La política, el lugar de los peores

Posted on: septiembre 26th, 2023 by Lina Romero No Comments

Hay que educar a los más jóvenes para que revitalicen los partidos políticos

 

Los jóvenes en la actualidad son reacios a integrarse a los partidos políticos tradicionales. Foto: Confidencial | Archivo.

 

Algunos meses atrás tuve un encuentro con una delegación de participantes en el “Programa de Liderazgo de América Latina” de Georgetown. Eran casi 40 jóvenes provenientes de 15 naciones del hemisferio, dos tercios de ellos mujeres. Todos en sus treintas, con grados universitarios, bilingües y muy articulados. En suma, una muestra representativa del mejor capital humano de la región, los líderes del futuro.

 

 

De hoy, en realidad. Con sus carreras en el tercer sector, el mundo “non-profit”, sus emprendimientos y plataformas abordan una amplia agenda social: salud y derechos reproductivos de la mujer; educación en computación para niños de familias de escasos recursos; protección del idioma nativo de poblaciones indígenas; capacitación en destrezas empresariales para campesinos; reciclado de desechos para contribuir a la conservación medioambiental, entre otros.

 

 

Mi clase en dicha sesión trató sobre la temática del desarrollo, el autoritarismo y la democracia. Analizamos las diferentes etapas históricas y sus rasgos principales; la recurrencia de los golpes militares; las dificultades para construir instituciones efectivas y, en consecuencia, la persistente inestabilidad económica y política. Y ello aún décadas después de las transiciones de los ochenta.

 

 

Una vez abierto el debate, comenzaron a surgir ejemplos de sus respectivos países. La discrecionalidad del Ejecutivo, el fraude electoral, la manipulación de la justicia, la pobreza y la desigualdad, la violencia y la vulneración constante de los derechos humanos, la persecución de periodistas, la pésima calidad del proceso legislativo y otros factores que revelan porqué la democracia en la región es tal sólo nominalmente. Ponga el lector nombre propio de su elección a cualquiera de estas desviaciones de la democracia constitucional, ellos lo hicieron.

 

 

En ese momento les pregunté directamente: ¿Quién de ustedes hace política? Se extrañaron y me miraron con cara de sorpresa, el salón quedó en silencio. Alguien alcanzó a decir: “todos nosotros hacemos política, somos parte de la sociedad civil. En nuestro trabajo cotidiano fomentamos el empoderamiento de grupos sociales desfavorecidos”.

 

 

Volví al tema. Sí, claro. Pero yo preguntaba por hacer política en un partido. Ser militantes de una idea y de un programa. Organizar y movilizar voluntades, diseñar campañas electorales, hacer proselitismo, fiscalizar elecciones, apoyar candidatos…eventualmente, “ser” candidatos y competir. O candidatas, claro. Todo eso que hacen los partidos políticos.

 

 

Otra vez silencio. Ahora tres manos se alzaron, quizás cuatro. ¿Y por qué tan pocos, pregunté? Es decir, ¿por qué la vasta mayoría de ustedes no se involucran en un partido, canal indispensable de participación en democracia? La respuesta fue casi unánime: “la política de partidos es mediocre, opaca, estéril, corrupta y en muchos casos capturada por el crimen”. Todo lo cual tiene bastante de verdad.

 

 

Es una anécdota, pero reveladora de un patrón: la prédica de la sociedad civil como agente, vehículo y actor democrático por excelencia; argumento que se ha hecho dominante. Nos dice que la sociedad civil es el lugar de la virtud, donde el capital social surge y la solidaridad entre los individuos se disemina, condición necesaria, si no suficiente, para la construcción democrática.

 

 

Sabemos que una sociedad civil plural y participativa es necesaria, mas no suficiente, para la democracia. La literatura está plagada de ejemplos sobre la alta densidad de capital social en organizaciones de la sociedad civil no precisamente democráticas, ello en diversos tiempos y lugares: del Ku Klux Klan a la mafia, del Opus Dei a Hezbollah, entre otros. O sea que hace falta más que sociedad civil para tener democracia.

 

 

Lo que hace falta es tener organizaciones capaces de canalizar la representación social, agregar intereses diversos, seleccionar y formar dirigentes, coordinar la competencia electoral, financiar campañas, elaborar propuestas e ideas, negociar diferencias y crear coaliciones capaces de gobernar; o sea, partidos políticos.

 

 

El problema en esto es la clásica profecía auto-cumplida. Pues si los mejores, los más capaces, los idealistas, los más honestos y altruistas rechazan los partidos, sin duda que la política será el lugar de los peores. Será, como es, el lugar de los vivos, los corruptos, los que tienen precio hasta para ser mercancía del crimen organizado.

 

 

La lógica en cuestión termina siendo anti-sistema. Como los que estigmatizan la política como una “casta”, concepto de moda. Claro que para ocupar esa reserva de mercado y convertirse en casta ellos mismos. El poder en la no-democracia es monopólico, en democracia es compartido. Solo los partidos de verdad practican compartir el poder.

 

 

Si queremos democracia hay que educar a los más jóvenes para que revitalicen los partidos políticos. Y hacer de la política el lugar de los mejores, de la virtud como en Aristóteles.

 

 

*Publicado originalmente en Infobae.

Ramon Guillermo Aveledo:Petróleo venezolano, nuevas y grandes definiciones

Posted on: septiembre 22nd, 2023 by Lina Romero No Comments

El pasado diez de septiembre se cumplieron sesenta y tres años de haberse fundado en Bagdad, la capital iraquí, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), en cuya gestación tuvo papel protagónico un gran estadista venezolano, entonces ministro de minas e hidrocarburos Juan Pablo Pérez Alfonzo junto a su colega saudita el jeque Abdulah al-Tariki. Hoy el mundo es otro, la industria del petróleo ya no es lo que solía ser en 1960 ni la OPEP tampoco, pero los países miembros de ésta representan el 43% de la producción y el 81% de las reservas mundiales de petróleo.

