Cuando cumples 18 o 20 años, sientes que las puertas se te abren de par en par y que estás lista para triunfar. Comenzaste a ir a la universidad, te independizaste al irte para tu apartamento de soltera, trabajas… Sin embargo, cuando llegas a los 27 sientes que los 30 años están cada vez más cerca y necesitas aprovechar el tiempo al máximo. ¡Te lo digo por experiencia propia!
Para que el tren no te pase por encima sin haber cumplido algunas cosas antes de llegar al “tercer piso”, tienes que planificar muy bien el tiempo y sobre todo estar dispuesta a cumplir cada una de ellas. ¡Llegados los 30 la vida se pone seria! ¡Tu felicidad está primero!
1. Viajar: A donde tú quieras, pero hazlo; vete a conocer la Torre Eiffel, recibe el año nuevo en el Times Square, relájate en playa Tamarindo, Costa Rica, disfruta de una buena fiesta en Las Vegas, haz amigos en Cuba o tan solo dedícate a conocer tu país de frontera a frontera, sola, con tu pareja o con tus amigos.
2. Enamórate: No creas que el amor de verano se vive solo en películas. En esa aventura de conocer nuevos lugares, no sabes si te espera un chico que te “mueva el piso”. Si tienes esa dicha, te sentirás como una heroína. Ama con locura, pasión y descontrol. La vida es solo una y es tan corta que cuando te percatas han pasado los años, pero te falta mucho por vivir y descubrir. ¡Estás viva hoy, no sabemos mañana!
3. Ten mucho sexo: eso sí, con protección: Que la fiesta no se acabe porque por falta de tomar medidas de seguridad tu vida se fue a la basura. El sexo y el placer nunca son suficientes, pero ahora es el momento de cumplir todas tus fantasías sexuales, de hacerlo en lugares prohibidos y, por qué no, de permitir que él te haga todo lo que quiera, con medida y sin agresiones.
4. No impidas que te rompan el corazón: ¿Qué sería de la vida si no hubiese tristeza? No valorarías los momentos de felicidad. De amor o amistad no se muere nadie y si caminas por la vida sin permitir que se acerquen a ti porque tienes miedo que te lastimen, te perderás experiencias que te hacen crecer como mujer y que te hacen más sabia. Aunque duela, es una forma de madurar y hacerlo antes de los 30 años.
5. Hazte un tatuaje: ¡Tan lindos que son! Tengo 29 años y estoy en ese proceso de decisión. Si estás en las mismas circunstancias, te invito a mirar estos 10 tatuajes que amarás lucir en tu piel y que NUNCA pasarán de moda.
6. Aprende otro idioma: ¿Ya sabes hablar español e inglés? Intenta entonces con el mandarín, italiano o francés. Los puestos de trabajo hoy en día requieren de chicas superpreparadas y por ello pagan un buen dinero. Vale la pena que te intereses por aprender un segundo o tercer idioma. ¡El dinero nunca cae mal!
7. Siéntete orgullosa de tus padres: Esas pataletas que protagonizabas a los 12, 15 o 17 años son cosa del pasado. En la adolescencia por la misma rebeldía querías que tus padres te dejaran hacer lo que quisieras y hasta pensaste en por qué no eran más liberales. Gracias a su autoridad, eres una chica de bien que va a la universidad, que tiene su profesión y hasta que está pensando en comprar su propia casa, o quizás ya la tienes. Llegados los 20 y 30 te sientes realmente orgullosa de tus papás, los amas y quieres pasar con ellos el resto de sus días. ¡No lo dejes para mañana, lo puedes.
8. Renuncia a ese trabajo que tanto odias: Eso sí, antes asegúrate de haber conseguido uno en el que te sientas motivada.
9. Vivir sola: “Es que no podré pagar los recibos sola”, “el arriendo para una sola persona es muy caro”, “con quién hablaré cuando llegue del trabajo”, “quién me atenderá cuando esté enferma”… Deja de preocuparte por cosas secundarias y hazlo si el presupuesto te alcanza. Vivir sola te da la posibilidad de independizarte, de conocerte a ti misma y sobre todo de disfrutar de esos momentos de silencio que tanto amas cuando quieres estar sola… o esos días en los que quieres divertirte sin que te molesten.
10. Irte a vivir con tu chico: A las personas nunca las terminarás de conocer, pero si ya han hablado de la posibilidad de caminar hacia el altar, una buena opción antes de dar ese gran paso es vivir juntos. Pongan sus reglas, resuelvan sus conflictos y perdonen.
siempremujer
Por Confirmado: María González