La salud está condenada al fracaso para el 2015. Así lo asegura, sin dudar, José Félix Oletta, exministro de sanidad, al tiempo que describió el panorama nacional del próximo año con un presupuesto deficitario que disminuirá en un 46 por ciento la asignación en áreas prioritarias como Salud Pública y Vigilancia Epidemiológica.
El presupuesto total del 2015 será de 38 mil 705 millones 374 mil 57 bolívares, casi un 10 por ciento menos del monto con el que se contó este año, que fue de 41 mil 444 millones 880 mil 475 bolívares. En 2014 ya hubo una reducción de 31 por ciento con respecto al período anterior. Oletta detalla que de la asignación para 2015 se redujeron las partidas que corresponden a Salud Pública y Vigilancia Epidemiológica, al pasar de 10 millones a cinco millones 154 mil bolívares (un 46 por ciento). El área de Salud Ambiental también bajará, de 58,37 a 38,69 millones.
«Vamos a repetir el mismo fracaso que sufrimos hoy con el dengue. Y lo peor es que el Gobierno no se enseria; si no se reconoce el problema que hay con el chikunguña, por ejemplo, no se pueden solicitar créditos adicionales ni contar con los recursos financieros suficientes para atacar una epidemia de esta magnitud».
A juicio del exministro, las autoridades nacionales «ignoran» la crisis epidemiológica que hoy azota al país. «No se explica cómo se pueden reducir los montos en un momento como este. Hay una absoluta incongruencia en la planificación de recursos financieros. Desde ahora nos están condenando a tener estadísticas de malaria, dengue y chikunguña fuera de control».
Sin recursos
La decisión de disminuir los costos del Ministerio de Salud va en contra de la Constitución, afirma Douglas León Natera, presidente de la Federación Médica Venezolana (FMV). «En vez de buscar una solución atentan contra la carta magna que establece que el Estado debe garantizar la salud y los recursos de manera inmediata a toda la población». Comentó que el principio no se cumple. «En el caso del plan de trasplante, están prácticamente sin recursos. No puede ser que los pacientes mueren esperando un trasplante renal, de córnea, hígado o cualquier otro órgano».
Pero este principio no se cumple. Para León Natera, en crisis como la que atraviesa Venezuela se deben aumentar los recursos para solucionar la raíz del problema. «Acá pasa todo lo contrario cuando reducen el presupuesto para el Ministerio de Salud y aumentan el de la misión Barrio Adentro. El resultado es político y no mejoran la salud pública venezolana. Tenemos, por ejemplo, pacientes que mueren esperando un trasplante, todas las áreas se ven afectadas».
Exhortó al Gobierno a intensificar la medicina preventiva y ajustar el presupuesto a la realidad del venezolano. «Se está condenando a todo el país a seguir galopando sobre la crisis que no solamente es de hospitales, sino que también afecta a las clínicas privadas».
«El 90 % de los hospitales no tienen insumos para funcionar. Al disminuir el presupuesto más de 40 % de los centros pasarían a un cierre automático generado por el propio Gobierno». Douglas León Natera, Presidente de la Federación Médica Venezolana
Desplazan la vigilancia epidemiológica
Miguel Viscuña, director de Epidemiología de Salud Miranda, también manifestó su preocupación en torno a este tema. Considera que la partida destinada a la vigilancia epidemiológica genera una desventaja a la hora de tomar decisiones. “El déficit incide en que la información no sea completa, confiable, oportuna, ni verificable, por lo que las decisiones en materia de salud con respecto a epidemias no son ajustadas a la realidad. Con esto el Gobierno está colocando como áreas no prioritarias para la salud pública todos los aspectos que tienen que ver con la vigilancia y la información epidemiológica”.
«Zulia en emergencia sanitaria»
William Barrientos, diputado a la Asamblea Nacional (AN), acusó a las autoridades regionales de ocultar las cifras de dengue y chikunguña en el Zulia, donde se debe declarar la emergencia sanitaria. «Los hospitales no cuentan con material bioquímico para hacer los estudios de serología, por lo que el afectado debe asistir al Instituto Nacional de Higiene para determinar si tiene la enfermedad. El zancudo le ganó la guerra al gobernador Francisco Arias Cárdenas».
Por Faviana García
laverdad.com
