Referéndum en Venezuela

Posted on: noviembre 2nd, 2023 by Super Confirmado No Comments

 

 

El referéndum que el gobierno Maduro ha decidido convocar sobre la reclamación del Esequibo no solo es inútil, sino dañino para los intereses de Venezuela. De las cinco preguntas que se presentan al electorado, dos son absolutamente intrascendentes y son equivalentes a la pregunta: “¿Quiere Usted a su Mamá? En la pregunta en la cual se le pregunta al pueblo si apoya al Acuerdo de Ginebra de 1966, como único instrumento para resolver la controversia, al régimen se le olvida mencionar que estamos en el proceso de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), porque dos Secretarios Generales de la ONU, el último “buen oficiante-mediador”  y la propia CIJ, interpretaron el Acuerdo de Ginebra de forma tal que el Secretario General de la ONU tenía la competencia de llevar el caso ante la CIJ. Dónde se pregunta si se está de acuerdo en no reconocer la jurisdicción de la CIJ para resolver la controversia, hay una clara intención de utilizar la probable respuesta afirmativa para salirse del proceso iniciado en la CIJ, en el cual Venezuela ya ha aceptado la jurisdicción de la Corte, al participar en el mismo. En el régimen se está fortaleciendo el sector que sostiene que hay que asumir una “narrativa” ideológica “antiimperialista” y acusar al gobierno de Guyana y a la propia CIJ de ser títeres de la EXXON. Olvidando, “curiosamente”, que los socios de la EXXON en Guyana, son la Compañía petrolera estatal china (CNOOC) y la CHEVRON, que opera en Venezuela. Esta posición es de una extrema irresponsabilidad, además de poco seria.

 

 

La Corte, con o sin la presencia de Venezuela, seguiría el proceso y en unos pocos años dictaría su sentencia que es de obligatorio cumplimiento e inapelable. Además, no hay que olvidar que, después de la decisión sobre el Laudo de 1899 y la definición de la frontera terrestre es muy probable que la CIJ tendrá que intervenir también en la delimitación de las áreas marinas y submarinas. En la última pregunta, se plantea la posibilidad de crear un nuevo estado venezolano, en el territorio en disputa, incorporándolo al mapa de Venezuela y de preparar un plan acelerado para otorgarle la ciudadanía y todos los “servicios” del Estado venezolano a los esequibanos. Esta es una pregunta irreal, que además le ha dado base para que Guyana y todos los países del CARICOM denuncien ante la comunidad internacional que Venezuela tiene la intención de ocupar militarmente la región. Es irreal, entre otras cosas, porque es ridículo pensar que los esequibanos, que viven en la economía de mayor crecimiento mundial, puedan estar interesados en la ciudadanía de un país en pleno desastre socioeconómico y del cual han emigrado, en pocos años, más de 7 millones de habitantes, 35.000 de los cuales a la propia Guyana. Para colmo, la Cancillería después de convocar este referéndum, en un comunicado oficial muy poco serio, después de afirmar que el gobierno guyanés es títere de la EXXON y del Comando Sur de los EEUU, le pide a ese mismo gobierno que se siente a negociar bilateralmente.

 

 

 

En mi opinión, el referéndum es una maniobra para distraer la atención pública del enorme fracaso socioeconómico, en vista de las anunciadas elecciones del 2024, enarbolando la bandera nacionalista. Además, también se trata de hacer olvidar el manejo irresponsable y muy poco profesional de la controversia, durante estas dos décadas, que nos ha llevado a la CIJ, el escenario preferido por Guyana desde 1966. Ahora, lo responsable es prepararnos con el apoyo de los mejores expertos nacionales e internacionales, para defender en la CIJ, nuestra posición de que el laudo de 1899 es nulo. ¿Se está haciendo?

