Con las manos vacías

Posted on: diciembre 11th, 2016 by Laura Espinoza No Comments

 

La carta del Vaticano a Nicolás Maduro, remitida por su secretario de Estado, en la cual demandaba que antes de la fecha establecida para la segunda reunión de la mesa de “diálogo” el gobierno debía acatar cuatro importantes acuerdos  que habían sido incumplidos, abrió las esperanzas de millones de demócratas en el país y en el mundo. Con fecha del 02/12/2016 y con copia a los integrantes del “diálogo”, la carta “demandaba” que “antes del 6-D se produjeran 4 hechos prometidos y no cumplidos por Maduro: 1)que se tomen las medidas para el ingreso de alimentos y medicinas al país para aliviar la crisis humanitaria; 2) que las partes acuerden un cronograma electoral; 3) que se restituya a la AN las competencias establecidas en la Constitución”, confiscadas por un tsj devenido en brazo político del régimen, como las fanb han degenerado en su brazo político armado; y “4) que se libere a los presos políticos”, cuya cifra aumentó en pleno “diálogo”. Llegó el 6-D y Maduro incumplió de nuevo lo prometido, convirtiendo “el diálogo” en delictivo pretexto para extender su mandato, repudiado por más de 80% de la población. Chavismo y oposición se reunieron por separado con los mediadores, negada como está la MUD a conversar con el gobierno, por sus incumplimientos. Dadas las expectativas creadas por la carta vaticana, monseñor Celli, enviado del Papa, sorprendió al final del 6-D con declaraciones elusivas que contrastan con el texto enviado a Maduro por la Santa Sede. Celli dijo que “se estableció un mecanismo de verificación de los acuerdos”, que no explicó en qué consistía, y añadió que las partes admitían que “había temas que resolver”, pero existía el compromiso de comenzar una “nueva etapa”. Habló de una “propuesta de trabajo”, que tampoco especificó y exigió “que los poderes públicos deben abstenerse de tomar decisiones que puedan afectar el diálogo por ahora, al menos y hasta el encuentro del 13 de enero 2017” (El Nacional 7-12-2016). Exhortación de la que se volverá a burlar Maduro encarcelando a más disidentes; el Sebin los tortura (como a los declarados en huelga de hambre para que liberen a los presos políticos); el tsj continúa sentenciando contra las decisiones legítimas de la AN; cientos de niños mueren por desnutrición y miles de enfermos por falta de fármacos, sin que los “mediadores” lo  hayan lamentado. El régimen volvió el 6-D con la promesa incumplida de reconocer la autonomía de la AN y decir que, en horas, liberarían a 7 presos políticos (el 11 de noviembre prometieron liberar a 26 que hoy siguen presos y torturados en el Sebin). Y todo ello mientras el CNE inscribe ilegalmente a multitud de chavistas en Amazonas procedentes de otros estados, para “trampear” las “nuevas” elecciones parlamentarias.

 

 

 

La MUD se va del diálogo “con las manos vacías”, como dijeran varios politólogos a la AFP, en un impecable análisis sobre como: “Maduro se aferra al poder en Venezuela amparado en fisuras del diálogo”. “La salida anticipada del poder del chavismo quedó descartada por ahora y la oposición –con las manos vacías (título que tomamos para nuestro artículo de hoy), enfrenta el desafío de reconstruir su credibilidad”. AFP subraya que el principal objetivo de la MUD era una salida electoral a la crisis (bien con revocatorio –suspendido ilegalmente por los poderes que controla Maduro– o adelanto de elecciones presidenciales). Pero Maduro jura que ninguno de los temas estuvo en agenda, como tampoco el de la liberación de los presos políticos. El gobierno se sacudió el revocatorio y de haber una improbable salida electoral, “sería por acuerdo entre las partes y no porque la oposición cuente con herramientas para lograrlo”, advierte el experto en negociación política Benigno Alarcón: “La oposición aceptó ir a la mesa cuando parecía tener acorralado al gobierno y cientos de miles de seguidores lucían dispuestos a intensificar la presión en la calle para exigir el referéndum, mientras el Parlamento de mayoría opositora se alistaba para sancionar a Maduro, aunque ello no tuviera consecuencias legales”. Otro politólogo, Edgar Gutiérrez, considera que “el diálogo ha beneficiado la estrategia oficialista de desmovilizar a sus adversarios y ganar tiempo. Y Con el gobierno oxigenado y sin logros en la mesa, la oposición está cuestionada”. Ahora, ratifica Alarcón, “a la MUD le toca reconstruir su credibilidad y el apoyo que tenía antes de entrar en este proceso”. Los expertos coinciden en que la MUD falló al haber aceptado el diálogo sin tener a mano una alternativa que obligara al gobierno a ceder, como las movilizaciones o la presión legislativa. “Hoy –sostiene Alarcón– no hay una amenaza real sobre el gobierno que le diga que gana más con un acuerdo que sin él”. Así que “el diálogo está muerto” y lo enterró Maduro después de cobrar los dividendos políticos de cerrar una posible salida electoral antes de 2018 y continuar su cruenta persecución contra la disidencia y los también acosados empresarios. El enloquecido Nicolás amenazó esta semana, por centésima vez, con “disolver la AN”, y pone de nuevo en su mira dictatorial a Henry Ramos, a quien acusa de que “los responsables del ataque a Credicard son familiares del viejito loco”, como insulta obscenamente a Ramos. Los directivos de Credicard encarcelados por Maduro son inocentes, porque el falso “ataque informático a los puntos de venta” es culpa de la obsolescencia vergonzante del ABA de Cantv, sin mantenimiento, ni renovación tecnológica. Venezuela tiene el Internet más lento del mundo.

 

 

 

Maduro seguirá con sus tropelías porque está en su naturaleza. Pero no todo está perdido para la MUD y los millones de demócratas del país. La AN, así esté en falso desacato, puede y debe retomar “su ofensiva contra Maduro” y movilizar a ese 80% que pide su salida del poder porque sabe que con este régimen no hay futuro. La AN debe retomar su contacto con Luis Almagro, secretario general de la OEA, y pedirle la activación de la Carta Democrática. Nueve gobiernos latinoamericanos (y se sumarán muchos más) piden a Maduro cumplir los acuerdos, al Maduro solitario que vimos en el patético espectáculo de su salida de Mercosur. La MUD debe seguir los consejos de Luis Pedro España (“Una tragedia llamada Venezuela”, El Nacional): “La agenda de la Unidad debe ser una sola: recuperar el derecho al voto. Los otros puntos deben seguir siendo planos de una lucha que ahora ha de ser múltiple, pero liderada y comandada por todos los actores especializados (…) ha llegado el momento de diversificar a los actores dentro de la Unidad”. Y la cronista añade que debe hacerse sin “apartheids” (nada de María Corina, Ledezma y Voluntad Popular por un lado, y PJ, AD y un Nuevo Tiempo por el otro). Que cese el desbarajuste de ese “toerismo” comunicacional donde cada integrante de la MUD opina de todo y a toda hora, causando desconcierto, cuando no rechazo en la población. Empresarios y economistas nos advierten que 2017 va a ser mucho peor que este año por culpa de Maduro. Así que habrá millones de razones para la protesta pacífica. La pelea es peleando con calle y más calle y una AN ejerciendo su poder constitucional sin miedo. Hay que recuperar el tiempo perdido.

 

 

Marta Colomina

@colominam

¿Cómo salir de esta catástrofe?

Posted on: diciembre 4th, 2016 by Laura Espinoza No Comments

 

Por la millonésima parte de los crímenes y tropelías delictivas infligidas por Maduro y su régimen a la hoy agonizante Venezuela, cualquier otro mandatario habría sido sacado del poder. Claro que eran tiempos en los que teníamos democracia. Los mercados estaban llenos de alimentos y en las farmacias había las medicinas que necesitábamos. La electricidad funcionaba sin apagones, ni racionamiento. Teníamos agua potable, no contaminada. Pdvsa producía 3,5 millones de barriles por día y no los 2 millones escasos de ahora, con una industria quebrada y plagada de deudas. Las muertes violentas en 1997 no llegaban a 2.000, mientras que la Venezuela militarizada cerrará 2016 con más de 35.000 asesinatos, así el gobierno lo niegue. El presidente Caldera entregó el dólar al chavismo en 500 bolívares, es decir, a 0,50 céntimos del bolívar actual. Este fin de semana el dólar podría sobrepasar los 5.000 bolívares, es decir, 5 millones de bolívares de hace 8 años. Los gobiernos democráticos respetaban la Constitución y no eran señalados, como hoy, de ser una dictadura, había división de poderes, y tampoco eran acusados de ser un narcoestado, con narcosobrinos incluidos, en el que hasta el Cartel de Sinaloa y el Cartel de los Soles habrían instalado en Venezuela sus “headquarters”. Lo que sigue son recomendaciones de un cuerpo de seguridad para evitar ser víctimas de las 18.000 bandas organizadas, con 75.000 integrantes, que operan en el país (¡récord mundial!) y prueban el horror de la supervivencia en Venezuela: “Llegar temprano a casa, máximo a las 8:00 pm. Si se hace tarde, quedarse a dormir donde estén. Si te atracan y piden tu carro, entrégaselo, no mires directo a la cara del ladrón y camina hacia atrás para que el atacante se retire. Si les piden la cartera, el teléfono u otro, entrégalos. No te despidas en la calle, ni te quedes conversando. No salgas a caminar o hacer ejercicios de noche. No salir armados. El grado de impunidad es total. Por eso no les importa matar. Iluminen las calles. Las entradas de los edificios y viviendas, poden árboles y quiten maleza. Coloquen cámaras, cerco eléctrico, llaves de seguridad en los ascensores. Al subir a su carro, no activen la alarma a distancia, háganlo cerca, viendo hacia todos lados, montarse y cerrar seguros. Pedir papeles a jardineros, servicio, plomeros, etc. Muchos tienen antecedentes. En caso de secuestro: no hablar, no mirar, tener comportamiento sumiso. Negar siempre que te lleven a tu casa. Piden cifras altas en dólares, pero suelen terminar negociando por menos y en bolívares. Pasa esta información a tus contactos”.