 

 

Entonces, la producción petrolera venezolana superaba los tres millones de barriles diarios, éramos el primer exportador de petróleo en el planeta. Hoy, si bien tenemos reservas muy cuantiosas -puesto trece según WorldEnergyTrade-las cifras de producción y exportación que varían si son gubernamentales o independientes,deben andar por los setecientos mil barriles diarios.Ocupamos el décimo lugar en la OPEP y para 2021, exportamos el 1.1% de lo vendido en el mercado mundial. Paradójicamente, ahora somos importadores netos de combustible.

 

 

La política petrolera nacional fue siempre un tema central en el debate de políticas públicas, desde la apertura democratizadora posterior a la muerte de Gómez. Las grandes decisiones en ese campo fueron producto de abundante estudio, intensas y extensas discusiones y de un momento en adelante, búsqueda de amplios consensos. Recordemos nombres como Gumersindo Torres bajo el gomecismo, la reforma del cuarenta y tres cuando Medina, Uslar y Pérez Alfonzo, por la Nacionalización Betancourt y Caldera en el Senado, Calderón Berti y Hernández Grisanti cuando la internacionalización, Giusti con la apertura impugnada por Rodríguez Araque. Soy testigo de lo que en mis años de parlamentario oí decir al ortodoxo Canache Mata, al discreto y estudioso Tenorio o al vehemente Silva Calderón, más lo que aportaron mis compañeros de bancada Gustavo Tarre o Ramón José Medina

 

 

Cada avance en la participación venezolana, la creación de la CVP, de la Flota Petrolera Nacional, el progresivo control de la industria, la política de no más concesiones, el trato hemisférico, la legislación sobre reversión, la nacionalización de la industria, la creación de PDVSA y su ulterior transformación corporativa, la internacionalización, el cambio del patrón de refinación y la apertura petrolera, todos fueron motivos de debate en los que diversas posiciones expresadas con libertad, sustanciaron decisiones sólidas con resultados conocidos para el país y reconocidos con respeto a nivel internacional.

 

 

La influencia venezolana en el liderazgo de la OPEP se combinó siempre, con equilibrio sensato, con la condición de proveedor confiable por su responsabilidad y por sus decisiones de política pública que aseguraron una gerencia profesional estable para la industria con su correspondiente manejo del negocio.

 

 

La situación actual de Venezuela, de su industria petrolera, del futuro energético de un mundo en transición, así como del papel que en ese contexto podemos jugar, imponen que volvamos a discutir en serio entre nosotros. En serio, es en serio. Dentro de la Constitución y dejando de lado las consignas y los prejuicios, la demagogia o la precipitación, aprendiendo de nuestra propia historia, mirando a profundidad nuestros retos y posibilidades para tomar decisiones con sentido estratégico perdurable, en beneficio de todos los venezolanos, los de ahora y los de mañana.

 

 

 

 Ramón Guillermo Aveledo

Laureano Márquez: Lo que faltaba: Los zombis despiertan

Posted on: septiembre 10th, 2023 by Lina Romero No Comments

 

Una inquietante noticia aparece en los titulares de esta semana: «Los zombis despiertan de nuevo para convertir al mundo en una pesadilla».

 

 

Inicialmente podría creer uno que la información se refiere a la llamada «droga zombi», que en Estados Unidos ya ha causado miles de muertes.

 

 

Se trata de una droga que combina el fentanilo, un «potente opioide agonista sintético» (tranquilo, lector que yo quedé igual que usted), con otras sustancias o medicamentos, produciendo severas alteraciones del sistema nervioso y un conjunto de daños cerebrales que terminan convirtiendo a sus consumidores, literalmente, en zombis.

 

 

Sin embargo, la noticia no se refiere a esta tragedia, sino a otra, también preocupante que tiene que ver con el calentamiento global que va derritiendo el hielo en la casa de Santa Claus.

 

 

Resulta que existe una capa de hielo llamada permafrost, que, como su nombre sugiere, es permanente, eterna, por decirlo desde nuestra efímera condición.

 

 

Al derretirse esta capa deja al descubierto un suelo que puede tener hasta 650.000 años oculto bajo el hielo.

 

 

Quedan entonces al desnudo restos orgánicos que han estado cubiertos durante miles de siglos. Esto incluye no solo huesos y valiosos colmillos de marfil de mamut, sino también algunos virus que han permanecido allí dormidos durante miles de años.

 

 

Parece que se han hallado hasta siete virus zombis inactivos atrapados en los hielos de Rusia (lo cual le da a uno un sustico adicional).

 

 

Lo inquietante es que se trata de virus desconocidos de los que se ignora el alcance que podrían tener en los seres humanos. Y como «el picado de culebra cuando ve bejuco tiembla», para nosotros que acabamos de salir de una pandemia por uno de esos bichos raros, es un asunto digno de tener en cuenta, el de estos descubrimientos, aunque el titular de El País de España resulte un pelo exagerado.

 

 

Y hablando de pelos, uno de estos virus zombis apareció, por cierto, en el pelo de un mamut.

 

 

Y como el de los colmillos de marfil prehistórico, puede ser un gran negocio, nada tendría de raro que ambiciosos aventureros excaven esa «nueva tierra», y en busca de billete encuentren también un «nuevo» virus.

 

 

Del concepto zombi, cuyos orígenes se remontan al vudú haitiano y que consistía en resucitar a un muerto para convertirlo en esclavo a disposición de quien le ha devuelto al mundo de los vivos, rescatamos esta última idea de esclavitud, de las drogas o de los virus. Atentos pues.

 

 

 Laureano Márquez 

 

Artículo publicado en el diario TalCual

Ramón Guillermo Aveledo: Canache, un señor

Posted on: septiembre 8th, 2023 by Lina Romero No Comments

 

Del incansable ciudadano que acaba de partir a los noventa y seis años nunca fui copartidario pero por conocerlo, al despedirlo predomina en mí un sentimiento de homenaje a su trayectoria.