 

 

 

Sadio Garavini di Turno

@sadiocaracas

La Constitución y los militares

Posted on: septiembre 1st, 2023 by Lina Romero No Comments

 

 

En un reciente “pronunciamiento” del Alto Mando Militar, el general Padrino, ministro de la Defensa, afirmó que la Fuerza Armada “tiene un papel constitucional que cumplir”. En otra ocasión, el General Padrino dirigiéndose a la oposición democrática, ha dicho lo siguiente:” Mientras exista una Fuerza Armada como hoy la tenemos, antimperialista, revolucionaria, bolivariana, nunca podrán ejercer el poder político en Venezuela”. Ahora bien, el artículo 328 de la Constitución dice que: “La Fuerza Armada constituye una institución esencialmente profesional, sin militancia política…está al servicio de la nación y en ningún caso de persona o parcialidad política” y en el artículo 330 agrega que “los integrantes de la Fuerza Armada Nacional, en situación de actividad, no podrán participar en actos de propaganda, militancia o proselitismo político.” Sin embargo, la Fuerza Armada se está convirtiendo en una verdadera guardia pretoriana del régimen. La progresiva militarización de la sociedad y el Estado son evidentes. La Fuerza Armada dejó de ser apolítica, obediente y no deliberante y padece un constante adoctrinamiento ideológico-político. Recordemos el necrofílico saludo militar obligatorio: “Patria, socialismo o muerte”, que después del fallecimiento del caudillo se transformó en el “peculiar”: ”Chávez vive, la revolución sigue”. La administración pública, las empresas del Estado, el Servicio Exterior, las gobernaciones y las alcaldías están siendo inundadas de profesionales militares.

 

La Fuerza Armada está ocupando funciones que en toda sociedad democrática son civiles. En las regiones hay una subordinación de las autoridades civiles a las autoridades militares. A las Fuerzas Armadas regulares hay que agregar los centenares de miles de civiles regimentados e indoctrinados en las “Milicias Populares”, verdadero brazo armado del partido de gobierno. Con el nombre de “unidad cívico-militar”, se quiere encuadrar militarmente a la mayor parte posible de la sociedad civil con el objetivo de facilitar su adoctrinamiento, movilización y control. A todo esto hay que agregar los llamados “colectivos”, grupos violentos y armados, parecidos a los CDR castristas, las “squadracce” del jerarca fascista Farinacci, las SA nazi de Ernst Röhm y los “tonton macoutes” haitianos, organizados por el partido de gobierno para hostigar y romper las manifestaciones pacíficas de la oposición. En las democracias avanzadas y “civilizadas”, en todos los sentidos de la palabra, las instituciones políticas son fuertes y las fuerzas armadas son profesionales, apolíticas, obedientes y no deliberantes. En cambio, el militarismo es cada vez más una característica típica de sociedades atrasadas y semi bárbaras, con graves carencias de gobernabilidad. El militarismo es una degeneración hipertrófica de la profesión militar, que tiende a convertirse en una usurpación, por parte del estamento militar, del poder de autodeterminación del pueblo, al utilizar ilegítimamente la fuerza de las armas que el mismo pueblo le otorga en custodia.

 

 

Como afirma el general Padrino, la Fuerza Armada debe cumplir el papel que le asigna la Constitución Nacional.

 

 

Sadio Garavini di Turno

@sadiocaracas

Un mundo muy peligroso

Posted on: agosto 17th, 2023 by Lina Romero No Comments

En el 2016 escribí una columna con el título: “Un mundo peligroso” y en el 2020 otra titulada: ”Un mundo más peligroso”. En el 2022, Rusia, una potencia nuclear, país fundador de la ONU y uno de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad, utiliza la fuerza militar para ocupar un vecino, violando burdamente la Carta de las Naciones Unidas, la integridad territorial y la soberanía de un país reconocido internacionalmente.

 

 

El agresivo revisionismo geopolítico de Rusia en Europa y ahora en África, de China en Asia y de Irán en el Medio Oriente, conjuntamente con el belicismo irresponsable de la satrapía hereditaria comunista de Kim Yong-un, están creando un mundo muy peligroso. Walter Russell Mead, influyente académico, especialista en política internacional, en una reciente columna en el Wall Street Journal, afirma que la temperatura geopolítica se está recalentando tanto que sus consecuencias podrían crear un desastre mundial mucho más grande y rápido que el creciente calentamiento del clima.