 

 

 

Además de ser víctimas de un hampa con armas de guerra, muchos venezolanos pobres lo son también de otros asesinos “institucionales” que, amparados en el uniforme de la FANB, en vez de perseguir a los “verdaderos bandoleros que operan en la frontera y están armados por el narcotráfico y la guerrilla colombiana” (como señala El Nacional) ejecutan sin piedad a inocentes campesinos, bajo la aberrante excusa de luchar contra la delincuencia, como acaba de ocurrir en la masacre de Barlovento. El defensor del pueblo y la fiscal afirmaron que los civiles asesinados (encontraron 13 cadáveres, pero hay más desaparecidos) “no tenían antecedentes penales, ni estaban cometiendo delito alguno en el momento de su arresto”. La fiscal reconoce que varios de los cuerpos “estaban desmembrados. Las autopsias revelaron la forma cruel como fueron ejecutados” y que las amenazas de los militares asesinos contra los familiares de las víctimas obligaron a la Fiscalía a tener “testigos protegidos”. Hasta el viernes 2, ni una palabra de Nicolás sobre esta masacre. Y es que para obtener el apoyo de la FANB ante el rechazo masivo a su régimen, Maduro ha dado poder a una casta militar que tiene licencia para matar, robar (alimentos y medicinas de los que carece el pueblo), cuando no a actividades más ilícitas aún. ¿Acaso Padrino López y quienes le acompañan en sus proclamas de “Chávez vive” están capacitados para llevar a cabo las funciones especializadas que Maduro les ha encomendado, o son un ardid para sobornar su apoyo a un gobierno detestado masivamente por el pueblo, que ha quebrado al país y mata a su población de hambre, desnutrición, y asesinatos a los más pobres, como acaba de ocurrir en Barlovento? ¿Acaso el “equipo” de Padrino López ha logrado disminuir la escasez o, por el contrario, el desabastecimiento ha crecido y la inflación ha sobrepasado la barrera del mil por ciento en alimentos? Numerosas ONG del mundo consideran que la aplicación de las sanguinarias OLP debe cesar de inmediato. Varias piden la renuncia del ministro Reverol, a cargo de las OLP que, paradójicamente, son llamadas “operación para la liberación del pueblo”, y, en vez de liberarlo, lo torturan y asesinan.

 

 

 

Maduro está utilizando el “diálogo” para sobrevivir políticamente, sin cumplir ninguno de sus acuerdos: no ha liberado a los presos políticos; el tsj chavista no ha devuelto a la AN sus potestades constitucionales y Maduro no muestra interés alguno en abrir el canal humanitario que permita a los empobrecidos y enfermos venezolanos –que son millones– recibir los alimentos y las medicinas que necesitan. Por el contrario, el feroz Sebin, su policía política, encarceló en el Helicoide, sin orden fiscal ni judicial alguna, al médico Miller y al sindicalista Spitia por haber recibido en el Magallanes de Catia –tan abandonado por el régimen como los demás hospitales del país– una caja de insumos médicos donada por Lilian Tintori, esposa del preso político Leopoldo López. Algo tan atroz no ocurre en ninguna parte del mundo. Maduro grita en cadena: “¿Qué pasa? nuestra economía tenemos que gobernarla nosotros y ponerla al servicio de nuestra patria”, mientras culpa a la MUD y al Imperio del estallido del dólar paralelo, del que su régimen es el único culpable. Expertos indican que los factores responsables de la subida del dólar y de la inminente hiperinflación son: 1) el incremento no planificado de la liquidez monetaria: en solo 50 días Maduro colocó en la calle (entre el 30-09 y 18-11) más de 1,61 billones de bolívares, o sea, 201% de aumento; 2) la caída de la entrega de divisas a través de Dipro pasó de 35 millones de dólares diarios en septiembre a solo 10 millones en noviembre; 3) no funcionó el sistema complementario de divisas (Dicom), y 4) no hubo cambio político. 2017 será el año con las peores perspectivas que haya tenido Venezuela, a pesar del repunte del petróleo. Maduro y Merentes prendieron la máquina de hacer billetes y lo que lograron, acusa el diputado José Guerra, es más pobreza, más escasez, más represión y más muertes.

 

 

 

¿Como podremos salir de esta catástrofe causada por la corrupción y ostensible incapacidad de un régimen que ha arruinado el país? Algo está claro: no seguir repitiendo lo mismo que hemos venido haciendo hasta ahora y le ha dado oxígeno a Maduro, de quien 80% de la población pide a gritos su salida del poder. Los estudiantes y la sociedad civil lo tienen claro: anuncian que retomarán la calle masivamente para exigir la liberación de los presos políticos antes de Navidad. Que nadie se quede en casa.

 

 

 

Marta Colomina

@colominam

 

¿Qué nos ha hecho la MUD?

Posted on: noviembre 20th, 2016 by Laura Espinoza No Comments

 
Aún es temprano para saber los efectos de la frustración sentida por miles de venezolanos al conocer el documento y los difusos acuerdos pactados en el «diálogo» entre gobierno y oposición el pasado día 11, muy lejos de la expectación generada por la MUD en su comunicado del 24 de octubre, donde sostenía que «el diálogo pasaba por 1) el respeto al voto ;2) la libertad de los presos políticos (y retorno de los exiliados); 3)atención a las víctimas de la crisis humanitaria y 4) respeto a la autonomía de la Asamblea Nacional», violada por  Maduro y su tsj, antes, durante y después de tales acuerdos, sin respeto alguno por la potestad emanada de la soberanía popular. No es de extrañar entonces que al conocer el documento en el que se «entregaron muchas banderas de lucha por parte de la Mesa de la Unidad Democrática» –como dijera el constitucionalista Gerardo Blyde, alcalde de Baruta– aparecieran en las redes sociales críticas masivas por el texto del comunicado y sus elusivos acuerdos. Que no digan que esos reproches son de gente «radical», porque miles de venezolanos de probada vocación democrática, como el sacerdote jesuita, José Virtuoso, rector de la UCAB, el propio Blyde, el colega César Miguel Rondón, Provea, o la dirigente Vestalia Sampedro –por citar unos pocos– han mostrado su desacuerdo con el comunicado y los resultados obtenidos: «Los temas quedaron en el aire, no hay fechas, acuerdos específicos que permitan medir las cosas que se van alcanzando», objeta Virtuoso y añade: El oficialismo ganó al «postergar todo lo relacionado con el cronograma electoral (…) En cuanto al tema humanitario la situación empeora (…) y el tema electoral no puede posponerse más». Concluye el rector de la UCAB que: «La oposición debe ser mucho más exigente en la mesa de diálogo: el primer párrafo que decía que todos vamos a luchar contra el boicot económico, me dejó muy mal sabor de boca».

 

 

 

¿Qué errores produjeron ese «mal sabor de boca» a quienes esperábamos ansiosos el resultado del encuentro? El primero fue haberle lavado la cara al gobierno corrupto y dilapidador que malbarató la bonanza petrolera, endeudó a Venezuela hasta dejarla en ruinas (el mayor riesgo país del mundo y la mayor inflación) y para desdibujar tan gigantesco robo decidió calificarlo de «sabotaje a económico», endilgándoselo a Estados Unidos y a los acosados empresarios nacionales, quebrados por el régimen que los acusa. Si durante años la disidencia ha denunciado la falsedad de la «guerra económica» para ocultar la corrupción y el fracaso de la economía «a la cubana» ¿por qué la MUD firma ahora que trabajará con el gobierno de Maduro para luchar contra «el sabotaje económico»? Otro error fue la claudicación de llamar «personas detenidas» a 111 presos políticos. O repetir las elecciones en Amazonas, en las que el “fraude” fue inventado por el delictivo tsj para dejar a la disidencia sin mayoría calificada en la AN, con la que podía destituir a los magistrados por sus violaciones constitucionales. Este jueves, el tsj le negó al consultor jurídico de la AN por segunda vez, el acceso a la sentencia 907, en la que «certifican» la nacionalidad venezolana de Maduro y en la que debería estar insertada su partida de nacimiento que nadie ha visto y sobre cuya existencia hay serias dudas, de ahí la ilegal negativa oficial. Las elecciones en Amazonas entrañan gran riesgo con este gobierno gansteril. De no hacerlas, el tsj seguirá con «desacato» de la AN y, de realizarlas, la jauría oficial –secundada por el tramposo CNE y cientos de militares amenazantes– caerá sobre Amazonas regalando comida y dinero a unos indígenas acosados por el hambre y las enfermedades, difamados de fraude electoral, sin haberlo cometido. ¿Alguien cree que el gobierno va respetar la autonomía de la AN si después de haberla aprobado el día 11, su tsj admitió, 4 días más tarde, la acción del procurador «chimbo» ordenando a la AN abstenerse de hacer juicio político a Maduro, violando así la sentencia del TSJ de junio de 2012 en la cual reza que «la declaración de responsabilidad política comprende también al presidente de la República»? En línea dictatorial prohibieron también «actos que alteren el orden público» y censuraron a los medios y a opositores, además de estar allanando la vía para detención de diputados. Son 38 las sentencias emitidas contra la AN. Si uno de los «logros del diálogo» es regresarle a la AN sus cercenadas potestades ¿por qué la AN no nombra a los 2 rectores vacantes del CNE y, en cambio, se designarán de común acuerdo, lo que permitiría al régimen tener mayoría en el CNE? Otra omisión: ha transcurrido una semana sin liberación de los presos políticos (apenas Rosmit Mantilla, por enfermedad).