 

 

Carlos Canache Mata fue demócrata cabal, demostrado en su defensa teórica y práctica de los valores de libertad, convivencia y respeto que son inherentes al gobierno libre ordenado mediante el derecho. Defensa sincera,comprobable en su disposición permanente a dialogar con todos de todas las tendencias, aún las más discrepantes o enfrentadas con las suyas, de la cual es testimonio su dilatada vida parlamentaria como miembro, líder de su fracción y Presidente del cuerpo. En el Congreso, precisamente, me encontré con él y compartí trabajos en una Cámara de Diputados donde el debate, a veces enconado, nunca impidió establecer relaciones de respeto personal e incluso amistad entre adversarios.

 

 

En aquel parlamento que ahora extrañamos más de una vez me sentí inconforme, como es lógico pues quise servir mejor a mis representados y al país todo, pero la comparación con lo que ha venido después le es tan favorable que hasta corremos el riesgo de olvidar errores que como sociedad estamos obligados a superar. El Congreso de la República de Venezuela no era perfecto, a veces ni siquiera suficiente para lo que el país requería, pero no era un simulacro.

 

 

Socialdemócrata de verdad era el acciondemocratista Canache Mata como político, como parlamentario y como intelectual. En la variante criolla más exitosa hasta hoy de esa tendencia, hay especificidades típicamente adecas que conforman la tesitura vernácula de ese partido y que acaso encierren una proporción nada desdeñable del secreto de una adhesión que si bien no tan potente como en otro tiempo, podríamos calificar de antropológica.

 

 

Canache, lector estudioso de teorías, doctrinas y experiencias internacionales, era adeco hasta los tuétanos, pero también cultivado en las ideas de la socialdemocracia y paladín de ellas en cualquier escenario. Recuerdo bien un debate sobre política petrolera, en el que se batió argumentalmente por la visión más estatista del precepto constitucional de control venezolano sobre la industria. Por más flexible y abierta, mi posición junto a la de mis compañeros era distinta, pero nadie dudó de la sincera honorabilidad de su posición.

 

 

De este hombre decente, quiero finalmente dejar constancia de su vida modesta y su condición de padre amoroso. Es lo que vi.

 

 

 Ramón Guillermo Aveledo

No es miedo, es pánico lo que le tienen Maduro y Cabello a María Corina

Posted on: septiembre 4th, 2023 by Lina Romero No Comments

 

Pasan los días y en un mes y tres semanas la  oposición venezolana eligirá al candidato de unidad que deberá enfrentarse a finales de diciembre del año próximo al candidato oficialista que, “por ahora”, es el actual presidente, Nicolás Maduro.

 

Y señalo el “por ahora”, no solo porque es un dicho emblemático que dejó para la historia el fundador del partido o movimiento que desde febrero de 1998 controla con mano de hierro el poder en Venezuela (el difunto teniente coronel, Hugo Chávez), sino porque casi año y medio es demasiado tiempo para que el candidato de un movimiento cívico-militar (o militar-cívico) como el PSUV y su brazo armado, puedan mantenerse firmes, inquebrantables e impertérritos esperando que su jefe los llame a votar o a defender un triunfo que, sin duda alguna, será fraudulento porque todos las encuestas lo dan perdedor con más de 80 puntos.

 

En cuanto a la oposición democrática, creo que no hay una sola opinión dentro o fuera del país que no comparta la idea o estrategia de escoger en unas “Primarias” donde participen todas las organizaciones que deseen medirse, al candidato que se enfrentaría con Maduro, ahora con el apoyo de todos los partidos que participen, al abrigo de las divisiones y de la pluralidad de opciones que, al fraccionarse, logran que la carta del oficialismo sea la ganadora, anque obtenta menos votos, frente a una oposición mayoritaria pero dividida.

 

Quiere decir que, en diciembre del 2024, serán dos los candidatos a demostrar que cuentan con el voto de las mayorías nacionales: uno del gobierno y otro de la oposición.

 

Pero la experiencia de las “Primarias” ha proporcionado otros beneficios o ganancias para la oposición, pues viniendo de un colapso o fracaso como el del gobierno Interino (o “Interinato”), que se pensó comportaba las piezas y jugadas para poner fin a la dictadura castrochavista que para 2019 contaba 20 años en el poder -y como era de esperarse tuvo el apoyo de más del 70 por ciento de los venezolanos y fue respaldado y reconocido por 50  países de la Comunidad Internacional-pero disuelto a comienzos del año en curso por la Asamblea Nacional constitucional y legítima, al no lograr los objetivos propuestos al país, pasando a inscribirse en la ya larga lista de frustraciones y fiascos con que la oposición viene desde la primera rebelión en firme que se le hizo a la dictadura, la explosión popular del 11 del abril del 2002, haciendo un tanto “o mucho” como aquel Sísifo del mito griego, condenando por los dioses a subir una cuesta con una enorme piedra sobre los hombros para dejarla caer al llegar a la cumbre, regresarse a buscarla, volverla a subir y dejarla caer de nuevo .

 

Pues bien, las “Primarías” planteadas en un clima de pavorosa incertitumbre luego de la caída del “Interinato”, en una atmósfera de pesimismo que se pensó se instalaría por años, prendió como una débil lucecita, como un cocuyo o luciérnaga que fue incendiando el país, abrasándolo de un extremo a otro y hoy lo tienen de nuevo en la calle y ganado para un esfuerzo que, sin apartarse de los principios de la Constitución, puede obligar a Maduro a entregar el poder porque lo decide una mayoría de votos y sin acarrearle a los venezolanos más violencia, ni desesperanza.