 

 

Russell Mead advierte que en la guerra de Ucrania ha habido una escalada con el aumento de los ataques de mísiles rusos, el retiro de Rusia del acuerdo sobre la exportación de granos, que limitaba un poco los efectos negativos de la guerra en muchos países del Sur Global.

 

 

Las amenazas de Irán a la navegación en el Golfo han aumentado tanto que los EEUU han tenido que enviar a los marines para proteger a los tanqueros petroleros. Rusia incrementó sus relaciones económicas políticas y militares con Corea del Norte, con la visita de su ministro de la Defensa a Pionyang. También las fuerzas navales rusas y chinas han hecho maniobras conjuntas alrededor del Japón y Alaska. Y en Niger una junta militar pro rusa ha sacado del poder a un presidente pro occidental, creando las condiciones para una guerra regional, con probables intervenciones externas.

 

 

 

Los EEUU han reaccionado con el fortalecimiento de la OTAN y en general de las alianzas en el llamado “Occidente”. Las pacifistas Alemania y Japón de la segunda posguerra han iniciado un importante proceso de rearme. Finlandia y Suecia, dos naciones tradicionalmente neutrales están ingresando a la OTAN. En el Indo-Pacífico, se fortalece el grupo QUAD, integrado por EEUU, Japón, Australia y la India, la cooperación militar del AUKUS, entre EEUU, Australia y el Reino Unido, sin olvidar la alianza del ANZUS, que incluye a Nueva Zelandia.

 

 

Se ha fortalecido también la alianza militar con Corea del Sur y Biden recibirá pronto en Camp David a los presidentes de Corea del Sur y Japón, para tratar de mejorar las difíciles relaciones bilaterales entre Japón y Corea. Los EEUU también están reparando las deterioradas relaciones con Arabia Saudita, al respecto parece que se está negociando un gran acuerdo entre EEUU, Arabia Saudita e Israel.

 

 

Los profesores Hal Brands de la Universidad John Hopkins y Michael Beckley de la Universidad de Tuft, en su reciente libro “Danger Zone. The Coming conflict with China”, argumentan que el momento más peligroso para un eventual conflicto militar entre China y los EEUU sería cuando el crecimiento económico chino se estanque o retroceda, porque el régimen reaccionaría muy probablemente aumentando su agresividad nacionalista en el escenario internacional.

 

 

En efecto la economía china está entrando en un período de deflación, con muy débil crecimiento y aumento de la desocupación. Y justamente en estos días, el presidente Biden, hablando de China, dijo: “Cuando la gente mala tiene problemas, hace cosas malas”

 

 

@sadiocaracas

Primarias y elecciones 2024

Posted on: julio 19th, 2023 by Lina Romero No Comments

 

 

El gobierno Maduro ha inhabilitado a María Corina Machado, Henrique Capriles y Freddy Superlano, tres de los principales candidatos, que están en campaña para las elecciones primarias de la oposición democrática, previstas para el 22-10-2023, cuando se escogería el candidato para enfrentar a Maduro en las elecciones presidenciales del 2024. En Venezuela, el régimen decide quien puede o no puede ser candidato de la oposición. Además, ha forzado la renuncia de todos los miembros del Consejo Nacional Electoral y la Asamblea Nacional (AN) madurista está por elegir un nuevo árbitro electoral, con la relevante participación en el proceso, de la esposa de Maduro. Para colmo, el presidente de la AN, en un iracundo discurso, calificando a Europa, como “asesina” e “imperial”, ha anunciado que no se permitirá la presencia de la observación electoral de la Unión Europea. La conducta del régimen demuestra fehacientemente que en Venezuela el camino electoral, por sí solo, no sirve para el cambio de gobierno. Es evidente que el régimen, “por ahora”, no tiene ninguna intención de entregar el poder por la vía electoral.

 

 

Las primarias, además de elegir a un candidato y vocero unitario de la oposición, pueden servir para movilizar y entusiasmar una oposición desmotivada, organizar los partidos, promover y fortalecer liderazgos y atraer los chavistas decepcionados. También, sirven para apoyar, organizar y coordinar la espontánea protesta social por el desastre socioeconómico y de los servicios públicos y exigir condiciones electorales aceptables para las presidenciales del 2024. Todas las transiciones de un gobierno autoritario a uno democrático en el último medio siglo, como España, Polonia, Chile, Sur África, Nicaragua, Brasil, entre otras, se han dado por una combinación eficiente de presiones nacionales e internacionales. Por tanto, el camino electoral debe ser acompañado de un aumento de las presiones internas y externas.