 

 

 

A pesar de las merecidas críticas, los descontentos con la MUD no debemos olvidar que los causantes de la debacle nacional y violadores de nuestros derechos, incluido el del voto, son Maduro y sus poderes. Ahora la MUD está dividida en dos y eso solo le conviene al régimen. El ex rector del CNE Vicente Díaz escribía en «¿Está funcionando el diálogo?» (El Nacional) que “los resultados del día 11 se pueden comparar contra lo que tenemos”: «AN inoperante, CNE cuatro a uno y con posibilidad de que el tsj designe a los 2 rectores chavistas; Amazonas sin diputados efectivos con riesgo de quedarse así 5 años por omisión de sentencia; presos políticos como rehenes del gobierno, regionales postergadas inconstitucionalmente sin fecha determinada, RR suspendido, canal humanitario inexistente, hilo constitucional desgarrado». Díaz alerta también sobre los riesgos de la «creencia de que Maduro está técnicamente caído y que una marcha a Miraflores o una calle sin retorno conduciría a su salida inmediata. Se asume, puestos a elegir, que los militares (los mismos que gritan ‘Chávez vive’) tendrían que optar entre dispararle al pueblo movilizado o desobedecer a Maduro y permitir que la gesta popular acabe con este desastre de gobierno. Se asume que tener mayoría en la opinión pública es lo mismo que tener el poder, y que basta con coraje para salir de esto”. Concluye Díaz que “el diálogo solo funcionará si se le acompaña con mucha presión periférica (responsabilidad de todos los opositores y descontentos) y se incrementa su piso político con un manejo más acertado de la comunicación (responsabilidad del comando del diálogo)”.

 

 

 

Lo lamentable es que si la MUD tripartita persiste en los mismos errores, le será muy difícil recuperar el apoyo perdido, para beneplácito de Maduro. Las dos MUD deben hacer esfuerzos por rescatar la unidad sin cortapisas, sin la cual naufragan las esperanzas democráticas de los venezolanos. La MUD tripartita tiene que cesar sus desencuentros con Voluntad Popular y ponerle fin a la inaceptable exclusión de María Corina y Ledezma. Tiene que acabar con su desbarajuste comunicacional, en el que cientos de voces pugnan, con mensajes contraproducentes, por copar el espectro mediático, cada vez más escaso por la censura. Un solo vocero –cuando no sea una rueda de prensa de toda la Unidad y no solo de la tripartita– para poner orden a tanto desconcierto. Sería bueno que las dos MUD, pero sobre todo la tripartita, dieran una mirada a las encuestas para corregir el rumbo.

 

 

 

Marta Colomina

 

Ya no engañan a nadie

Posted on: noviembre 13th, 2016 by Laura Espinoza 1 Comment

 

Las palabras sirven para todo. Maduro y los suyos mienten e insultan cada vez que hablan y, de tanto embaucar, ya nadie los cree. Pretendieron engañarnos diciendo que la escasez, la inflación, el hambre, y hasta los apagones y la inseguridad eran culpa de la «guerra económica» del “imperio»  y de la burguesía («pelucones», Maduro dixit). Aún hoy, para hacernos creer que no anhela permanecer «a juro» en el poder, Maduro vuelve a mentirnos al declarar que «no está obsesionado con la reelección sino con resolver la guerra económica», y lo dice cuando su servil tsj sentencia como «inadmisible la acción de amparo para reanudar recolección del 20% de las firmas del revocatorio». Justo para que Nicolás alargue su poder, en contra de la voluntad de casi 90% de la población. Si Maduro quisiera «resolver» la situación económica, no seguiría aplicando el fracasado modelo que ha generado una inflación anualizada de 755,9% (según datos extraoficiales del BCV), arruinado el país y llenado los bolsillos de quienes controlan el gobierno. Pero como la mentira tiene patas cortas, la falsedad de la «guerra económica» queda al descubierto al comprobar que la inflación y la escasez de alimentos no ocurren por la caída de los precios del crudo, sino por la corrupción y el derroche chavista. Cuando el petróleo estaba por encima de 100 dólares el barril, el régimen endeudó al país con gigantescos préstamos de China; la emisión sin control de bonos de Pdvsa que hoy son una pesada losa, y regalando millones de dólares a Cuba, Nicaragua, Bolivia, y a todo cuanto ñángara asomara su cabeza con alabanzas al líder intergaláctico. Los «exprópiese» fueron usados para arruinar a los empresarios del campo, y a los industriales, acusados de ser enemigos de la revolución. Así cayó la producción agrícola e industrial y el régimen –entonces ahíto en divisas petroleras– comenzó a importar masivamente alimentos y cachivaches, hasta que los dólares escasearon, de tanto dilapidarlos a borbotones. Aun con petróleo a más de 100 dólares el barril, comenzó a escasear la leche, el aceite, el azúcar, la harina, el café y otros .Y a medida que desaparecían del mercado los productos de consumo masivo, el régimen arreciaba culpando a la inexistente «guerra económica» y a la baja del crudo, cuando lo cierto es que el único país petrolero que ha caído en la indigencia ha sido Venezuela. La mayoría de los países productores crearon un fondo de ahorro para enfrentar la posibilidad de la caída de sus ingresos.

 

 

 

Inventan los delitos que «fabrica» su feroz Sebin para encarcelar a los más de 100 presos políticos; con mentiras incumplen sus promesas de liberarlos si la oposición accedía al «diálogo» con el gobierno (Cabello declaró esta semana que «Leopoldo López seguirá preso por asesino»); con falsedades quieren negar la  crisis humanitaria que nos coloca a la cabeza de los peores países del Tercer Mundo. La economía de Haití crecerá este año 1,5% mientras la de Venezuela caerá 10%, el peor desempeño del continente. El «aunque usted no lo crea» del legendario Ripley revivió estos días en Ginebra con el espectáculo grotesco de los engaños expuestos por la costosa delegación de Maduro de 40 «enchufados», que viajaron para presentar el Examen Periódico Universal de Derechos Humanos (EPU), ante un auditorio informado urbi et orbi «de que en el régimen de Maduro se violan todos los derechos humanos, hasta considerarlo una dictadura. Los «oradores» no podían ser más representativos de la violación de los derechos humanos que pretendían negar: 2 magistradas del tsj (que ha sentenciado 32 veces contra la AN) y la comadre Oblitas del CNE (que suspendió el RR) dieron «fe» dizque de la «separación de poderes en Venezuela». Mientras la ministra Aloha Núñez defendía la «atención» oficial a las etnias indígenas con un «cuento de hadas», como calificase el internacionalista Salgueiro las mentiras de la delegación roja, miles de indígenas mendigan enfermos y sin atención médica. El diario El País de Madrid publicaba un informe («La soledad de los indígenas venezolanos») en el que narra la ola de epidemias que incluye malaria, VIH y zika, que merman a 7 etnias de Venezuela. Los ambulatorios no tienen medicinas, ni insumos, ni personal. Desde 2009 no se asigna el presupuesto estipulado para el plan de salud yanomami. 2014 cerró con 240 muertos por malaria, neumonía, diarrea y hepatitis; en Padamo murieron en 3 días 15 personas por tuberculosis. En lo que va de año, las organizaciones indígenas denuncian más de 70 muertos, sobre todo niños y mujeres, por desnutrición y VIH. Las warao embarazadas con VIH tampoco están recibiendo tratamiento.

 

 

 

 

Más de 100 países intervinieron críticamente al escuchar las mentiras de la delegación: Iris Varela juró que «nuestro sistema penitenciario sirve de ejemplo para otros países del mundo (…) porque se respetan religiosamente los derechos humanos”. Cero referencia a que en su gestión asesinaron a 135 reclusos. Ni del hacinamiento. Ni de la desviación de 6.465.000 millones de dólares en cárceles nunca construidas. Ni de la corrupción, tráfico de armas y drogas dentro de los penales, denunciados por el OVP. Ni de las prisiones como guarida de delincuentes que salen a delinquir y luego se refugian en las cárceles, como reseña el periodista Mayorca. La ministra de Salud negó la escasez de medicinas e insumos y citó miles de millones de medicamentos que, según sus mentiras, están al alcance de los enfermos en el país, burla desmentida por la Federación Médica Venezolana al reportar 90% de escasez de medicamentos, tanto en farmacias como en hospitales. La petición más repetida por los 103 países interesados en Venezuela fue la de «garantizar la libertad de expresión» (libertad de información, protección de los periodistas, cese de las represalias a los medios, etc.). Pero hubo muchas solicitudes más: «reactivar el revocatorio», liberación de los presos políticos cese de represión, respeto a la AN, abrir canal humanitario, etc. La mayoría de los países pidieron «que Venezuela invite a expertos en derechos humanos de la ONU». La canciller respondió la petición con un insulto: «Expertos en derechos humanos vendrán al país cuando no tengan posiciones parcializadas». Es decir, hasta que aplaudan las violaciones oficiales, como hace el impresentable Samper. Delcy cerró con esta «cantinflada»: «Nuestro modelo de derechos humanos es vanguardia en el mundo». Desde que llegó al poder, el chavismo no ha permitido que vengan relatores de derechos humanos (ni de ONU ni OEA). La última visita fue en 1996. Entre 2015 y 2016, según el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Venezuela ha rechazado la visita de 10 relatores especiales, entre ellos el de la libertad de expresión. La directora de la ONG Transparencia Venezuela resumió magistralmente el grotesco espectáculo del régimen en Ginebra: «Gobierno quiso quedar bien ante la ONU a punta de mentiras». La guinda de la torta es de Reporteros sin Fronteras, al colocar a Maduro encabezando la lista de los «depredadores» de la prensa en América Latina, seguido de los Castro en Cuba y el cártel mexicano de los Zetas. ¡Edificante lista!

 

 

 

Pero con mentiras el pueblo no come ni Maduro gana elecciones, por eso el dictador, sus cuatro comadres y su tsj están robando al pueblo su derecho de votar.

 

 

Marta Colomina

 

Maduro no es el Papa, ni el Papa es Maduro

Posted on: noviembre 6th, 2016 by Laura Espinoza No Comments

 
Aunque no nos haya gustado la congelación de las medidas de la Asamblea Nacional para enjuiciar políticamente a Maduro y otras acciones que otorga la Constitución al Poder Legislativo, lo cierto es que el liderazgo opositor no podía ignorar el «llamado urgente de la delegación del Vaticano y de la Conferencia Episcopal, a iniciar un proceso de diálogo nacional» a través del cual pedían «posponer las medidas anunciadas e intentar acuerdos de paz y entendimiento con el gobierno, por los que clama la comunidad internacional». No es lo mismo que convoquen a un diálogo «Maduro y sus amigos Zapatero, Leonel y Torrijos», a que lo haga el papa Francisco. Y no es lo mismo porque Maduro no es el Papa, ni el Papa es Maduro: «Hay que encontrar el camino de la paz en el marco de la ley y de la democracia», expresó el Papa a través de la mediación de su representante Claudio Celi. Como se sabe, la oposición está reclamando derechos pisoteados por el gobierno, tales como la recolección de firmas del revocatorio o, en su defecto, adelantar elecciones presidenciales; libertad de los presos políticos, retorno de los exiliados; atención urgente de las víctimas de la crisis humanitaria causadas por la corrupción y erradas políticas oficiales, y respeto a la AN, cuyas potestades han sido confiscadas por el régimen. Si Maduro pretende seguir ganando tiempo para continuar privándonos de nuestros derechos políticos y sociales, confiamos en que el mediador del Vaticano no avalará esa práctica que obligaría a la oposición a continuar en la calle y a la AN en su activa defensa de la democracia, tan escarnecida por Maduro. El «diálogo» de 2014 sirvió para descabezar el valeroso movimiento estudiantil (con numerosas muertes causadas por los cuerpos de seguridad y «colectivos» del régimen) y para condenar con pruebas amañadas –como recuerda la colega Marianella Salazar– a ciudadanos y estudiantes, entre ellos a Leopoldo López: «El inesperado diálogo de ahora –concluye Marianela– lo recibimos como un niño maltratado, que a cada momento espera el próximo golpe».

 

 

 

El mundo manifiesta su apoyo a la lucha pacífica del pueblo de Venezuela por la democracia y la libertad, y expresa su preocupación por el hambre, las enfermedades y penurias que han tornado miserable la vida de su población. Cientos de países y varios presidentes en ejercicio, como el peruano, el argentino, el brasileño, el paraguayo, el chileno, el español y otros, claman por el retorno de la democracia a nuestro país y han puesto grandes esperanzas en el «diálogo» que ,con la mediación del Vaticano, se inició la pasada semana. El papa Francisco dijo «apostar todo por el diálogo en Venezuela», a la par que elogió la «estatura política de los intermediarios Zapatero, Fernández y Torrijos», quizá con la idea de halar la brasa para la «sardina» papal, dado que los tres expresidentes llevan meses «mediando» sin que haya salido de su boca palabra alguna sobre «revocatorio», «respeto a la AN» y «liberación de los presos políticos», o mostrasen preocupación por la terrible crisis humanitaria. Quizá por eso, analistas, como Carlos Blanco, suponen que la política del Vaticano «se plegó a la operación Zapatero» y se alineó con «su estrategia que no sería la de evitar la violencia, sino impedir el cambio de régimen». Sin embargo, millones de personas, dentro y fuera de Venezuela, confían en que la mediación del papado obre el milagro de restituir la paz, cese la represión y violación de los derechos humanos y se restituyan los derechos a la salud, la educación, la alimentación, la seguridad y los derechos electorales. El Nuncio Apostólico aseguró que el papa Francisco «conoce muy bien la situación de Venezuela» y pidió al pueblo «tener confianza en el sumo pontífice». El secretario general de la OEA, Luis Almagro, saludó la mediación papal y dijo esperar que «el diálogo con mediación del Vaticano restituya la separación de poderes, los derechos electorales del pueblo y el respeto a la Constitución» y dijo «confiar en que el enviado del papa Francisco ayude a la liberación de los presos políticos, la agilización de los procesos electorales y la apertura de un canal humanitario». Esta semana leíamos que 50% de más de tres toneladas de medicinas enviadas por Chile a Cáritas de Venezuela el régimen las dejó vencer en el puerto de la Guaira, negado como está criminalmente a recibir ayuda internacional, mientras el pueblo se muere de hambre y de enfermedades curables, por falta de fármacos. Almagro, tras la suspensión del revocatorio, definió el régimen de Maduro como «dictadura» y añadió que esa decisión dejó a Maduro «sin legitimidad de origen». El expresidente boliviano Jorge Quiroga exigía esta semana que el «fin del embargo a Cuba y la paz en Colombia no pueden construirse a costa de tolerar una dictadura en Venezuela»; el cantante Rubén Blades acusaba que «Maduro ha optado por ignorar su propia Constitución» y el presidente peruano formalizaba su denuncia sobre “la alteración del orden constitucional y democrático en Venezuela”… Y así miles de exhortaciones para que cese la dictadura.

 

 

 

Maduro nunca ha jugado limpio y la curia lo sabe. La primera reunión del «diálogo» en el Museo Otero, no se ejecutó en la mesa instalada para la transmisión, sino en un salón apartado de la prensa (que no tuvo acceso al audio sobre lo que ocurría en la mesa central), para que creyéramos que la MUD era copartícipe de ese secretismo, mientras VTV vomitaba groseros insultos contra la oposición y daba la versión que favorecía al gobierno. Maduro sabe que necesita a la AN, pero como el escorpión de la fábula de Esopo, le clava el aguijón que impedirá la aprobación de los préstamos de la República, sin cuya anuencia la Venezuela de Maduro no recibirá ni un centavo en créditos externos, tal como han advertido firmas como JP Morgan. Libera a cinco presos políticos, a los cuales su Sebin había sembrado explosivos y otras falsas pruebas y aún se mantienen 111 presos políticos que Maduro usa como rehenes para hacernos creer que su liberación podría ser parte del acuerdo, como pide la MUD. Pero la naturaleza de Maduro es la del escorpión: le dan la gran oportunidad de salir del atolladero (casi 90% de rechazo popular, el país quebrado y una población hambrienta y desesperada dispuesta a no abandonar la calle hasta su salida del poder) y este activa su aguijón contra la paz, encarcelando a 17 jóvenes en Aragua; su Sebin secuestró en la clínica donde iba a ser operado de emergencia al diputado Rosmit Mantilla y lo encarceló en una celda de castigo sin agua, luz, ni atención médica. «La inmunidad no te salvará de un carcelazo», gritó el escorpión al diputado de VP, Freddy Guevara, a quien llamó terrorista mientras ordenaba a sus poderes llevarlo a la cárcel, al tiempo que sus esbirros niegan las visitas a los numerosos presos políticos de VP, incluidos Leopoldo López y Ceballos. Y la guinda de la torta: el jueves, un Maduro desquiciado porque la oposición está firme en sus reclamos electorales, liberación de presos políticos, respeto a la AN y desactivar la crisis humanitaria, vocifera en cadena, para estupefacción del mediador Vaticano: «La oposición no entrará a Miraflores ni con votos, ni con balas». Consummatum est…

 

 

Marta Colomina

@colominam

La naturaleza del escorpión

Posted on: octubre 30th, 2016 by Laura Espinoza No Comments

 

 

Todo en Maduro y su régimen es engaño y violencia Está en su naturaleza. En plena crisis humanitaria, fleta dos aviones y con costosa comitiva, emprende “una gira relámpago” por varios  países del Medio Oriente con la excusa de “estabilizar los precios del petróleo”, mientras sus ujieres tribunalicios y las cuatro comadres del CNE cumplían las órdenes de eliminar inconstitucionalmente el revocatorio, y grupos violentos y financiados por su gobierno allanaban la sede del Parlamento, destrozaban sus instalaciones, golpeaban a diputados y a periodistas y, pistola en mano, robaron una cámara de Globovisión, tres chalecos antibalas al personal de Telecaribe y, siempre a punta de pistola, arrebataron varios celulares a los allí presentes. Uno de los objetivos del viaje no era solo simular un “yo no fui” sobre el golpe de Estado contra el referéndum revocatorio, que convertiría inequívocamente a su régimen en un dictadura, sino, y sobre todo, pedirle un encuentro “relámpago” al papa Francisco con el vano propósito de lavar su deteriorada imagen mundial de violador de los derechos humanos. Como las fotografías del “encuentro” debían ser tan poco halagadoras como las palabras del santo padre a Nicolás, Villeguitas –reincidente jefe de la oficina de propaganda del régimen–decidió publicar las viejas gráficas de otra cita anterior de Maduro con el papa, y las hizo pasar como actuales. Es decir, que las fotografías divulgadas oficialmente no corresponden a esta última visita en la que Su Santidad instó a Maduro a “escuchar a los venezolanos”, y sobre la cual reza el comunicado oficial del Vaticano que “el encuentro se celebró en el marco de la preocupante situación de crisis política, social y económica que ese país está atravesando, y que repercute duramente sobre la vida diaria de toda la población”, prueba de que al Papado no pueden darle gato por liebre porque conoce la terrible crisis humanitaria venezolana creada por las catastróficas políticas de su visitante.

 

 

 

Maduro está con el agua al cuello. Mientras otros países productores acuden a los ahorros guardados en tiempos de bonanza petrolera para paliar la actual caída de los precios del crudo, el chavismo no solo dilapidó los ingresos recibidos por billón y medio de dólares (1,5 millones de millones) en corrupción, despilfarro y regalos a sus compinches externos, sino que en plena época de vacas gordas se endeudó hasta límites insostenibles, como demuestra la vergüenza de haber podido canjear solo 39,4% de los bonos de Pdvsa (declarados en “default selectivo” por Standard & Poors). Pdvsa registra 10 meses de caída de su producción, hasta llegar hoy a solo 2 millones de BPD, lo que significa que en los 18 años de chavismo perdió millón y medio de BPD, dado que Chávez la recibió con 3,5 millones BPD. A causa del grave deterioro actual de las refinerías nacionales por no haberles hecho la inversión y mantenimiento requeridos, Pdvsa está importando 250.000 BPD de gasolina y diesel para atender el mercado interno. Pero no solo han arruinado a Pdvsa, sino la producción industrial del país que, acosada por el régimen, ha caído más de 80% por falta de materia prima, revela Conindustria.

 

 

 

El amedrentamiento aumenta: el jueves el Sebin rodeó hostilmente las instalaciones de Polar y la residencia de Lorenzo Mendoza, su presidente. El sector agropecuario venezolano se declara en emergencia (recordemos los nefastos “exprópiese”) a causa del incremento del abigeato, robo de maquinarias, extorsión y secuestro, sin que Maduro mueva un dedo para combatir la destrucción y ruina de estos sectores vitales, ahora que no hay divisas para importar alimentos y medicinas.

 

 

 

A su llegada al país, lejos de pedir sanciones para quienes invadieron salvajemente la AN, Maduro justificó el hecho y se burló de la oposición. Dijo cínicamente: “La gente entró riéndose y abrazándose a la AN para hacer sentir la voz del pueblo”, mientras que el cardenal Urosa calificó la agresión a la AN por grupos violentos del oficialismo como “sumamente grave y contradictoria al diálogo”. Sabedor Maduro de la presencia del delegado Vaticano en Venezuela para participar en el controversial “diálogo”, suavizó su “discurso”, aunque no sus delictivas acciones: cerró 10 estaciones del Metro para impedir el acceso de los participantes a la autopista Fajardo en la Toma de Venezuela; la GNB atravesó camiones y gandolas y trancó el paso mientras exhibían su violencia contra los manifestantes. Las bandas armadas pagadas por el gobierno, llamadas cínicamente “colectivos de paz”, junto a funcionarios controlados por el régimen, comandaron una feroz represión contra los concurrentes, al menos, en 13 regiones del país. Un policía de Miranda fue asesinado y aunque Maduro se apresuró a culpar a Capriles, todos sabemos que quienes van armados son los violentos rojos. El chavista alcalde de San Francisco, en el Zulia, ordenó disparar con armas de fuego a los manifestantes y ocasionó 5 heridos, algunos de gravedad. (“disparar a matar es un delito de lesa humanidad” denunció el diputado Julio Montoya). Varios policías de Aragua golpearon y patearon con saña a una mujer y la dejaron malherida. Los tupamaros del gobernador de Mérida destrozaron la Alcaldía del municipio Alberto Adriani. Un joven de Primero Justicia perdió un ojo por agresiones policiales en Barinas. Y así cientos de denuncias sobre los ataques de los grupos oficialistas contra los manifestantes .Hasta el jueves el Foro Penal Venezolano reportaba 263 personas detenidas durante la Toma de Venezuela, y más de 100 manifestantes heridos. La cronista no puede apartar de su mente el video en el que un soldado apunta con su fusil a un joven tachirense y este, con los brazos abiertos, le dice dramáticamente al soldado: “Mátame, que tengo hambre”. No le disparó. Seguramente el soldado tenía tanta hambre como el joven manifestante. El corresponsal de la cadena norteamericana ABC fue detenido en Carabobo por grabar en un hospital, acusado de “¡comprometer la seguridad pública!” (el régimen de Maduro compromete la vida de los venezolanos con hospitales convertidos en lugares de muerte).

 

 

 

Las protestas mundiales por la violencia oficial en Venezuela, el golpe contra los derechos electorales de la población y la terrible crisis humanitaria aumentan cada día. Más de 20 expresidentes señalan que el “diálogo” entre gobierno y oposición solo es posible cuando Maduro acate la Constitución; Estados Unidos, la Unión Europea, el secretario general de la OEA, la Unión Interparlamentaria Mundial, numerosos países del continente y cientos de organizaciones, exigen presión internacional contra Maduro para que reactive el RR o adelante elecciones presidenciales, cese la represión, libere a los presos políticos, haya separación de poderes y atienda con urgencia la crisis humanitaria .La contundencia de las manifestaciones opositoras en todo el país, como La Toma de Venezuela, no va a cesar, pese a la violencia homicida del régimen. Cuando el general y ex ministro chavista Rodríguez Torres, ante la suspensión del RR, declara: “Cerrar las puertas a la democracia es abrirlas a la violencia”, es otro botón de esa muestra de chavistas cada día más amplia, de que el escorpión no morirá ahogado sobre la espalda de la pobre rana, sino por su propio aguijón.

 

 

 

Marta Colomina

Maduro: dictadura con hambre y hampa

Posted on: octubre 23rd, 2016 by Laura Espinoza No Comments

 

“Maduro hará locuras en las próximas horas, antes de que se cumpla el último requisito para activar el revocatorio” (RR), advertía Henrique Capriles dos días antes de la grotesca mascarada seudojudicial mediante la cual, al unísono, cinco tribunales penales chavistas de varios estados del país “anulaban” la recolección del 1% de las firmas del RR contra Maduro (el diccionario define “mascarada” como “una comparsa de máscaras. Farsa. Enredo y trampa para engañar”). Mientras los constitucionalistas del país demostraban que “los tribunales penales no tienen competencia para anular el 1% de las firmas”, el cne, movido por el mismo resorte rojo de la farsa tribunalicia, anunciaba la paralización, hasta nueva orden judicial”, de la recolección del 20% de las firmas para el RR pautada para fines de este mes.

 

 

 

Por si fuera poco este golpe de Estado contra la soberanía popular, uno de los tribunales de la mascarada ordenó la prohibición de salida del país a ocho dirigentes de la Unidad Democrática, entre ellos, al gobernador Henrique Capriles Radonski y a Jesús Chúo Torrealba, coordinador de la MUD. Cada día los venezolanos y la comunidad democrática mundial comprueban que el régimen de Maduro ha degenerado en una dictadura caracterizada por :1) la existencia de más de un centenar de presos políticos; 2) la siembra de falsas pruebas en contra de la disidencia fabricadas por la feroz policía política (Sebin) con las que detienen a opositores; 3) en la negación de los derechos constitucionales de los venezolanos a un RR que permitiría la salida constitucional y pacífica de Maduro, RR obstaculizado través de añagazas impuestas por el tsj y el cne, al servicio de Maduro. 4) De las muchas elecciones convocadas por Chávez cuando disfrutaba de apoyo popular, el chavismo de Maduro, desde su enorme derrota del 6-D-2015, ha proscrito los comicios reglamentarios y obligatorios de la democracia, tales como las elecciones de gobernadores –que legalmente deberían ser este diciembre, y las cuatro comadres del cne pospusieron para mediados de 2017– y el RR contra Maduro, figura constitucional creada por Chávez para salir de aquellos gobernantes que violasen la carta magna. 5) Otro signo dictatorial es el incumplimiento de las decisiones de la AN, elegida masivamente por el pueblo a través del voto y cuya violación se ampara en las “sentencias” politizadas de su sala inconstitucional del tsj (integrada por militantes y exfuncionarios del chavismo), la cual, en menos de un año, ha dictado treinta sentencias de anulación de igual número de decisiones soberanas de la AN. El tsj –convertido en el brazo político del gobierno dictatorial– ha castrado el poder más democrático y directo que proviene de la soberanía popular por vía del voto: la Asamblea Nacional.

 

 

 

Desde que visitó Turquía, Maduro dijo haber regresado “más claro” tras haberle contado el presidente Erdogan los “detalles” del golpe de Estado que, al decir de reputados analistas, habría sido un “autogolpe” para salir de sus adversarios políticos, como, en efecto, está haciendo. “Yo vengo ahora más claro. El que intente violar el derecho a la paz, la Constitución y algo parecido a un ataque terrorista o golpe de Estado, Erdogan quedará como un niño de pecho ante lo que yo voy a hacer”, amenazó Nicolás a su regreso. ¿De cuál paz habla Maduro, si desde su llegada al poder en 2014, ha habido 399 presos políticos y 6.528 arrestos contra disidentes en Venezuela, muchos de los cuales han sido torturados, según denuncia el Foro Penal? ¿Cuál paz han conocido los mineros del Nuevo Callao, perseguidos y asesinados por la presión de las trasnacionales del oro con las que Maduro negocia el destructivo Arco Minero? ¿Cuál paz si Maduro ha declarado la guerra a los venezolanos, a quienes priva de los alimentos y medicinas necesarios, mientras campea la corrupción, y su brutal Sebin siembra armas a opositores inocentes, como hizo con el alcalde Ocariz y con el concejal tachirense de VP, José Vicente García? ¿De qué ataques terroristas puede hablar sino de los del terrorismo judicial que confisca la soberanía popular y el de los delincuentes que andan con armas largas y granadas atracando y asesinando impunemente a gente desvalida? La insania delictiva aterra: 25 personas han sido desmembradas en la región central, y hasta un delincuente desgarró las orejas de una niña para robar sus zarcillos. Son Maduro y sus corrompidos poderes los que ordenan los mazazos contra el RR y la demanda contra los diputados de Amazonas, a quienes les robó su derecho de representar a sus compañeros indígenas y de paso robó a la MUD su mayoría calificada en la AN. Los delincuentes del gobierno torturan a inocentes; usan los tribunales para perseguir a la disidencia y humillan al pueblo al suspenderle la entrega de los CLAP –adquiridos con dinero público– si no apoyan a Maduro. El indigno ministro Ricardo Molina amenazó que “escuálido que firme que se olvide los CLAP, Misión Vivienda y Barrio Tricolor”. La sindicalista Máspero denunció que “suspenderán por 3 meses a beneficiarios de los CLAP que critiquen al gobierno”. La caza de brujas es hasta con los pobres de solemnidad: muchos son excluidos de los CLAP al ser acusados de opositores. Médicos del Hospital de Maracay fueron secuestrados por colectivos violentos que se robaron las medicinas de los niños. El gobierno delinque al ocultar la muerte de cerca de 30 infantes por difteria, sin que Maduro se inmute ante la falta de vacunas. El año cerrará con más casos de tuberculosis y más de 200.000 enfermos de malaria, males erradicados hace décadas. La desnutrición por el hambre masiva en aumento ha ocasionado numerosas muertes y enfermedades insalvables.

 

 

 

La corrupción e ineptitud chavistas han acabado hasta con la otrora indestructible Pdvsa. Maduro inicia “una gira relámpago” por los países productores de crudo, dizque para “estabilizar los precios” (otro despilfarro de dólares con delegación familiar incluida). La rusa Rosneft se niega a reducir producción, los países OPEP la aumentaron en septiembre, Libia e Irak están recuperando sus niveles de producción; Petrobras está batiendo récords en bombeo de crudo, y hasta su “pana” de Irán se niega a cerrar el chorro. Solo en la quebrada Pdvsa la producción cae a 2 millones bpd, mientras su presidente amenaza con default a tenedores de bonos, cuyo canje ya ha fracasado 3 veces. El ministro Jesús Faría jura que “están aumentando las exportaciones” (sic) y que “lo más difícil de la crisis económica ya pasó”, mientras que el director del Instituto Venezolano de la Leche y la Carne, Rodrigo Agudo, que sí sabe lo que viene, advierte que la crisis alimentaria empeorará en 2017, debido a los ataques oficiales a productores y comerciantes desde 2015. El FMI calcula una inflación de 2.200% para 2017 y este 2016 concluirá cercana a 1.000%. Mientras Nicolás sigue dilapidando en viajes inútiles, primero Colombia y ahora Brasil piden ayuda por la creciente migración venezolana que huye del hambre y de la inseguridad. Los dos “legados”, hambre y hampa, de la agonizante dictadura de Maduro.

 

 

 

 Marta Colomina

La catadura moral del régimen

Posted on: octubre 9th, 2016 by Laura Espinoza No Comments

 
La perversión e ilegalidad del régimen chavista no tienen límites. Todas las tropelías le son permitidas con el apoyo de la FAN y la obediencia inconstitucional del tsj, el cne, la fiscal y el defensor: corrupción, hambre, violencia, inseguridad, escasez (de alimentos, medicinas, electricidad, agua potable, etc.), pobreza, desempleo, violación de los derechos humanos (derecho a la salud, a la seguridad, al trabajo, a la educación) y de nuestros derechos políticos, como el de impedirnos el revocatorio (RR) este año; con presos políticos que pagan cárcel y son torturados siendo inocentes, y hasta el derecho de circular libremente por las calles: nos lo prohíbe el hampa criminal provista con armas de guerra (bajo el silencio cómplice de la FAN ). El jueves “colectivos” del 23E “ordenaron” y “prohibieron” al Cicpc transitar por la zona. En fin, que no hay derecho que no sea violado por el régimen de Maduro.

 

 

 

Las redes sociales mostraron esta semana imágenes de la crisis humanitaria que sufre el país a causa de la corrupción e ineficacia de Maduro: numerosas personas hambrientas (hombres, mujeres y niños) hurgando en las bolsas de basura de varios restaurantes de Caracas en busca de comida. El prestigioso diario norteamericano The New York Times presentaba la dantesca realidad de los pacientes psiquiátricos en la Venezuela devorada por la miseria y la escasez: “La falta de medicinas lleva a los enfermos mentales de Venezuela a la psicosis y a la desesperación”. El Observatorio Venezolano de la Violencia publica que “84% de las víctimas de la violencia son pobres”, y el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, le pedía a Maduro que “tomara en cuenta muy seriamente las protestas de los venezolanos sobre la situación del país”. La coordinadora del Ministerio de Salud en el estado Bolívar prohíbe a los médicos informar sobre la muerte de numerosos infantes por un brote de difteria (señal de que el régimen habría suspendido el obligatorio plan de vacunación). Están apareciendo otros casos en Monagas y Anzoátegui, sin que el gobierno permita declarar la emergencia. El Observatorio Venezolano de la Salud, en carta pública, le pide a la Organización Panamericana de la Salud atender la crisis de malaria, que se sigue extendiendo (enfermedad erradicada hace años), en medio de una escasez general de medicinas que se mantiene en 85%. Por si fuera poco, murió un preso de la PGV, en San Juan de los Morros, por tuberculosis (enfermedad padecida por 27 reclusos más), en cuya prisión hay 1.500 adultos y 800 niños hacinados, “en un ambiente de falta de control y autoridad”, como señala el director del Observatorio Venezolano de Prisiones. Esta lista de miserias y delitos ocurría mientras Maduro enviaba a Haití, azotado por el huracán Matthew, 20 toneladas de ayuda en alimentos, medicinas y otros, “intentando con ello desmentir la gravedad de la crisis humanitaria venezolana”, caracterizada por una escasez inmensa de medicinas y de alimentos básicos. De los “inventos” de Maduro, como el “sacudón”, surgen cada vez peores resultados. Ahora grita que octubre será el mes “del golpe de timón para lograr la mayor eficiencia y eficacia posibles”, virtudes ausentes desde siempre en el chavismo. A Aristóbulo le pide “eficiencia o nada” y nos tememos que será “nada”, como ocurrió con Luisana Melo, inepta ministra de Salud a quien Maduro le quitó la coordinación del plan “800 salud” y lo traspasó a los CLAP, con lo que el “remedio” será peor que “la enfermedad”. La inflación y la escasez se dispararon en los 8 meses largos de su decreto de emergencia, que al carecer de legalidad (Maduro ha utilizado 1,5 billones de bolívares en créditos adicionales sin aprobación de la AN) –como le ocurrirá a la aprobación inconstitucional del presupuesto de 2017– los contratos que se suscriban serán nulos. Nicolás decreta otra rapiña confiscatoria: “50% de la producción agroindustrial nacional irá directa a los CLAP”; y como el gobierno no produce porque lo “expropiado” está en ruinas, ese 50% que produce el sector privado será confiscado, sin pago alguno (confiscar es robar) con lo que ambos sectores –ya de por sí empobrecidos por el acoso oficial– quebrarán y aumentará la escasez. La industria petrolera, confiesa el sindicalista Wills Rangel –cuenta con 156.000 trabajadores y su producción a duras penas llega a 2 millones de bpd, aunque nos mienta diciendo que produce 3 millones. Cuando Chávez llegó al poder, Pdvsa tenía una nómina de 45.000 profesionales que producían 3,5 millones de bpd. Hoy la ruina de Pdvsa es tal que sus trabajadores “venden sus uniformes para comprar comida”. En agosto se registraron 8.350 apagones (20 trabajadores del sector eléctrico han muerto por inseguridad industrial). El FMI pronostica un caída de la economía venezolana de 10% en 2016 y una inflación en 2017 cercana a 2.000%. Para cubrir la canasta escolar se requieren 24,9 salarios mínimos. Por si fuera poco, China cerró el grifo de los préstamos a Venezuela.

