El taxista Ramón Seco (52) fue interceptado por dos antisociales el 30 de diciembre a las 9:00 p.m. cerca de la estación La Bandera para robarle su automóvil cuando realizaba una carrera que le hacía a dos pasajeros desde El Marqués.
En la vía, dos sujetos armados, un hombre y una mujer, lo interceptaron y lo despojaron de su carro blanco modelo Aveo, el hombre opuso resistencia y los antisociales le dieron un disparo en el intercostal derecho y se dieron a la fuga. Los pasajeros resultaron ilesos.
Un compañero de trabajo que también estaba en el sector vio a su amigo caer del carro y a los sujetos salir corriendo hacia el Parque Italo.
El herido fue trasladado al Hospital Periférico de Coche donde no fue atendido porque no había insumos y tampoco anestesiólogo.
Una ambulancia de ese centro asistencial lo trasladó hasta el Hospital Pérez Carreño con un caucho espichado. Allí fue ingresado directamente a quirófano a una intervención quirúrgica que duró desde la 1:00 a.m. hasta las 6:00 a.m. La víctima permaneció hospitalizada en este centro hospitalario durante ochos días pero no alcanzó a recuperarse del impacto y falleció pasadas las 11:00 a.m. de este miércoles.
Se conoció que Ramón Seco trabajaba como taxista por su cuenta y que hace ocho años le asesinaron a su hijo de 23 años, en El Paraíso, para robarle la motocicleta.
Este caso forma parte de las ocho muertes violentas contabilizadas en la Morgue de Bello Monte hasta la mañana de este jueves. En total, van 108 muertos en los primeros ocho días de enero.
VANESSA VEGAS
EL UNIVERSAL