 

 

Las sanciones deben continuar y aumentar, especialmente las personales y deben ser ampliadas a los familiares de los dirigentes del régimen. Europa y España en particular, deben actuar más al respecto. Ahora es el momento adecuado, en 2017, las masivas manifestaciones y la fuerte presión interna fue reprimida, con saldo de muertos, presos y exiliados, pero la presión externa apenas empezaba. En el 2019, en cambio, cuando la presión externa se incrementó considerablemente, la oposición, también por cansancio, bajó la guardia interna y confió demasiado en la acción externa. El apoyo internacional es absolutamente necesario, pero no es suficiente.

 

 

Buena parte de las principales cabezas del régimen, al perder el poder, arriesgarían la cárcel interna y/o externa, por eso es fundamental entender que el régimen no va a permitir elecciones libres, si no hay también garantías personales e institucionales, para por lo menos un sector del régimen. Recordemos las negociaciones en Sur África, de Mandela con de Clerk, que se quedó como vicepresidente. Y el Apartheid fue un régimen claramente criminal y asesino. También Pinochet, al entregar la presidencia, permaneció como Comandante General del Ejército y posteriormente senador de por vida. En la Nicaragua de 1990, Ortega logró que su hermano Humberto mantuviera el mando de las FFAA, durante el gobierno democrático de Violeta Chamorro. “Historia Magistra Vitae” y a buen entendedor pocas palabras.

 

 

Sadio Garavini

@sadiocaracas      

Estados, intereses y valores

Posted on: julio 8th, 2023 by Lina Romero No Comments

Lord Palmerston, considerado como el más exitoso Primer Ministro y Ministro de Relaciones Exteriores de la era victoriana, dijo una vez que: ”La Gran Bretaña no tiene aliados eternos, y no tiene enemigos perpetuos. Nuestros intereses son eternos y perpetuos, y nuestra obligación es vigilarlos.” En efecto, los Estados tienen sobre todo intereses. Sin embargo, en el Siglo XX y particularmente después de la Segunda Guerra Mundial, con el nacimiento de la ONU y su Declaración Universal de los Derechos Humanos y, en general, con el crecimiento de los ideales democráticos y de la importancia de la opinión pública, también los valores deben ser tomados en cuenta, obviamente, en mayor medida, en los países democráticos. Ese “balanceo” constante entre intereses y valores explica la razón por la cual una democracia, como los Estados Unidos, ha apoyado, por sus intereses, a regímenes autocráticos como el de Trujillo en República Dominicana, el Shá de Irán y Arabia Saudita, mientras en otras ocasiones, por sus valores, ha presionado a regímenes dictatoriales como el argentino, con el Presidente Carter  en los años ’70, o hasta apoyado su caída como en los casos de Somoza en Nicaragua y Marcos en Filipinas.

 

 

En la actualidad, con el fin del breve momento “unipolar” de los EEUU post Guerra Fría, retornan con furia la Historia, la geopolítica y las esferas de influencia en un sistema internacional multipolar. La invasión de Putin a Ucrania ha provocado el fortalecimiento de la OTAN y en general de las alianzas en el llamado “Occidente”, alrededor de los EEUU. Las pacifistas Alemania y Japón de la segunda posguerra han iniciado un importante proceso de rearme, los EEUU también han incrementado su gasto militar. Finlandia y Suecia, dos naciones tradicionalmente neutrales están ingresando a la OTAN. Por otro lado, se ha conformado una alianza informal de las autocracias, unidas por su aversión a Occidente y a EEUU, en particular. Para muchos, estamos en presencia de una nueva Guerra Fría, entre las democracias, liderizadas por EEUU y las autocracias con China a la cabeza.