 

Sin detenernos a averiguar quiénes son y de dónde salieron los estrategas que convencieron al gobierno y a la oposición para darle curso a la propuesta, si debemos subrayar que los disensos surgidos en el curso de su implementación, como la discusión si debían hacerse de acuerdo a Ley Electoral vigente, y por tanto, conducidas y realizadas por el CNE que es la máxima autoridad para entenderse con el tema electoral en el país, pues luego de un breve forcejeo que fuera la oposición con un organismo ya constituido, la Comisión Electoral Nacional, CEN, presidida por el abogado, Jesús María Casal y diez miembros propuestos por los partidos, los que han tomado la responsabilidad para que el 22 de octubre próximo se designe el candidato único que se medirá con Maduro.

 

Quiero subrayar antes de pasar a formular las críticas y bemoles que percibo en la campaña, que el clima en general es bueno, que los partidos y candidatos postulados pasan de 15 y que salvo los empellones típicos de esta clase de eventos, las cosas marchan bien.

 

Debemos resaltar también -y esto es de la mayor importancia- la movilización popular que día a día rodea a los candidatos y sus partidos, los cuales, no hay un solo rincón donde no hayan encontrado apoyo, si no para sus candidaturas, si para las “Primarias”, que asumen como la batalla imposible que la dictadura gane legalmente y de demostración de que Venezuela es de los venezolanos y de su democracia.

 

Una sorpresa excitante en este contexto ha resultado la candidatura de María Corina Machado, Presidenta del Partido “Vente Venezuela”, y la cual puede ostentar aún la etiqueta de líder política nacida y formada en las últimas generaciones, pues con una pasantía de apenas 6 años en la organización “SUMATE” que fundada en el 2004, le hizo un seguimiento sistémico a la plataforma electrónica con que la empresa Smartmatic estrenó en Venezuela una dictadura electoral basada en el fraude, pudo ya para el 2010 retirarse de lo puramente técnico del tema eleccionario, y fundar un partido político, “Vente Venezuela” que palpita hoy en todos los pueblos y ciudades de Venezuela.

 

Fueron 14 años de vida política que le permitió recorrer y conocer todo el territorio nacional y sus gentes, mientras se vio involacrada en todos los hitos de la política nacional e internacional, como la muerte de Chávez y su sucesión por Maduro en el primer semestre del 2013, acompañar a Henrique Capiles en su negativa a aceptar el fraude con que el nuevo dictador alegó haberle ganado las elecciones del 15 de abril, liderar junto con Leopoldo López y Antonio Ledezma la rebelión conocida como “La Salida”, estar en la primera linea de combate cuando la oposición ganó por mayoría absoluta la Asamblea Nacional el 6 de diciembre del 2015, y no haberse escondido ni escabullido de todas las batallas que se llevaron a cabo por la libertad de Venezuela desde el 2016, hasta el 2022 cuando pareció (después del fracaso del Interinato), que todo había llegado a su fin.

 

De modo que, no puede puede provocar extrañeza, ni confusiones, encontrar hoy que María Corina Machado encabeza las encuestas para las “Primarias” con puntajes del 50, 60, 70 que la colocan con unas preferencias entre las mayorias que ya resulta imposible de alcanzar.
Para corroborarlo, nada como acompañarla por los pueblos de Venezuela, sea personalmente, o siguiéndola por las redes sociales, por las coberturas de medios audiovisuales o impresos o los comentarios que surgen en cualquier esquina sobre este huracán que ya se siente cambiando la política, la historia y el rumbo que tomará el país el país.

 

Es es el fenómeno que está paralizando, no de miedo, sino de pánico a Maduro, y a su segundo al mando, Cabello y los incita a urdir cualquier ilegalidad para que María Corina no esté ni en las “Primarias”, ni en las presidenciales.

 

Y aunque cueste creerlo, buscando aliados y encontrándolos entre líderes y partidos, que saben no tendrían ningún chance para seguir adelante con sus proyectos, si María Corina es la contendiente con la que tendrían que vérselas en las máquinas o mesas de conteo el 22 de octubre próximo en que los votantes decidirán quién será su candidato para conducir el país.

 

Menudo atajo que seguro sacará a mucho segundón de la política, o lo integrará al bando del perdedor Maduro, mientras Venezuela respalda esta líder sin tacha en su ya larga carrera política y decidida a darle a Venezuela otra cara, otro rumbo, otro destino.

Manuel Malaver 

Ramón Guillermo Aveledo: Violencia política

Posted on: septiembre 1st, 2023 by Lina Romero No Comments

 

 

Teñida de sangre la campaña ecuatoriana. El asesinato a plena luz del día del candidato Fernando Villavicencio conmovió la opinión pública nacional y latinoamericana. Ya antes había muerto violentamente el popular alcalde de Manta Agustín Intriago, de un partido local. Después en Esmeraldas matan a Pedro Briones, dirigente regional del Movimiento de la Revolución Ciudadana.

 

 

El problema es más grave. En la nación sudamericana un clima de creciente inseguridad se extiende y profundiza. En los crímenes mencionados se habla de la injerencia de narcotráfico, de sectarismos en la contienda política o incluso de la confluencia de ambos, por la penetración corruptora del sucio negocio en el tejido político y social. El expresidente Andrés Pastrana ha advertido la “colombianización” del Ecuador.

 

 

El fenómeno no es para tomarlo a la ligera. En nuestra región la violencia política no es rara y la institucionalidad para prevenirla y corregirla carece de los niveles de solidez y credibilidad en la ciudadanía,necesarios para cumplir su función eficaz y oportunamente. En 2022 fue asesinado durante su luna de miel en Cartagena el fiscal paraguayo Marcelo Pecci, un crimen por encargo; en Brasil detuvieron al sindicado como autor intelectual del delito, prófugo de la justicia guaraní. En Argentina ese año se intentó asesinar a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y en 2018 había sido ultimado en su casa el fiscal Alberto Nisman que la investigaba. De 2018 a 2022 se contaron en México dieciocho alcaldes y ocho diputados asesinados.

