Si bien es cierto que hay una sensación de que el proceso de vacunación contra el covid-19 está funcionando, no hay que perder de vista que el plan que supuestamente diseñó el régimen no parece tener el alcance necesario, además de que indudablemente es discriminatorio.
Por lo menos así lo advierte la Academia de Medicina. Su secretario general, Huníades Urbina, asegura que con las dosis que han llegado al país solo puede cubrirse 5% de la población. Ya Venezuela va retrasada en este proceso. Incluso, países vecinos en Suramérica llevan semanas vacunando. A pesar de los anuncios del psuvista de Miraflores y de que insiste en que para julio contaremos con las vacunas del mecanismo Covax, el panorama sigue siendo negativo.
“La vacunación es un show porque no hay vacunas suficientes… Hay que reconstruir el Ministerio de la Salud. No se puede manejar la salud de un país como una bodega”, afirmó Urbina en declaraciones al canal VPI. Alertó, además, sobre el creciente mercado negro de inmunizaciones.
Lo que se le ha solicitado al régimen no es solamente que consiga las vacunas, sino que además diseñe un plan creíble o que por lo menos se asesore con los expertos en la materia. La Academia de Medicina ha estado señalando los errores no por hablar a lo loco, sino porque saben lo importante que es un programa estricto y bien llevado a cabo en casos de pandemia.
“Se estima que con un plan exitoso debería estar vacunando para septiembre un mínimo de 300.000 a 350.000 personas al día, es un reto importante y logísticamente difícil, pero aún no tenemos el número de vacunas necesario para cubrirlo. En la academia hemos dicho que el fundamento inicial para una cobertura estaría por el orden de vacunar a 15 millones, todavía nos faltan vacunas para ello”, recalcó Enrique López Loyo, presidente de la Academia.
Y es por la falta de transparencia que Venezuela no figura entre los receptores de las vacunas que piensa donar Estados Unidos a países de Latinoamérica. Hace días los representantes del sistema Covax aseguraron que no habían recibido el pago que anunció el régimen. ¿A qué juegan los maduristas?
Lo que se ha visto son iniciativas pequeñas, centros instalados en algunos municipios de la capital. Lamentablemente todos pasan por el sistema Patria o por una lista a través del Ministerio de Salud. La maldad de este plan está en que lo que hace el régimen es poner alcabalas a la gente para poder tener acceso a una vacuna que puede salvarle la vida. Esa es la manera que tienen de medio gobernar, castigar a los que no les apoyan.
El tiempo corre y no hay razón para dudar de la experticia de los médicos que integran la Academia de Medicina. Si ellos dicen que lo que se está haciendo no es suficiente, pues hay que seguir presionando. La vacuna no es una moneda de cambio, tampoco un premio por lealtad, es un derecho de todos los venezolanos y la obligación de suministrarla es de los que dicen gobernar.
Editorial de El Nacional