 

 

Pero si tomamos en cuenta los intereses, particularmente de los países del llamado Sur Global, nos damos cuenta de que estamos en mundo más complejo y transaccional. La democrática India mantiene excelentes relaciones con Rusia, aprovechando comprar su petróleo y sus armas a descuento. Al mismo tiempo, fortalece su cooperación con los EEUU, Japón y Australia en el QUAD, frente a la agresividad china en la frontera del Himalaya. No olvidemos que Nehru, uno de los padres fundadores de la India moderna, dijo:” Cada vez que la China vuelve a ser la China, vuelve a ser imperialista”. En América Latina, muchos países se están orientando, de acuerdo a sus intereses, por un no alineamiento activo y pragmático frente al conflicto China- EEUU. China ya es el principal socio comercial de América del Sur. Y aun cuando condenaron en la ONU la agresión rusa a Ucrania, no se han sumado a las sanciones contra Rusia. Por eso, a diferencia del norteamericano, el gobierno japonés está sugiriendo que Occidente, sin dejar de proclamar y defender sus valores democráticos, no debe plantear  que el enfrentamiento fundamental en el mundo actual es entre democracias y autocracias (por cierto, las democracias son minoría), sino entre Estados respetuosos o no de la Carta de las Naciones Unidas, del Derecho Internacional y por tanto de la integridad territorial, la soberanía de todos los Estados y de la exclusión de la guerra como método de solución de conflictos.

 

 

 

Sadio Garavini di Turno

@sadiocaracas

Venezuela, Guyana y la Corte Internacional de Justicia

Posted on: abril 20th, 2023 by Lina Romero No Comments

 

La Corte Internacional de Justicia ha rechazado por catorce votos contra uno, el recurso de inadmisibilidad, presentado por Venezuela, de la demanda interpuesta por Guyana solicitando que se confirme la validez del Laudo Arbitral de 1899. En un poco serio y sibilino comunicado de la Cancillería venezolana se afirma que “Venezuela celebra que la sentencia de la Corte valide nuestros argumentos”, tratando evidentemente de confundir a la opinión pública no enterada del tema. Antes que nada, los venezolanos deberían hacerse la pregunta: ¿Cómo es posible que dos Secretarios Generales de la ONU, Ban Ki-moon y Antonio Guterres y el último Buen Oficiante el noruego Dag Nylander, decidieron escoger la Corte Internacional de Justicia (CIJ) como medio para solucionar la controversia? Los tres interpretaron que el Acuerdo de Ginebra le daba la competencia al Secretario General de escoger el medio de solución de la controversia, si no había acuerdo entre las partes.

 

 

La CIJ siempre ha sido, desde la misma firma del Acuerdo de Ginebra en 1966, el medio preferido por Guyana y rechazado por Venezuela. La falta de profesionalismo y la irresponsabilidad de los gobiernos de Chávez y Maduro han llevado al peor de los escenarios posibles para Venezuela. Cuando a finales del 2013, con el inicio de la “era petrolera” en Guyana y después de la detención, por parte de la Armada venezolana de un barco de exploración sísmica, el gobierno guyanés manifestó que el proceso de los Buenos Oficios, la negociación bilateral asistida por un representante del Secretario General, no había dado ningún resultado en 25 años de vigencia y proponía al Secretario General optar por la CIJ. El gobierno Maduro insistió negligente y tercamente en continuar con los Buenos Oficios, en cambio de proponer otro de los medios de solución, como la Mediación, por ejemplo.

 

 

Ahora que Venezuela tiene hasta abril del 2024 para presentar su “contramemoria” a la demanda de Guyana, la gran mayoría de los juristas especialistas en el tema afirman que debemos prepararnos, con el apoyo de los mejores expertos nacionales e internacionales, para defender, en la Corte, nuestra posición de que el Laudo de 1899 es nulo e irrito. Sin embargo, en el gobierno hay un sector que piensa que lo más conveniente es asumir una “narrativa” ideológica antiimperialista acusando a la CIJ de ser un instrumento del Departamento de Estado y de la EXXON y rechazar participar en el proceso. Por cierto, “curiosamente” al gobierno siempre se le olvida mencionar que el socio de la EXXON, en Guyana, es la CNOOC, la compañía estatal de China, “aliado estratégico” del régimen. Esta posición es de una extrema irresponsabilidad.

