Manifestantes propalestinos impiden desarrollo de “La Vuelta Ciclista”, evento deportivo en España

Manifestantes propalestinos impiden desarrollo de “La Vuelta Ciclista”, evento deportivo en España

La organización de la La Vuelta Ciclista a España ha cancelado la última etapa por el centro de Madrid después de que manifestantes propalestinos hayan cortado y bloqueado varios tramos del recorrido, donde ha habido lanzamiento de objetos y cargas policiales.

 

 

 

Así, la 80 edición de la Vuelta a España ha acabado de forma abrupta a unos 56 kilómetros de la meta debido a los disturbios que se han producido en la capital, donde los manifestantes han ocupado las calzadas y protagonizado enfrentamientos con los agentes antidisturbios desplegados.

 

 

 

La Policía ha cargado ante el lanzamiento las vallas de contención y botellas en diferentes puntos del recorrido en la meta de la etapa final. El Paseo del Prado, Callao y Atocha han sido las principales zonas de tensión e incidentes entre los manifestantes y la Policía. Las protestas han dejado 22 agentes heridos y dos manifestantes detenidos, según la Delegación del Gobierno.

 

 

 

Los ciclistas se han visto obligados a parar a la entrada de Madrid. Tras unos minutos parados, el pelotón ha reanudado la marcha, pero han tenido que volver a interrumpir la marcha a los pocos metros y ante esta situación, la organización ha dado por cancelada la etapa y La Vuelta de forma atípica en torno a las 18:20 de la tarde.

 

 

 

Los ciclistas han esperado sobre el terreno con sus bicicletas para ser escoltados por la Policía hacia los vehículos de equipo o sus hoteles, según informa Efe.

 

 

 

De esta forma tan accidentada y por razones ajenas al deporte, se ha puesto punto y final a la ronda española ciclista, que ha quedado marcada en los últimos días por estas protestas en apoyo al pueblo palestino y contra el “genocidio” en Gaza ante la presencia del equipo Israel-Premier Tech en la competición. Unos actos que se han saldado con una veintena de detenidos por desórdenes públicos en las etapas previas.

 

 

 

Suspendida la última etapa y también la ceremonia protocolaria de podio, tal y como anunciaba la organización, por “motivos de seguridad”, de tal forma que el danés Jonas Vingegaard no ha podido recoger su premio.

 

 

 

Tras la cancelación de la prueba, algunos manifestantes han continuado con las protestas en diferentes calles del centro y al grito de “Palestina libre” han avanzado por el Paseo de Recoletos, Cibeles (donde estaba la línea de meta), la calle Alcalá y la Gran Vía, puntos calientes de las concentraciones, donde también ha habido momentos de tensión con nuevas cargas policiales. Sobre las 20:00 han comenzado a disolverse las protestas.

 

Concentraciones desde primera hora de la tarde

 

 

 

Desde las 16:00 de la tarde, bastante antes de la hora prevista de llegada del pelotón a la meta final, ya había centenares de personas concentradas ante el llamamiento de concentraciones a favor de Gaza y contra la participación del equipo Israel Premier Tech, mientras continúan los ataques a la población palestina.

 

 

 

La organización de la Vuelta había anunciado en torno a las 17:30 horas un cambio de recorrido en la etapa final que no había sido comunicado previamente y ha modificado la entrada a Madrid. En concreto, se ha evitado el paso por el centro de Alcobendas y los ciclistas han ido por una variante.

 

 

 

Desde primera hora de la tarde, centenares de manifestantes han coreado “¡No es una guerra, es un genocidio!” y “Netanyahu, criminal” mientras la policía ha revisado los palos de las banderas para verificar que no se portaba en su interior objetos peligrosos.

 

 

 

Bajo el lema “La única meta: Palestina libre”, el Comité palestino del Movimiento de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) había convocado, a través de las redes sociales, protestas pacíficas en varios puntos del recorrido de esta vigésimo primera y última etapa, habitualmente un paseo por Madrid en honor al ganador, pero se ha ido caldeando el ambiente hasta que ha comenzado la invasión de las calzadas, que han imposibilitado el normal desarrollo de la prueba deportiva, para la que se ha desplegado a 1.100 agentes de la Policía Nacional y 400 de la Guardia Civil.

 

 

 

 

Desde que el pasado 3 de septiembre las organizaciones a favor de Palestina boicotearan la Vuelta a su paso por Bilbao, se han sucedido concentraciones en prácticamente todas las etapas.

La Vuelta marca el debate político

 

 

 

La tensión en las calles del centro de Madrid no ha tardado en trasladarse al debate político con duras críticas del PP, que ha dicho que “España es el único país democrático en el que es el propio Gobierno el que alienta movilizaciones violentas en territorio nacional”. Tanto el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, han responsabilizado directamente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de haber “permitido e inducido” las protestas contra Israel y a favor de Palestina. A juicio de Feijóo, la suspensión de la Vuelta ha supuesto un “ridículo internacional televisado en todo el mundo”.

 

 

 

 

Sánchez, en un acto este mismo domingo en Málaga, por la mañana, hacía referencia a La Vuelta ciclista para manifestar su “reconocimiento y respeto absoluto a los deportistas”, pero también su “admiración a un pueblo como el español, que se moviliza por causas justas como la de Palestina”.

 

 

 

 

El PSOE ha asegurado que “el pueblo de Madrid, como otros tantos a lo largo de La Vuelta, dignifica a España frente al mundo”.

 

Fuente: RTVE

 

 

 

 

 

 

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por EL PAÍS (@el_pais)

Comparte esta noticia: