara y buen humor las chicas que tienen la regla? Ni caso, a todas nos duele y afecta al humor. Pero oye, ¡sonreír te sienta de maravilla!
“¿Yoga o no yoga?” El estiramiento sienta fenomenal, sí, pero hay momentos para todo. Y quizá éste no es el mejor para estirar el cuerpo con el culo en pompa u otros movimientos similares. Si no lo ves claro, ¡prueba con otro ejercicio!
“¿Y si me caigo en la cinta de correr?” Si tienes calambres por la menstruación, puede pasar, ¡no te preocupes!
“Pijama, manta, helado. Pijama, manta, helado…” Créenos, en realidad no necesitas nada de todo esto.
“¿Por qué no puedo comprar mis compresas en todas partes?” Deberían vender estos artilugios de emergencia en cualquier tienda, ¡incluidos los vestuarios del gimnasio!
“¿Hombres? ¡Fuera!” Es normal que te niegues a hacer cola para la máquina de correr. Sobre todo si esa persona no tiene ovarios como tú.
“La piscina, un lugar inseguro”. Por muy bueno que sea el tampón, no te fías del todo.
“El mes que viene otra vez”. Es lógico que te sientas mucho mejor cuando no tienes la regla, pero nada cambiará que la vuelvas a tener el próximo mes, así que evita recordarlo y tómatelo como algo natural.
Fuente: Womens Health