 

 

La Corte, con o sin la presencia de Venezuela, seguiría el proceso y en unos pocos años dictaría su sentencia que es de obligatorio cumplimiento y no tiene recurso alguno. Además, no hay que olvidar que, después de la decisión sobre el Laudo y la definición de la frontera terrestre, es muy probable que la CIJ tendrá que intervenir también en la delimitación de la áreas marinas y submarinas, si no hubiese acuerdo entre las partes. Algunos creen también que, si rechazamos participar en el proceso, podríamos lograr que Guyana acepte negociar de nuevo, en el marco del Acuerdo de Ginebra. En mi opinión, ahora que Guyana ha logrado llevar la controversia a la CIJ, su escenario preferido desde 1966, no tiene ningún interés en negociar hasta tanto la Corte dicte su sentencia. Ojalá que el gobierno escuche las sugerencias de los expertos en el tema.

 

 

         Sadio Garavini di Turno

Lecciones de la Guerra Fría

Posted on: junio 16th, 2022 by Laura Espinoza No Comments

 

EEUU y Occidente por una parte y la URSS y sus satélites, desde el punto de vista económico, eran dos mundos distintos, con muy escasas relaciones entre ellos

 

 

Con la irresponsable y trágica invasión de Putin a Ucrania y, en general, el agresivo revisionismo geopolítico de China y Rusia, se están creando las bases de un nuevo sistema internacional. Con el final de la Guerra Fría, Estados Unidos era la única “hiperpotencia”, con preeminencia en todas las dimensiones del poder: militar, económico, tecnológico, ideológico y cultural, pero el breve momento “unipolar” y la “Pax Americana” se acabaron, retornan con furia la Historia, la geopolítica y las esferas de influencia. La deslucida actuación militar rusa y su creciente debilidad económica, reforzada por las sanciones occidentales, aumentarán considerablemente su dependencia del Dragón chino. Se percibe el inicio de una nueva y diferente Guerra Fría, entre los EEUU y la alianza de las autocracias china y rusa. Hal Brands, profesor de Asuntos Globales de la Universidad Johns Hopkins, en su reciente libro: “The Twilight Struggle. What the Cold War Teaches Us about Great-Power Rivalry Today”, nos hace un interesante relato de la Guerra Fría del siglo pasado y nos extrae unas lecciones para la Guerra Fría del siglo XXI.

 

 

Antes que nada, hay que subrayar que el nuevo enfrentamiento es muy diferente del pasado. EEUU y Occidente por una parte y la URSS y sus satélites, desde el punto de vista económico, eran dos mundos distintos, con muy escasas relaciones entre ellos. Además, representaban dos modelos socioeconómicos opuestos: la economía de mercado occidental y el colectivismo estatista. En lo ideológico, se enfrentaban la democracia liberal y el comunismo. Ahora, las economías de las grandes potencias son todas economías de mercado, con sus diferentes matices: capitalismo de Estado chino, capitalismo cleptocrático de “amigotes” en Rusia, economías de mercado, con más o menos presencia del Estado en Occidente. Pero, sobre todo, EEUU, Rusia y China forman parte de una sola economía global interdependiente.

 

 

Brands nos recuerda que una de las ventajas principales que tuvo EEUU para ganar la Guerra Fría fue la fortaleza y cohesión de sus alianzas. La Guerra de Ucrania tuvo como primer efecto el relanzamiento de una alicaída OTAN, fortalecida ahora con el anunciado ingreso de Suecia y Finlandia y el rearme de la pacifista Alemania. En el Indo-Pacífico, resurge el grupo QUAD, integrado por EEUU, Japón, Australia y la India, la cooperación militar del AUKUS, entre EEUU, Australia y el Reino Unido, sin olvidar la alianza del ANZUS, que incluye a Nueva Zelandia. Dada la agresividad china y norcoreana, es muy probable un aumento también del rearme japonés. Los EEUU también ganaron la Guerra Fría por su superior capacidad tecnológica, que creó las condiciones para su superioridad militar. Por tanto, Brands anticipa un relevante aumento en EEUU del gasto militar y en la investigación tecnológica. Obviamente, esto requiere de una economía creciente y pujante. En efecto, la URSS perdió la Guerra Fría en buena parte por el fracaso de su modelo económico colectivista. La competencia con el capitalismo de Estado chino será mucho más compleja y difícil. EEUU también ganó la Guerra Fría proyectando los valores de la democracia liberal frente al totalitarismo comunista. Las autocracias están tratando de aprovechar las vulnerabilidades de las sociedades abiertas para debilitar las democracias, sobre todo a través de las nuevas tecnología de comunicación por Internet, por tanto las democracias deben presentar de nuevo con fuerza la batalla ideológica y comunicacional entre democracia y autocracia.

