1. Algo relacionado con TU trasero
Puede parecer una obviedad pero algunos chicos son demasiado caballerosos como para pedir este tipo de cosas. Le encantaría idear mil y un juego con tu culo pero piensa que no te va a convencer tener ni uno de sus dedos cerca de esa zona durante el acto sexual.
2. Algo relacionado con SU trasero
Quizá le gustaría que estimularas su próstata pero los estigmas asociados a ella le hacen descartar esta opción. Esta práctica no es parta todo el mundo así que ni se te ocurra ir metiéndole el dedo en el ano a todos los hombres que te encuentres pero, siempre que haya confianza, puedes ofrecérselo. Te sorprenderás de la cantidad de hombres que disfrutan con esto.
3. Que te vistas de enfermera sexy
A tu chico puede que le dé vergüenza proponértelo y es cierto que en algunas ocasiones puede ser ridículo. Sin embargo, disfrazarse y jugar puede ser muy hot si se hace bien. Él solo tiene miedo de que te rías de él.
4. Es fetichista de pies
O de cualquier otra parte del cuerpo. Quizá se avergüence de esos gustos porque no están muy bien vistos socialmente. Además, si ha tenido una mala experiencia con una ex cuando intentó chuparle los dedos de los pies, es probable que no repita contigo.
5. Ver cómo te masturbas
Mirarte cómo te masturbas puede ser realmente excitante pero el chico no encuentra el momento ni la manera para susurrarte al oído que quiere verte en acción. La próxima vez que estés en la cama con él, sepáralo de ti y deléitale con un show privado.
6. Tener relaciones sexuales en público
Es bastante arriesgado y honestamente no muy buena idea ya que también es ilegal. Imagínate acabar en el calabozo porque tu chico se puso supercaliente en un probador de una tienda… Ya te adelantamos que vuestra relación no sobreviviría a semejante episodio. Pero él lo pensó, sí.
7. Grabar vuestro propio vídeo porno
A ver, para mucha gente la respuesta inmediata es: ¡ni de coña! Pero si sois una pareja que ama el sexting quizá valore la idea de un vídeo XXX en casa. Eso sí, si os animáis, no lo guardes como “video.avi”, con el tiempo te olvides de él y cuando lleves el portátil a arreglar el informático flipe.
8. Probar un bondage light
Claro que 50 sombras de Grey ha hecho de los azotes y el bondage algo atractivo pero, a pesar de todo, a él le da cosita mostrarte su lado sado… y más si hay una mordaza de por medio.
9. Ver porno juntos
Podríais tener unos preliminares superexcitantes o contigo exclamando “¡¿En serio te gusta esto?! y durmiendo en el sofá esa noche. Cuidado, es unjuego peligroso.
10. Un trío
“¿No sería divertido si lo hiciéramos con otra persona? ¡Es broma!”. Así es cómo acaba la mayor parte de este tipo de sugerencias porque abrirle el dormitorio a un extraño es algo muuuy complicado. ¿Pensaba que las tres copas de vino que llevas en el cuerpo te iban a hacer más liberal? Ehhh… ¡no!
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