 

 

Podríamos mostrar mucho más, con víctimas diversas en la opinión, con actores dentro o fuera del poder. Desde nuestro país haríamos mal en verlo como una cosa distinta y distante. Estamos en precampaña electoral y asoman eventos que no permiten la indiferencia. Los modelos intolerantes,el discurso que la justifica, la promueven directa o indirectamente. También la ausencia de condena pública a los hechos y la impunidad. Todos son factores que confluyen en un ecosistema amigable a la violencia.

 

 

Las claves son, principalmente, el rechazo social a la violencia, venga de donde venga y las instituciones fuertes, confiables, capaces de prevenir y resolver. Es interés de todos, salvo de los delincuentes, poner atención a la violencia vinculada a la política que es el colmo de la antipolítica. Cuando se desborda se complica hasta lo incontrolable. Mirarse en ese espejo roto nunca está de más.

 
 Ramón Guillermo Aveledo

Carlos Canache Mata

Posted on: agosto 29th, 2023 by Lina Romero No Comments

 

 

A pesar de los múltiples problemas físicos sufrido en los últimos meses, especialmente en las dos semanas pasadas, el domingo asistí por un buen rato al velorio del gran amigo y compañero diputado por muchos años, Carlos Canache Mata.

 

 

Nos conocimos hace cincuenta y cinco años aproximadamente. Debutaba yo como diputado por el Estado Zulia y ya él lo era, creo que por Anzoátegui, su tierra natal. Es poco lo que puedo agregar a lo que ya ha sido escrito y expuesto en los medios comunicacionales, de toda índole, sobre la vida y obra de tan insigne compatriota. Nadie exagera, Más bien creo que nos quedamos cortos cuando nos referimos a los haberes de Carlos dentro y fuera del parlamento, dentro y fuera de Acción Democrática. En la vida en general.

 

 

Necesitamos que las nuevas generaciones de políticos y de dirigentes económicos y de la vida social, conozcan sobre su vida y obra. En este tiempo no hay demasiados ejemplos lo cual obliga a proceder de acuerdo a la necesidad señalada.

 

 

Además de muchas otras cosas, recuerdo como si estuviera sucediendo, cuando me correspondió ser presidente de la Cámara de Diputados durante cuatro años en el primer gobierno de Carlos Andrés Pérez. Tuvimos la fortuna de contar con Carlos como primer vicepresidente y a otro excelente amigo, Humberto Celli, como segundo Vicepresidente. Creo que la gestión de ese tiempo es recordada muy favorablemente y me atrevo a decir que en un alto porcentaje se debió a la relación entre nosotros.

 

 

Nos tocó, entre muchas otras cosas, dirigir el debate correspondiente a la nacionalización del petróleo mediante la Ley que Reserva al Estado la Industria y el Comercio de los Hidrocarburos, la Ley de Régimen Municipal y, para sintetizar, más de cien proyectos convertidos en leyes de la República. Por supuesto que el Senado, bajo la presidencia de otro gran venezolano, Gonzalo Barrios, fue protagonista de primer orden en esta tarea. También en otras, de carácter netamente político libradas en sesiones conjuntas de ambas Cámaras.

 

 

Para mí es inolvidable el honor de resultar Orador de Orden en el homenaje que la nación le rindió a Carlos Canache Mata con motivo de su cumpleaños noventa. Fue en la sede del Colegio de Ingenieros. Lo hice a petición personal del cumpleañero, amigo entrañable de tantos años.

 

 

Para Celinda, su esposa, para sus hijos, para el resto de sus familiares y amigos, mi palabra de solidaridad. Conmigo cuentan incondicionalmente… Venezuela está próxima a vivir momentos muy duros y peligrosos. Más allá de lo electoral, debemos estar preparados para triunfar en todos los escenarios por desarrollarse. Esperamos que todo sea en paz y dentro de los principios generales que alimentan a la democracia. Ojalá y el régimen se acoja a estos valores y con su conducta ayude al propósito general de la Nación.

 

 

Oswaldo Álvarez Paz

 

Milei, o el regalo de Argentina para la mafia criminal del «Socialismo del Siglo XXI»

Posted on: agosto 20th, 2023 by Lina Romero No Comments

 

No están las clases medias de América Latina que por lo general son las que nutren las filas de partidos, organizaciones y movimientos políticos democráticos, habituadas a tropezarse con líderes furibundos como este que el domingo se impuso con un 32 por  ciento en la intención de voto para alzarse con la presidencia de la República Argentina.

 

Hablamos de Javier Milei, un economista de 52 años, cuya carta de presentación podría empezar aclarando que se trata de un político “outsider”, llegado a limpiar los establos de Augias de la política ríoplatense y un milagro más del quehacer que se plasma en militancia, disciplina y formación ideológica en el vagabundeo que es típico de un país pródigo en gauchos, payadores y compadritos.

 

Para arrimar más exotismos recordemos que Milei fue baterista de un conjunto de rock, arquero de  un equipo de fútbol y un joven quinceañero en la fatídica década de los 80, veinteañero cuando Menem dolarizó la economía e reintrodujo el primer atisbo de economía de mercado que se había quedado en la segunda mitad en el siglo XIX y provechoso alumno de economía en la Universidad de Belgramo cuando 11 años después, el mismo Menem, de La Rúa y Cavallo dejan un país en ruinas, con el regreso a un peso en hiperinflación, una deuda impagable, la declaratoria de default y la vuelta en el 2001 de los radicales peronistas que parecían evaporados en el movimiento Montoneros, pero no, estaban escondidos, agazapados y esperando el fracaso del modelo capitalista para ahora implantar el “socialismo a la cubana” en forma.

 

Estos recién venidos tienen nombres, Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner,  y se trata de un matrimonio, abogados los dos, que no cumplen la cuarentena de años, y que dicen haber participado en la “Guerra Sucia” desde las aulas de la secundaria y que su destino es restaurar el “peronismo primigenio”, el de “Perón y Evita” y que primero volverá a arder Troya antes que los liberales y los capitalistas vuelvan al poder en la Argentina.