 

 

SADIO GARAVINI DI TURNO

@sadiocaracas

 

Venezuela en la Corte Internacional de Justicia

Posted on: julio 9th, 2020 by Periodista dista No Comments

 

Estado y sociedad, después del Covid 19

Posted on: junio 5th, 2020 by Laura Espinoza No Comments

 

Así como la “Gran Depresión”, iniciada en 1929 y en particular la II Guerra Mundial, crearon las condiciones para el fortalecimiento del Estado como motor y rector de la economía, el Covid 19 está creando las condiciones para un retorno de las ideas que promueven la intervención del Estado en la economía y en la sociedad. Se debilita claramente la imagen del modelo económico liberal-libertario que propugna el Estado mínimo. Pero este fortalecimiento del Estado no debe conducir al retorno del modelo del socialismo real, aunque algunos puedan tener sus ilusiones.

 

 

“El socialismo no sólo no creó riqueza, sino ni siquiera distribuyó con justicia la pobreza”. Esta frase del dirigente polaco Bronislaw Geremek explica, en buena parte, el colapso del sistema colectivista de la URSS y sus satélites comunistas y el estruendoso fracaso del modelo de desarrollo estatizante y proteccionista, adoptado en gran parte del mal llamado Tercer Mundo, durante buena parte de la posguerra. Por tanto, en el debate socioeconómico post Corona virus, frente a la crisis del modelo paleo liberal y el riesgo del retorno al fracasado estatismo colectivista, creo que el exitoso modelo de la economía social de mercado alemana, la “sozialemarktwirtschaft», iniciada por Ludwig Erhard, durante el gobierno democristiano de Konrad Adenauer y adoptada, con sus matices, por la mayoría de los países del norte de Europa, es el modelo más adecuado para el “nuevo tiempo” post pandemia. La economía social de mercado ha logrado conciliar más satisfactoriamente la eficiencia económica con la solidaridad y la justicia social. Se acerca más a lo que Juan Pablo II, en la “Centesimus Annus” define como “una economía social que oriente el funcionamiento del mercado hacia el bien común”.

 

 

En efecto el mercado es un verdadero y necesario motor de la historia, promotor del cambio y la innovación tecnológica, pero como todo mecanismo es ciego, crea riqueza pero la reparte con indiferencia, produciendo zonas y sectores de abundancia y de miseria. Además el mercado es inestable. Es sacudido por recurrentes crisis, desastres financieros y quiebras. Recordemos la crisis financiera del 2008. El mercado está formando una sociedad caracterizada por el relativismo ético y un materialismo hedonista y superficial que, como el hombre necio de Machado, confunde valor y precio. Una sociedad no debe andar muy bien si los héroes de buena parte de la juventud son sólo actores, modelos, “influenciers” o jugadores de algún deporte, en cambio de médicos, profesores, empresarios o estadistas. Mucho puede y debe cambiar después de la trágica pandemia.

