Cuántas veces nos habrá pasado que llegamos a casa con un hambre voraz y no sabemos que preparar. Normalmente nos gustaría recurrir a algo sano. Algo rápido y encima que esté rico y nos llene. Es normal, sobre todo después de las vacaciones cuando lo que queremos es recuperar la figura. Retomar esos hábitos alimenticios que dejamos olvidados durante el buen tiempo y que implican unos kilillos de más que ahora nos sobran.

Para conseguir volver a nuestro peso ideal, lo idóneo es retomar esas rutinas donde optábamos por una manzana, antes que el picoteo de patatas fritas o bebíamos más agua en vez de los típicos refrescos azucarados y llenos de gas.

La regla número uno en estos casos, y la que yo creo que siempre funciona, empieza en el carro de la compra. Tener al alcance de la mano tentaciones que queremos evitar, es simplemente un error. Dejemos de lado aquello que no nos beneficia y optemos por productos sanos y que nos hagan sentir mejor.

La base de nuestra alimentación debe empezar por tener un frigorífico lleno de buenos productos. Y de aquí seguro que cuando lleguemos a casa con ese hambre incontrolable, podremos recurrir a estas opciones sanas que mejorarán nuestro descanso y nuestra figura (que al final es lo que perseguimos).

VERDURAS AL MICROONDAS

Muchas veces lo que nos hecha para atrás es tener que poner la cocina perdida. Sacar los utensilios, manchar, encender el horno… existen multitud de opciones sanas donde prácticamente no hace falta manchar y consigues una cena rica y que encima que  llena. El microondas es una buena opción para estas ocasiones.

Para esta primera cena que os proponemos simplemente selecciona de tu frigorífico, perfectamente acondicionado con productos deliciosos, los vegetales que más te apetezca cenar esa noche. Nosotros te recomendamos el calabacín, la berenjena y los pimientos.

El zucchini o calabacín está compuesto de un 95% de agua y no tienen prácticamente aporte calórico, por lo que puedes consumir todo lo que quieras. Lo mismo le pasa a la berenjena apenas aportan calorías y son altamente saciantes.

Por su parte los pimientos rojos te ayudarán a dormir bien, ya que contienen vitamina B6 y magnesio que combinados reducen la ansiedad y el insomnio. Colócalos sobre un plato o fuente que entre en el microondas. Échales una cucharadita de aceite de oliva y especias al gusto. Caliéntalo unos 4 minutos y ¡listo! Ten en cuenta la potencia de tu aparato, ya que suele varias mucho de un modelo a otro.

TORTILLA DE ESPINCAS Y CHAMPIÑONES

Las espinacas son de esos alimentos que cuesta llevarlos a la mesa. No suelen gustar mucho a los niños. Y cuando nos hacemos mayores tratamos de evitarlas, porque nos obligaban a comérnoslas. Pero ¿y si te dijeran que son un potente antiinflamatorio?

Entre los diversos beneficios de las espinacas están su alto contenido en minerales, vitaminas y fitonutrientes, entre los que se incluyen el potasio, magnesio, hierro o calcio. Para esta opción de cena ligera y sana sí tendremos que sacar un par de utensilios de cocina, pero creedme, merece la pena.

Para la hora de la cena, lo mejor es optar por tomar más proteínas que carbohidratos, ya que nuestra siguiente acción después de comer será sentarnos en el sofá. Así que optaremos por claras de huevo, un buen puñado de champiñones y, como no, las espinacas.

¿Qué mejor que ayudar  a nuestra actividad metabólica? Pues esta es una de las razones por las que los médicos también nos recomiendan el consumo de espinacas, su alto contenido en proteínas. Todo bien revuelto y a la sartén. ¡Es fácil! Esta combinación la conocemos bien.

ROLLITOS DE SALMÓN Y ENSALADA

Otra manera de divertirnos comiendo y creer que estamos disfrutando de un plato totalmente diferente es jugar con la composición del plato. Si yo hubiera titulado este apartado como, “ensalada de salmón ahumado” seguramente habrías pensado, claro obvio las ensaladas siempre son una buena opción para estos casos. Pero, ¿y si hacemos un pequeño relleno de lechuga, tomatitos cherry, pepinillos agridulces, bien troceados, y alcaparras y lo enrollamos con las lonchas del salmón ahumado?

Sería lo que le hubiéramos puesto a una ensalada normal, ¿cierto? Pero el hecho de enrollarlo y colocarlo estratégicamente sobre el plato, ya le da un aire diferente que nos hará disfrutar de la cena y de cómo lo hemos elaborado. Además, siempre lo puedes acompañar de un quesito fresco 0% y unas rodajas de tomate más grandes con su chorrito de aceite de oliva. ¡Perfecto incluso para dejar hecho para el día siguiente!

COCKATIL DE GAMBAS

Una buena recomendación, para este tipo de cenas y que podrían servir como rutina que nos ayude a llevar una vida saludable, es dejar cortada la lechuga en tiras. Comprar las típicas bolsas donde ya te viene lavadas y cortadas, puede ser una opción, sin embargo no duran tanto y se ponen malas en seguida. Suelen contener demasiada agua y a la larga no es tan buena compra.

Por eso, tener un tupper donde guardar parte de la lechuga ya cortada nos sacará de muchos apuros cuando lleguemos tarde a casa y no sepamos qué preparar. Para esta cena, solo necesitaríamos unas gambas, maíz, brotes de soja y un poco de mayonesa light.

La mayonesa, la podemos elaborar nosotros y así será mucho más sana. Pero como lo que buscamos es ser rápidos, optemos por una mayonesa ligera y echemos solo una cucharada pequeña de postre. Lo podemos aderezar con pimienta, albahaca u orégano y le daremos ese toque diferente a la mezcla. Además si añadimos una cucharadita de zumo de limón la intensidad de sabores te hará disfrutar muchísimo de la comida.

SALMÓN CON ALMENDRAS

Son mundialmente conocidos los beneficios que tiene el salmón. Destaca por su alto contenido en ácidos grasos Omega 3, ayudando a proteger  nuestro corazón y nuestras arterias, destaca por su delicioso sabor y su textura… ¿qué puedo decir que no se haya dicho ya? Por eso lo he incluido en dos de nuestras recetas ligeras.

Aunque sí es cierto que de la mayoría de carnes de pescados azul que tienen este tipo de beneficios, el salmón es uno de los más completos. Contiene vitaminas como la B12 y B6, además de minerales como el magnesio, calcio o selenio. Pero lo que convierte este plato en atractivo es su facilidad elaboración y su aporte saciante, lleno de nutrientes.

Cortamos unos champiñones en láminas y las colocamos sobre papel de horno, lo rociamos con una cucharadita de postre de aceite de oliva, especias al gusto y colocamos el solomillo de salmón encima. Sobre éste, ponemos un puñado de almendras peladas y sin tostar y directamente al horno unos 20 minutos. Cuando veamos que está hecho, dejamos enfriar. Y después lo único que tenemos que hacer es situarlo sobre una base de lechugas aliñadas con vinagre balsámico de módena, mezclado con una cucharadita de miel.

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Por Confirmado: MariGonz