El presunto cerebro de los atentados yihadistas cometidos en París la semana pasada murió en la operación policial masiva llevada a cabo ayer en el norte de la capital francesa, informaron medios como el The Washington Post y el diario belga De Standaard.
El Post, que cita como fuentes a dos altos responsables de inteligencia europeos, asegura que los investigadores habían determinado que el cabecilla de los terroristas se encontraba atrincherado en el piso de Saint Denis-Francia.
El fiscal de París, François Molins, sin embargo, no confirmó tampoco que Abaaoud sea uno de los al menos dos terroristas fallecidos en el apartamento de Saint Denis, como asegura el Post.
La muerte de Abaaoud, asegura el Post, cierra una gran persecución policial desatada internacionalmente tras los atentados del pasado viernes en París, que causaron 129 muertes y más de 350 heridos con ataques contra un partido de fútbol, una sala de conciertos, restaurantes y bares.
El diario flamenco De Standaard también publicó la información basándose en fuentes de la Seguridad belga .
2 muertos y 7 detenidos
En el operativo en Saint Denis, entre disparos de arma de fuego y explosiones, la policía sitió ayer un apartamento en los suburbios de París donde al parecer se ocultaba el autor intelectual de los ataques de la semana pasada. La redada terminó con dos muertos y ocho arrestados, pero ninguna información concisa sobre el paradero del fugitivo.
Los muertos fueron una mujer que se inmoló con un chaleco explosivo y un hombre impactado por proyectiles y granadas, informó el fiscal parisino tras la operación de más de siete horas.
Molins dijo que la redada fue lanzada después de información tomada de conversaciones de teléfonos intervenidos, vigilancia y reportes de testigos que indicaban que Abaaoud podría estar en el suburbio de Saint-Denis al sur de París.
Un funcionario de la policía, que no dio su nombre en cumplimiento con las normas, dijo que cuatro agentes policiales resultaron lesionados.
Recompensa
El gobierno de EE UU responsabiliza al sujeto, conocido también con el nombre de Tirad al-Jarba, de haber ayudado en 2014 a personas de Australia, Europa y Oriente Medio a viajar desde Turquía a Siria con el fin de integrarles en las filas del EI, según un comunicado del Departamento de Estado.
Lo considera un “líder clave” de la comisión de inmigración y logística del Estado Islámico, posición desde la que se encarga de facilitar los viajes de combatientes de naciones extranjeras a través de la ciudad de Gaziantep, en el sureste de Turquía.
Tras los eventos del día, el presidente francés, François Hollande, reiteró al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, la urgencia de adoptar una resolución contra el terrorismo del Estado Islámico (EI) en el Consejo de Seguridad para reforzar los medios de la lucha contra el terrorismo y contra el EI.
Fuente: El Timpo