 

 

Sadio Garavini di Turno

@sadiocaracas

La nueva etapa

Posted on: agosto 30th, 2017 by Laura Espinoza No Comments

En Venezuela estamos sufriendo un gobierno depredador y forajido, que quisiera implantar un régimen totalitario, similar al cubano, pero no tiene la capacidad ni la eficiencia para concretarlo y que puede calificarse como un totalitarismo fallido: una dictadura chapada  a la antigua, pero con fachada neocomunista. La historia del último medio siglo nos enseña que las dictaduras se enfrentan exitosamente a través de diversos “caminos”, en la mayoría de los casos, complementarios.  Los “caminos” pueden ser catalogados en dos renglones: Presiones nacionales y presiones internacionales. Las nacionales, por ejemplo, incluirían protestas pacíficas y no violentas. Protestas que pueden también ser alrededor y en combinación de movilizaciones electorales. Incluyen también guerrillas como la Contra en  Nicaragua y el ANC en  Suráfrica, y obviamente los diversos tipos de golpes de Estado militares. Entre las presiones internacionales,  hay que mencionar las diplomáticas, que conducen al aislamiento y reducen la imagen y el prestigio del gobierno forajido, las sanciones financieras y comerciales, el apoyo financiero y logístico a las guerrillas internas, como en el caso de la Contra en Nicaragua, el apoyo discreto a un golpe de Estado y la intervención militar directa, como pasó en  la caída de la “narcodictadura” de Manuel Noriega en Panamá. Salvo en los casos de golpe militar e intervención militar externa, el proceso de presiones termina cuando  hay un resquebrajamiento del régimen y  asume el control del gobierno el sector que acepta   una salida negociada y pacífica. Al respecto la historia enseña que son necesarias garantías políticas y personales  para una buena parte de los dirigentes del régimen. Recordemos los casos de Pinochet y Humberto Ortega, quienes se mantuvieron en la comandancia del Ejército de Chile y Nicaragua por varios años.

 

 

 

En el caso venezolano actual,  por largos cuatro meses se mantuvo un proceso de protestas básicamente pacíficas, que fueron reprimidas violentamente, “manu militari”, con el resultado de alrededor de 120 muertos y miles de detenidos y torturados. Uno de los errores de una parte de la dirigencia de la oposición fue haber creado la imagen de que “faltaba poco” (hora cero, etc.) para que el régimen se tambaleara. No fue el debate–dilema sobre las elecciones regionales que enfrió la “calle”. Después de cuatro meses de protestas  casi diarias ya había cansancio y fatiga. Particularmente en los sectores populares, que necesitan trabajar, cobrar y  comprar diariamente.  El debate sobre las elecciones regionales ya es pasado, la decisión fue tomada. Sabemos que el régimen puede abortar los comicios, hacer todas las trampas y además quitarles las atribuciones a los posibles gobernadores democráticos. Pero lo relevante es aprovechar la campaña electoral para movilizar y organizar de nuevo en todo el país la protesta. Son centenares los candidatos y miles sus parientes y seguidores que van a recorrer los barrios subrayando el desastre socioeconómico producido por un gobierno incapaz, corrupto y con las “ideas muertas” de un modelo fracasado.  Por eso, hay que participar en la movilización electoral. Además, los gobiernos democráticos amigos así lo solicitan.  La comunidad internacional ha claramente acentuado sus presiones diplomáticas y sus sanciones tanto individuales como institucionales. China tiene intereses básicamente económicos y comerciales en Venezuela, teme por su deuda y estaría dispuesta  a negociar con quien pueda un día responder al teléfono en Miraflores. Rusia no es la URSS, ni financiera ni militarmente. Es un gigante disminuido, con pies de barro. Aprovechará de la debilidad del régimen para adquirir, a precios favorables, activos petroleros y materias primas, pero no tiene ni la capacidad ni la voluntad de subsidiar totalmente a un gobierno fallido. El fracaso socioeconómico madurista le está afectando a Cuba, con la disminución del subsidio petrolero. Pero los cubanos son también suficientemente pragmáticos para entender que no les conviene hundirse con un barco seriamente averiado y estarían dispuestos también a negociar con quien les pueda conceder una reducción gradual y concertada del apoyo petrolero.  La oposición democrática debe transformar  la unidad  electoral en una unidad de estrategia y sobre todo de comando. La fundamental interlocución internacional  debe ser definida y coordinada  por el más alto liderazgo político de la MUD.

 

 

 

Venezuela vive una nueva  etapa en un traumático, pero inexorable, proceso de cambio.

 

Sadio Garavini

@sadiocaracas