 

 

 

La prensa internacional publicó estupefacta las insólitas declaraciones de Diosdado Cabello: “Leopoldo López será acusado de 43 homicidios por los familiares de los fallecidos durante las protestas de 2014”, a sabiendas de que las muertes fueron ejecutadas básicamente por cuerpos de seguridad y paramilitares del régimen. El acoso es dictatorial, ahora contra varios alcaldes opositores (Maracay y Maturín) sacados a punta de pistola por militantes del PSUV. Maduro grita: “Aquí no hay revocatorio, para que lo sepan” sin que el podrido cne simulase un amago de “protesta”. Puesto a mentir, Nicolás grita que “si hubiera nuevas elecciones parlamentarias, el oficialismo recuperaría la AN”. La pregunta es de cajón: ¿si está tan seguro de que las ganaría, por qué tiene tal pavor al revocatorio? Hasta el chavista Rangel Silva, ex ministro de la Defensa y gobernador de Trujillo, reconoce que “el gobierno perdería el RR de realizarse este año”. Mientras Colombia hizo el plebiscito en 6 semanas, las 4 indignas del cne siguen impidiendo el RR. Hasta el cne y tsj rojitos se preparan para decir que hubo “fraude” en las firmas del 1%. Añaden que no hay dinero ni para las regionales, ni el RR, aunque lo hubo a borbotones para dilapidar 200 millones de dólares en la bufonada del NOAL, y ahora para instalar una emisora en Miraflores y así aumentar su obscena hegemonía comunicacional. Incluso sugieren que los retrasos en la llegada de recursos postergarían el 20% para noviembre, y pasarse por el arco de triunfo los derechos y esperanzas de un pueblo que quiere sacar pacíficamente del poder a Maduro.

 

 

 

Quienes juegan con fuego, suelen quemarse. El secretario general de la OEA, Luis Almagro, ante tanta iniquidad, declaró tajante que “si no hubiera RR este año, sería imprescindible aplicar acciones drásticas”. Venezuela acaba de ser calificada por el Foro Económico Mundial como el país más corrupto, seguido de Bolivia, del pana Evo; del Brasil, de su también pana Lula, y de la beneficiaria de los 800.000 dólares de la valija de Antonini, Cristina K. Nicolás está solo. Sus protegidos del continente perdieron el poder ignominiosamente y están siendo juzgados, como le pasará a Maduro y su tropa.

 

 

Marta Colomina

Cesta familiar: Bs 500 millones de 2007

Posted on: octubre 2nd, 2016 by Laura Espinoza No Comments

 

A fines de 2007, alguno de los farsantes que han desfilado como costosos asesores del chavismo, incluidos los españoles de Podemos, le vendió a Chávez la idea de quitarle 3 ceros a la moneda para combatir la inflación. En diciembre de 2007, Chávez nos deseó el Feliz Año con el decreto del que denominaría pomposamente “bolívar fuerte”. Pero el despilfarro, la ineptitud, la corrupción, la “regaladera” a sus compinches externos y la maquinita de fabricar billetes del BCV, sin descanso y sin respaldo, nunca cesaron, así que el dinero circulante seguía creciendo sin control, y pronto aquella canilla de pan que comprábamos con el “bolivita” fuerte empezó a costarnos 10 bolívares, es decir, 10.000 de los de antes; y luego 100 bolívares (que el régimen seguía llamándolos “fuertes”). Y así hasta llegar a la aberración constatada por el Cenda –Centro de Documentación y Análisis Social, que le pone voz al delictivo silencio del BCV sobre inflación y escasez– de que el precio de la cesta básica familiar durante el pasado mes de agosto (alimentos, artículos de limpieza, higiene personal y medicinas) alcanzó la escandalosa cifra de 502.881,34 bolívares, o sea, más de 500 millones de los bolívares de hace 9 años. El Cenda también reportó el valor de la canasta alimentaria, que cerró el mismo mes en 383.925,20 bolívares (casi 384 millones de los bolívares “viejos”), lo que supone “un salto de 658,4% más que en el mismo mes de 2015, cuando se ubicó en 50.625,52 bolívares”. Al comparar el costo de la canasta alimentaria con el salario mínimo vigente, queda desmentido el cacareo del régimen sobre los “logros de la revolución”: un grupo familiar requeriría hasta 25,5 sueldos básicos para adquirirla, si la consiguen. Porque estos aterradores datos están incompletos sin las cifras de escasez. En agosto se ubicó en 43,10%: “La lista de los productos muy difíciles de obtener –corroborada por el Cenda– incluye leche en polvo, atún enlatado, pollo, carne e hígado de res, pernil, huevos, queso blanco duro y mortadela, caraotas, lentejas, arvejas, arroz, margarina, azúcar, aceite de maíz, harina de trigo, avena, pan, pastas alimenticias y harina de maíz”, es decir, los esenciales.

 

 

 

Maduro tiene como asesor a quien él llama “el Cristo de la economía”, un marxista del Podemos español, quien sería el artífice del Decreto de Emergencia Económica, el mismo que en ocho meses de aplicación y sucesivas e inconstitucionales renovaciones ha disparado la escasez de alimentos y medicinas, las colas, la especulación, la inflación y el deterioro del aparato productivo. La situación empeora aceleradamente, sin que Maduro reconozca la gravedad de la crisis humanitaria y solo se ocupe de su obsesión por el poder. El politólogo Nicmer Evans, de Marea Socialista, afirma que “después de todos estos meses con el Decreto de Emergencia, estamos peor, lo que evidencia que los intereses no son los de la mayoría, sino de sectores que se están enriqueciendo aún más por la asignación discrecional de las divisas”. El desorden y la corrupción son mayúsculos. El representante de Venezuela ante la OIT, Jorge Roig, explicó que mientras otros países acuden a los mercados con anticipación para comprar materia prima de mejor calidad y mejor precio, los importadores del chavismo “están comprando el repele”, es decir, lo de peor calidad y con sobreprecios escandalosos. Los comités locales de abastecimiento y producción (CLAP) ni producen ni abastecen. Millones de venezolanos pobres no reciben la bolsa “con raciones de supervivencia” y el bachaqueo se está apoderando de buena parte de su contenido. Los repartidores en el camino les extraen algunos productos a las bolsas que luego bachaquean en el barrio, como denuncia El Nacional, que además informa que a los receptores de las bolsas los obligan a llenar una planilla con todos sus datos y los de su familia, que constituyen “una ficha política, electoral y policial”. El ausentismo escolar es enorme por falta de alimentos y suspensión del PAE. Las cifras de desnutrición infantil son aterradoras. Aunque Maduro y su también inepta canciller niegan que la haya, la dantesca crisis humanitaria es tan innegable que 30 países solicitaron esta semana a la ONU que colabore a paliar la crisis del país, a la par que su alto comisionado para los Derechos Humanos criticó la negativa de Maduro a que accedan al país expertos de Naciones Unidas. El secretario de Estado de Estados Unidos le mostró a Maduro en Colombia su “enorme preocupación por el pueblo de Venezuela, por el nivel de conflicto, el hambre y la falta de medicinas”, y le habría pedido que el RR se realice este año. La situación sanitaria es atroz. La reaparición de la difteria en el país indica que no se está cumpliendo con el plan de vacunación. El Correo del Caroní denuncia que el “gobierno oculta que han muerto 17 niños con difteria”. Se han registrado 148.670 casos de malaria, lo que significa un crecimiento de 359%. Desde hace 6 meses la escasez de medicinas se mantiene en 85%. Y ante este panorama, Aristóbulo Istúriz, Freddy Bernal con sus CLAP, y el ministro Jesús Faría al unísono dicen que “lo peor de la crisis ya pasó” y que este tercer trimestre será tan bueno que hasta cada bolsa de los CLAP tendrá un pernil .Pero la realidad es más terca que las mentiras, porque el experto Jorge Roig asegura, dato en mano, que “viene una etapa mucho peor en materia económica para el país, debido a que no se ha resuelto ningún problema de fondo: siguen los ataques a la empresa privada, bajos precios del petróleo, inflación desatada y cero incentivos a la producción”, y añade que “las importaciones son muy poco transparentes y que el ámbito militar lo hace una caja negra que podría revelar los verdaderos precios”. En dos platos, que Maduro, al encargar a los militares de la importación y distribución de alimentos, los ha puesto “donde haiga”, para seguir sosteniéndose en el poder. Por algo ya las encuestas revelan 70% de rechazo a los militares.