 

En otras palabras, que parecía cosa de locos y condenada al fracaso, sino hubiera sido porque en Venezuela, un país situado al norte de la América del Sur, estaba gobernando desde hacía un año un teniente coronel, Hugo Chávez, quien proclamaba que tenía a Perón entre sus principales inspiradores y que su objetivo era restaurar en la América de Bolívar y San Martín “el socialismo que había quedado enterrado en los escombros del Muro de Berlín y el colapso de la Unión Sovietica”.

 

Vale decir que, mejor tabla de salvación no se podía encontrar, porque se trataba de unir las ilusiones, los odios, las esperanzas y las furias de un país rico, que nadaba en petrodólares legados por 40 años de gobiernos socialdemócratas, con otro arrasado por 11 años de dolarización y un conato de neoliberalismo que no pudieron contra una cultura de la corrupción instalada desde el primer día que Perón tomó el poder a  comienzos de los 40.

 

De ahí que pueda afirmarse que a partir de este encuentro, el de los esposos Kirchner con Chávez, nace otra Argentina y otro peronismo, el que se conecta con la aventura subcontinental que nace con “El Foro de Sao Paulo” (1990) y continúa con el ascenso al poder de Chávez (1998) y sigue con el de Lula, Evo Morales, Rafael Correa, Daniel Ortega y la consolidación de la dictadura de los hermanos Castro en Cuba que ya contaba 60 años.

 

En cuanto a este estado novo  peronista y argentino, que secunda a Chávez y a Lula en la expansión del socialismo y, de paso, encuentra un nuevo aliado en las FARC de Marulanda para incluir al país de Gardel en la internacional del narcotráfico, no hay una oposición formal ni en la izquierda ni en la derecha, ni en socialismo ni en el capitalismo que pueda hacer frente a los vientos que están llevando al país a un nuevo abismo.

 

Y es en este tramo, mediados de los 2000 más o menos, donde aparece un nuevo actor, músico y futbolista a medias, Javier Milei, pero con buena formacion de economista, llevado por un paleolibertario gringo, Murray Rothbard, a conocer  los textos sagrados de la Escuela Austriaca (Mises, Hayek, Ropke), donde encuentra todo el arsenal de ideas para atacar al estado, al colectivismo, la socialdemocracia, los políticos y defender la  propiedad, la libertad, la individualidad y la democracia sin interferencias marxistoides ni keynesianas.

 

Pero ¿dónde comunicar todo esto y a quién, si Milei no tiene partidos, ni periódicos, ni círculos de amigos, ni apóstoles que prediquen su evangelio?
Milei mira a su alrededor y consigue que una radio le transmita un programa, funda un partido (“La Libertad Avanza) y poco a poco empieza a ser llamado desde los canales de televisión de Youtube que, dada la quiebra de los canales de TV públicos y privados, se convierten en las nuevas voces desde las cuales se puede hablar de todo. En estos desvaríos escribe una obra de teatro y la escenifica el sólo y ¡oh, sorpresa!, en cuanto audiencia, es un rotundo éxito.
De modo que, de estas andanzas, lo que queda claro es que Milei, al igual que Mussolini, Castro o Chávez, es un tremendo actor  y como el “kirchnerismo”, al aliarse con el “Socialismo del Siglo” le ofrece una audiencia continental, es un conductor de programas cuyo talante e ideas se siguen con interés en Brasil, Perú, Colombia, Venezuela y Estados Unidos.

 

Algo más importante: no hay un solo país en América y Europa donde no se quieran oir insultos gruesos, fuera de lo políticamente correcto, lenguaje de arrabal (en porteño), contra el peronismo kirchnerista y el “ Socialismo del Siglo XXI”, y ahí estaba Milei para expresarlos y a gritos.
Por eso, en las elecciones  del domingo pasado (que mide la intención de voto para la primera vuelta del 22 de octubre próximo), el imposible Miley se alzó con dos votos por encima de Patricia “Pato” Bullrich de la centro derecha y con tres para derrotar a, Sergio Massa, de la coalición oficialista de Alberto Fernández y Cristina Kirchner.

 

¿Qué pasará el próximo 22 de octubre cuando haya que tener maquinaria para llevar electores a votar y después para contar los votos y hacerlos valer?
Es evidente que ahí, en ese momento, muchos analistas, encuestadores e investigadores desconfían de las posibilidades de Milei y se preguntan si no estamos frente a un nuevo Vit Jedlicka, aquel checo utopista a ultranza que descubrió que en la exYugoeslavia, entre Servia y Croacia, habían quedado ocho kilométros sin asignar a ningún país, y él, Jedlicka, se los asignó a sí mismo y fundó  un nuevo país, Liberland, e invitó a todos los libertarios del mundo a que se mudaran a este paraíso sin precedentes en el mundo conocido y muchos fueron, pero  al poco tiempo volvieron a sus patrias de origen, alegando que no podían vivir sin pagar impuestos, sin tener propiedad, ni estado.

 

Otras ideas en la línea de “Liberland” fue crear una “nación virtual”, que funcionaría en el ciberespacio, con todas las características de la “Utopía” de Tomás Moro, salida del estudio de la arquitecta iraquí Zaha Hadid, quien murió hace algunos años en Miami, o “El libertarismo en Alta Mar”, que funcionaría con barcos inslatados en alta mar donde sus habitantes harían vida marítima y cuyo fundador es Patri Friedmann, nieto del Nóbel, Milton Friedmann.

 

Se equivoca, sin embargo, quien piense que Milei está solo y no tenga detrás un personaje como Carlos Kikuchi, asesor que fue de Domingo Cavallo, o a Ricardo Bussi, su gran aliado de Tucumán, e hijo de Antonio Domingo Bussi, condenado por crímenes de Lesa Humanidad durante la dictadura de Videla.

 

Es cierto que aún no se conoce la opinión sobre Milei de neoliberales argentinos tradicionales como Marcos Aguinis, Alberto Benegas Linch, Mariano Grondona y Antonella Martí, pero dado que en su mayoría apoyaron a Macri, no se descarta que ahora estén con Patricia “Pato” Bullrich.

