El día de hoy los líderes de la Unión Europea (UE) iniciaron en torno a las 10.00 (0810 GMT) una reunión informal para debatir sobre la seguridad en la UE, incluido el refuerzo de las fronteras exteriores, y la negociación del “brexit”.

La reunión, en la que no se tomarán decisiones, servirá para discutir por primera vez a nivel de jefes de Estado y Gobierno la propuesta de la Comisión Europea de reforzar con 10.000 policías la Guardia Europea de Fronteras y Costas y para pasar revista a los contactos sobre el “brexit”, con vistas a llegar a un acuerdo en otoño que permita cumplir el calendario previsto.

La reunión fue precedida por una cena de trabajo el miércoles en la que los mandatarios constataron las “diferencias” en la manera de abordar la migración en la UE, aunque coincidieron en que hay que aumentar la cooperación con terceros países, y en particular Egipto.

Pese a la desunión, el ambiente fue más “disentido” que en las semanas precedentes, cuando se produjeron algunos rifirrafes, por ejemplo entre el ministro de Exteriores italiano, Mateo Salvini y el titular de Exteriores luxemburgués, Jean Asselborn.

El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, reconoció que no hay “avances” en la gestión de la inmigración irregular, pero confió en que de aquí a finales de año los Veintiocho logren al menos un acuerdo para fortalecer la agencia de fronteras Frontex, con 10.000 guardias adicionales para 2020.

El presidente francés, Emmanuel Macron, mencionó por su parte la necesidad de aumentar la cooperación con África y de mejorar la legislación europea sobre los retornos de los inmigrantes que no tienen derecho a permanecer en la Unión.

UR