 

 

 

 

Con la población sin alimentos ni medicinas; los delincuentes con armas de guerra y granadas; represión contra la disidencia expresada en la creciente lista de presos políticos; Maduro rechazado dentro y fuera de Venezuela; su ministra de la Mujer (que enmudeció cuando a María Corina los chavistas le quebraron la nariz a golpes en la AN), lejos de preocuparse porque en Venezuela bate récords el embarazo de adolescentes, o de ponerle coto al sufrimiento de madres con niños desnutridos, o protestar por la atrocidad de la desalmada ministra de la Felicidad de desalojar de Ciudad Tiuna a una madre y sus hijos por cacerolear a Maduro, la grotesca ministra de la Mujer pide al tsj “la prioridad” de “revocar la inmunidad de Henry Ramos Allup por ‘misoginia”, es decir, por aversión a las mujeres, solo porque reclamó a las cuatro chavistas del CNE respetar los violados derechos electorales de los venezolanos, y a la “canciller”, lo que se merece, en su condición de muestra patética de cómo ha degenerado la otrora envidiable diplomacia venezolana. Esta catástrofe es insostenible. Y los ineptos del régimen lo saben.

 

 

 

Marta Colomina

Depravación sin límites

Posted on: septiembre 25th, 2016 by Laura Espinoza No Comments

 
El régimen ha llegado a un estado de perversidad, corrupción y crueldad nunca vistas en  Venezuela. Se observa en la terrible crisis humanitaria que desemboca en un genocidio silencioso, apenas roto por las protestas desesperadas del pueblo hambriento en las colas, y en los saqueos, también por hambre, de camiones cargados de pollos vivos, sacos de arroz, o harina de trigo. Se comprueba en el caso de los neonatos colocados en cajas de cartón en hospitales públicos –cuyas gráficas han recorrido el mundo– condenados, en su mayoría, a morir por desnutrición porque no hay dinero para comprar leche y otros alimentos, medicinas o cunas, mientras Maduro dilapida 200 millones de dólares en el estruendoso fracaso de la Cumbre de los No Alineados, otra prueba de su rechazo internacional, incluso entre la legión de ñángaras y dictadores que nutren el NOAL. Esa perversidad se constata en la escalada represiva del régimen contra la dirigencia opositora (crece el número de presos políticos) y de la réplica de la Seguridad Nacional perezjimenista en la figura del Sebin, tenebrosa policía política que, enmascarada, allana los hogares de líderes disidentes sin orden judicial y tortura a los injustamente detenidos.

 

 

 

Sin que nos detengamos en relatar la soga del narcotráfico en casa del ahorcado, los venezolanos pudimos corroborar esta semana la degradación sin límites del CNE, a través del inconstitucional comunicado de sus “alineadas” marionetas (al igual que los “yesmen” del tsj) en el que las 4 jinetas del apocalipsis electoral cuando se cumplían 126 días de su atraso premeditado del cronograma electoral, describen ,sin pudor, las “condiciones” y fechas para recolectar el 20% de las firmas del referéndum revocatorio a Maduro. Técnicos electorales aseguran, calendario en mano, que la consulta del revocatorio puede y debe hacerse este año. El secretario general de la OEA, Luis Almagro, ha criticado la tendencia del CNE a “manipular los plazos” con el fin de que no haya referéndum este año. El CNE ha violado su propio reglamento, como ha demostrado la ONG Acceso a la Justicia. Todas las revisiones y plazos debieron concluir el 9 de septiembre, y dar paso inmediato a la recolección del 20% de las firmas. ¿Por qué las 4 chavistas plantean esa recolección los días 26,27 y 28 de octubre, si todos los lapsos y la información técnica estaría lista a principios de septiembre? El CNE rojo deja un tiempo muerto entre el 9 de septiembre y el 24 de octubre (más de 45 días) que no aparece estipulado en parte alguna y que constituye un asalto a mano armada a los derechos electorales de 90% de los venezolanos que quieren la salida pacífica y constitucional de Maduro.

 

 

 

Lo que las 4 jinetas le dijeron al país democrático es que, aunque el CNE está obligado a garantizar a todos los electores su derecho de participar en la solicitud del revocatorio, ellas no van a permitir que Maduro sea revocado y que, como hacen también las fichas rojas del tsj, la Constitución se la pasan por el arco de triunfo, porque para eso las bayonetas están a su servicio. Los medios internacionales, y aquellos nacionales no confiscados por Maduro, no dudaron en calificar de “golpe electoral” la decisión del CNE que retrasa el referéndum hasta 2017. El País de Madrid afirma que el “golpe electoral es a causa del desplome de la popularidad de Maduro”, y El Mundo de España señala que no solo “no habrá revocatorio contra Maduro este año”, sino que “también el CNE ha impuesto las peores condiciones posibles para la recogida del 20% de las firmas del censo electoral (…) Si Maduro fuera revocado este año, se convocarían unas elecciones presidenciales imposibles para el chavismo; pero si lo es en 2017, el propio Maduro elegirá a dedo a su sucesor para que gobierne hasta finales de 2018 (…) La otra gran trampa es la obligatoriedad de que el 20% no se alcance a nivel nacional, sino en cada uno de los 23 estados del país, lo que supone una nueva burla constitucional. Las condiciones impuestas por el brazo electoral del chavismo dificultarán al máximo el éxito opositor, que debería recurrir de nuevo a la épica para saltar tal cúmulo de obstáculos”.

 

 

 

Así que las penurias pasadas por los firmantes del 1% del revocatorio serían insignificantes comparadas con las que enfrentarán los del 20%: la oposición había pedido 19.500 máquinas y aprobaron solo 5.392. El ex rector Vicente Díaz acusa lapidario: “Para las primarias del PSUV pusieron 8.300 máquinas, para activación del referéndum revocatorio constitucional ponen 5.300. ¿Cómo le explican eso al país? Para el revocatorio de 2004 a Chávez fue, como dice la Constitución, a nivel nacional. ¿Cómo explican ahora la aberración de que sea por estados?”. La degradación del CNE no tiene límites: “Las máquinas de las zonas más pobladas son menos que las de zonas poco pobladas” cuestiona Díaz. Critica la exagerada cantidad de máquinas que proponen colocar en los barrios del norte de Caracas y en el extremo suroeste de la ciudad, mientras que hay muy pocas en los alrededores de las principales vías. “Debería haber más máquinas, por ejemplo, en los liceos Gustavo Herrera, Andrés Bello o Fermín Toro, en la avenida San Martín, El Valle, Santa Mónica y la avenida Victoria, donde está la mayoría de los electores del municipio Libertador. En el Polideportivo de El Hatillo, uno de los centros más grandes, no hay ninguna máquina y hay muchas en zonas rurales. La situación se repite en Valencia, Maracaibo, Barquisimeto y otras ciudades”. La perversión se confirma cuando exigen un porcentaje de firmas por estado, abiertamente inconstitucional y nunca exigido en revocatorio alguno. La malignidad se extiende al horario de “oficina” para las firmas, que esta vez “se demorará más el firmante porque este proceso tiene una nueva etapa: los ciudadanos deben colocar sus datos en un cuaderno”. El comunicado de las 4 “comadres” coloca la guinda FINAL a su torta: “Si se alcanzara el quórum mínimo para la activación del mecanismo (referéndum revocatorio), la convocatoria del evento tendría lugar a principios de diciembre, cuando se iniciarían los 90 días reglamentarios (reglamento que ellas se inventaron) que concluirían en marzo de 2017”, cuando la mafia de Maduro seguiría en el poder, con una Venezuela en default, Pdvsa y sus bonos basura quebrados, la industria y la agricultura venezolanas en ruinas, inflación de 1.000%; una delincuencia que reina con armas de guerra ante las enmudecidas bayonetas, y el estallido de una hambruna que, según los expertos, desembocaría en un estallido social.

 

 

 

Al cierre de esta entrega “la oposición venezolana rearma su estrategia tras golpe electoral del CNE”, para la que llueven las propuestas: María Corina Machado se inclina por la “desobediencia civil” y el analista Gustavo Coronel cita: marchas; ocupación pacífica y masiva de las calles; desobediencia civil pacífica; denunciar oficialmente la presunta nacionalidad colombiana de Maduro, solicitar la aplicación de la Carta Democrática de la OEA y otras acciones contra el régimen de Maduro, declarado oficialmente como dictadura. ¿Habrán pensado las cuatro jinetas y los golpistas de tsj aquel precepto de que “con la vara que mides serás medido”, y lo recientemente dicho por Ramos Allup de que “cuando el gobierno pierda el poder, deberá enfrentarse a la justicia? Torres más altas y con más bayonetas han caído.

 

 

Marta Colomina