 

 

Pero no son  detalles que en absoluto le quiten el sueño a Milei, pues le basta con saber que tiene detrás a la nueva subcultura política, nacida de los talk shows y mainstreams de los canales televisivos de Youtube, donde hablar mal, literalmente, despotricar de la izquierda, la derecha y el centro en todas sus expresiones, es lo habitual.

 

Programas donde el trumpismo es la estrella polar y todo lo que rechace el orden establecido y propicie búsquedas que no se sabe exactamente a donde conducirán.

 

Manuel Malaver

Comprensión de Venezuela

Posted on: agosto 15th, 2023 by Lina Romero No Comments

Mariano Picón Salas fue un insigne venezolano, fundador de la Facultad de Humanidades y Educación de nuestra antigua Universidad de Caracas, quien cubre con su hacer intelectual la primera mitad de nuestro siglo XX y el tiempo inaugural de nuestra democracia civil a partir de 1959.

 

 

Para entender a nuestro país nos lega dos imágenes o metáforas que acaso puedan explicarnos nuestro desenlace actual, una tragedia que lleva 30 años de maceración sin opciones inmediatas a la vista. No me atrevo, ni a partir de estas ni de las trazas emborronadas del presente, otear el futuro. Y es que otra vez, como en una suerte de regreso a la hora germinal, se hace pendiente la tarea de encuadernar al país como cuando se nos descuadernó tras el sueño de la Independencia y a raíz de su guerra fratricida; que se repite con la Guerra Federal en procura de una libertad imaginaria y arbitraria que no alcanzamos; y que, al hacernos de ella como ocurriera durante el período de la democracia civil de partidos, entre 1958 y 1998, mal pudimos consolidarla, reformándola a tiempo. No cesa nuestro complejo adánico.

 

 

La primera imagen de Picón Salas es la del cuero seco rural, asimétrico, hecho por un cuchillo gastado. Así describe y nos presenta nuestra diversa geografía. Pero le escuchaba decir a mis mayores que era Venezuela, justamente, ese cuero que se pisa por un lado y se levanta por el otro, la de un ser que busca ser sin alcanzar a serlo o que se encuentra condenado al mito de Sísifo. De allí que al resolver sobre nuestras cuestiones las veamos como cosas de circunstancia y al término, quedemos como si nada hubiésemos hecho.

 

 

La otra imagen se refiere a los artesanos de nuestra historia, nuestras varias ilustraciones, la de 1810 o la de 1830, o la que se cuece en los años inaugurales de nuestro siglo XX, sirviéndole u oponiéndosele al gendarme necesario; pero empeñadas todas en encontrar la conciencia y razón de nuestro presente, invocando al pasado. “La historia cumplió una urgente tarea de salvación”, dice Picón Salas en su Comprensión de Venezuela, que publica en 1949, antes de agregar que, “en horas de prueba o desaliento colectivo se oponía al cuadro triste de lo contemporáneo, el estímulo y esperanza que se deducía del pasado heroico e idealizado”.

 

 

¿Fue esta la apuesta de Hugo Chávez Frías, el del principio, aun cuando temprano advirtiese uno de sus consejeros, Jorge Olavarría, que el camino tomado por este nos devolvería a lo peor del siglo XIX?

 

 

Esa labor de escribanía o de orfebrería de nuestra memoria, acometida en una nación pendiente de amalgamarse – que nace descoyuntada y se forja en las localidades durante la colonia – y que es desmemoriada, por atada a la cultura de presente, explica que ese mismo ser que no alcanzamos lo busquemos con obsesión, tras cada asonada o revuelta revolucionaria.

 

 

Resalta Picón Salas, aquí sí, la síntesis de lo que éramos y de allí nuestros repetidos reinicios, un “caliente almácigo de jefes”. Tanto que, estos medran solos o, de conjunto sólo cuando lo ven útil y circunstancial, mediando el ideal que reducen a simple mito movilizador de voluntades como en el canto monótono que anima el corretear de las reses en el llano. Son los “hilos sutiles” que dicen sostener el sueño bolivariano de la nación grande que nunca ha llegado a ser, pero que no se la abandona como promesa: la Colombia grande imaginada por Francisco de Miranda; la realizada y frustrada por el mismo Bolívar; la Confederación Colombiana de José Tadeo Monagas, una esperanza sin destino; o la que es motivo de plácemes en Guzmán Blanco, después de anunciarse desde Lima la constitución del Congreso Americano, en el siglo XIX; o en el XX, la que intenta organizar desde Panamá el general Marcos Pérez Jiménez e irrita a Estados Unidos, o la Patria Grande pergeñada por Carlos Andrés Pérez, a partir de 1974.

 

 

La idea de la nacionalidad, la grande, lo dice el autor a quien invocamos, es “la verdadera tradición del Libertador”, su “legado moral”, que la entiende como “voluntad dirigida” que ha de mantenerse. Picón Salas –de cuyo último aserto dudamos, aquí sí– la ve e interpreta como “la línea de la nacionalidad” hecha para la defensa “contra los nuevos conflictos de poder y hegemonía que habrán de suscitarse en el mundo”.

 

 

La ilustración pionera venezolana mejor recepta la idea de nación –distinta de la de nacionalidad, de estirpe épica como de raíces muy europeas, a la vez que trágicas– en otros términos, que entresacamos de Picón Salas, a saber, como “conciencia poblada de previsión y de pensamiento que desde los días de hoy avizora los problemas de mañana”.

