Criminales que en la mayoría de los casos no llegan a los veinticinco años, muchos de los cuales ni siquiera llegaron a conocer a un hijo o verlo crecer.
Es impresionante el elevado número de delincuentes que han caído muertos en los últimos meses, años. Me hacen recordar un viejo lema popularizado en las décadas de los setenta y ochenta por el periodista José Campos Suárez: “El crimen no paga”. Criminales que en la mayoría de los casos no llegan a los veinticinco años, muchos de los cuales ni siquiera llegaron a conocer a un hijo o verlo crecer. Hampones que es probable no hayan conocido el verdadero amor, pues las mujeres que tuvieron estuvieron a su lado más por comodidad, por “poder” y hasta por miedo que por amor verdadero. Pareciera que el dinero malhabido y el profundo daño que han causado a la sociedad y a sus víctimas inocentes, se les revirtió convertido en maldición y de manera definitiva. Las mujeres de los barrios deben preguntarse si esto es lo que de verdad quieren para con sus hijos, si están dispuestas a perder a sus hijos en un lapso particularmente breve. Y si la respuesta es no, deben fajarse a luchar a brazo partido para evitar que caigan en las garras del hampa.
Los mismos niños y adolescentes deben hacerse esta pregunta. Acaso no es más atractivo, sabroso, interesante, luchar por forjarse un futuro, empatarse con una chama que de verdad te quiera y con la que puedas soñar, armar una familia, tener hijos, verlos crecer, jugar con ellos. El Estado, por su parte, debe asumir que esta perdiendo esta batalla, pues el hampa está ocupando posiciones estratégicas. Instituciones clave como la familia, la escuela, la Iglesia, los medios de comunicación, no están cumpliendo con su papel. El Estado debe hacer los respectivos correctivos de inmediato, retomar el control. Los ídolos de nuestros muchachos en los barrios deben ser los ingenieros, periodistas, basqueteros, deportistas en general, los médicos, los carpinteros.
Hampómetro. Me reportan robos a toda hora a la salida del metro de Chacaito, en la vía que conduce al cine Brodway. Igualmente reportan aumento de asaltos en los andenes en Plaza Venezuela. El gobierno implementó esta semana un operativo con la GN, pero los efectivos estarán desde las 9:00 de la mañana y resulta que los robos ocurren desde la mañanita y recrudecen en las horas pico. Esto debe ser revisado.
*** Continúan los robos dentro de las camioneticas en la avenida Baralt, sobre todo por las esquinas de Muñoz, Miranda, Maderero. Asimismo lucen indetenibles los robos dentro de las unidades que van desde Los Dos Caminos hacia La Urbina. Hay que colocar alcabalas móviles en el camino y revisar cada cierto tiempo los microbuses. Si Polisucre se niega, hay que meter a la Polinacional o a la Guardia Nacional.¨
*** Desde la urbanización Paraíso, vía Sotillo Higuerote, Miranda, me denuncia un lector: Tengo allí una casita a la cual no se puede ir ni de visita, ya que el miedo nos invade, de tanto malandro que pulula por estos lares. Desvalijan las casas, se llevan los aires acondicionados, las pocetas, lavamanos. Esta es una situación es inmamable, estamos indefensos. Hacemos un llamado a la Guardia Nacional a que nos ayude”.
*** Desde los municipios Candelaria, Pampán y Carache del estado Trujillo me escriben una carta que denota desespero, impotencia. El hampa los tiene locos. Cobros de vacuna, extorsión, homicidios, secuestros, están a la orden del día. Piden una OLP urgente. No creen en la policía local.
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