 

 

Los ensayos o pedacerías que reúne en una obra suya que apenas sobrepasa las 180 páginas, debería ser materia para el examen de todo aquel quien se diga preocupado por doblegar nuestra ausencia de proyecto histórico o la falta de resolución sobre nuestro drama existencial. Ni optamos definitivamente por la prórroga de ese boceto mesiánico de república autoritaria y tutelar heredado de las espadas, bajo la guía de Bolívar –hijo de los “grandes cacaos”, enemistado con nuestra primera Ilustración– ni nos miramos, cabalmente, en la experiencia del hombre de la ruralidad, nuestro Facundo tropical, José Antonio Páez. Este, concluida la guerra por la Independencia opta por construir o reconstruir al Estado a partir del respeto de nuestra cultura dispersa y de localidades, heredada de España; que es también la de los pueblos de doctrina que juntan a la miríada de naciones nómades e inconexas, sin asiento fijo, que fuimos desde el lejano amanecer.

 

 

El asunto es que las realidades del siglo XXI y las del «quiebre epocal» son tan inéditas que nos resultará insuficiente comprender todo lo anterior, para atar y corregir nuestro actual decurso de deconstrucción cultural y política.

 

 

Asdrúbal Aguiar

correoaustral@gmail.com

Pedro Pacheco Rodríguez, presidente de la ABV y la reinvención de los gremios empresariales

Posted on: agosto 10th, 2023 by Super Confirmado No Comments

 

 

La coopetición es un concepto que plantea a los empresarios cooperar y competir simultáneamente

 

 

La decisión de los bancos venezolanos de elegir como presidente de la Asociación Bancaria de Venezuela a Pedro Pacheco Rodríguez es un hito histórico porque Pedro no es ni ha sido acccionista de ningún banco, así como tampoco ha trabajado en ninguno de ellos. Casi siempre los presidentes de gremios son accionistas o altos gerentes de las empresas agremiadas; pero eso no es lo ideal.

 

 

Pedro es un muy conocido y reputado profesional, auditor de empresas y ha sido Socio Principal de la firma que representa a Price Waterhouse Coopers en Venezuela desde hace 85 años. PwC es una de las más grandes y reputadas empresas mundiales de auditoría externa. Es decir, que Pedro conoce a los bancos “de arriba abajo”.

 

 

Hasta aquí ya hemos identificado seis rasgos fundamentales del presidente ideal de cualquier gremio empresarial: Independencia, profesionalismo, experticia, honestidad, discresión y reputación.

 

 

Según estudios que hemos realizado sobre gremios en varios países, estos rasgos coinciden con los perfiles de presidentes de grandes gremios en los países más desarrollados y en países que, sin haber alcanzado grandes niveles de desarrollo, también se destacan por su afán por profundizar la institucionalización de las relaciones gobierno-empresa. Institucionalización significa implantar reglas de juego y relaciones con base en criterios orientados a buscar el equilibrio entre los intereses empresariales, los gubernamentales, los de la clientela y el desarrollo del país en general, lo que equivale a que dichas reglas sean aceptadas por la mayoría y eso las haga sustentables y sostenibles. Esto implica muchas cosas que suponen el desarrollo de una dinámica mejor a la usual.

 

 

Primero, el presidente del gremio, al ser independiente, no puede ser presionado por el gobierno de manera que sienta amenazada la integridad de su negocio, pues no es accionista de ninguna empresa del ramo.

 

 

Segundo, ese presidente reconocido como excelente profesional, tampoco puede ser presionado por las empresas que representa para que plantee políticas profesional o institucionalmente inconvenientes porque no puede “echar su reputación por la borda”.

 

 

Tercero, el institucionalismo obliga a actuar orientados al bien común, al equilibrio de intereses, en vez de actuar con miras cortoplacistas o por intereses particulares. El sesgar las cosas de manera que se beneficie una parte y no el todo no es sostenible, no inspira confianza ni es sustentable; genera presiones o conflictos que obligan a cambiar las reglas del juego a demasiado corto plazo o a perjudicar a uno de los sectores involucrados por demasiado tiempo, como sucede cada vez que los gobiernos gobiernan según sus criterios ideológicos, en vez de buscar el entendimiento y equilibrio de intereses. Por esto último, los bancos venezolanos se han minimizado. Veremos qué puede hacer Pedro al respecto: Por el bien de toda la sociedad, es necesario reenfocar la lucha contra la inflación, dejando de basarla en recortar la liquidez y el crédito bancario mediante un alto Encaje Legal, lo cual nos ha empobrecido a todos, y pasar a incrementar el crédito para elevar la oferta, el empleo y mejores salarios.

 

 

El otro reto de fondo de Pedro es promover la COOPETICIÓN. ¿Y eso qué es? La coopetición es un concepto que plantea a los empresarios cooperar y competir simultáneamente. Para ningún gremialista este planteamiento debería ser sorpresa porque los gremios empresariales, sectoriales como regionales, se crean para cooperar entre competidores. Ésto se practica; pero no con la extensión, profundidad, frecuencia, conciencia y sistematización que el concepto amerita.

 

 

Un caso famoso de coopetición es la asociación entre Apple e IBM, comenzando en 2014, para desarrollar aplicaciones móviles para empresas que utilizan el sistema operativo iOS de Apple y la plataforma de computación en la nube de IBM. Esta alianza le permitió a Apple expandir su alcance en el mercado empresarial aprovechando la gran fuerza de ventas de IBM en software empresarial. Mientras que IBM pudo aprovechar el creciente mercado móvil de Apple mediante el desarrollo de aplicaciones para dispositivos iOS. Esta colaboración dio como resultado un conjunto de aplicaciones empresariales móviles, que incluye herramientas de servicio al cliente, finanzas y gestión de la cadena de suministro.

 

Al combinar sus respectivas fortalezas, pudieron crear una nueva oferta de mercado que era más atractiva y competitiva que la que podrían haber logrado por su cuenta.

 

 

Necesitamos crear departamentos de Análisis de Oportunidades de Coopetición en todos los gremios empresariales u oficinas de asesores que apoyen esta función.

 

 

Son muchos más los retos de la reinvención gremial, los cuales enumeraremos en nuestro próximo artículo. Por ahora, ¡Felicitaciones a Pedro y a los banqueros que tuvieron la inteligencia y el desprendimiento para elegirlo!

 

 

@joseagilyepes