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La Carta Democrática como arma en la batalla decisiva

Posted on: marzo 20th, 2017 by Laura Espinoza No Comments

 

En Venezuela se librará la batalla decisiva de América Latina. Lo ha dicho Raúl Castro en la visita a su colonia como Rey de Cubazuela, trono heredado del difunto Rey Fidel Castro, fundador de la monarquía comunista cubana. Tiene razón, si analizamos pasado y presente. La independencia de Venezuela fue decisiva para el derrumbe del imperio español de América en el siglo XIX. El derrocamiento aquí de la anterior tiranía (1958) fue decisivo en el siglo XX para la caída sucesiva de todas las dictaduras de América Latina que integraban la Internacional de las Espadas. Estos antecedentes avalan que se tenga por decisiva para América la batalla que se librará en Venezuela contra la narco-tiranía gobernante, títere de Cuba, porque tendrá consecuencias para la Internacional Narco-Comunista de América (Foro de Sao Paulo) y para la monarquía comunista cubana, cuya desaparición sucedería a la victoria de la democracia en Venezuela.

 

 

 

Esta batalla tiene dos escenarios: uno externo o continental y otro interno o nacional. Ambos se conectan e interrelacionan, influyéndose mutuamente. El escenario externo está en la OEA, centrándose en la Carta Democrática Interamericana como arma contra la narco-tiranía comunista, títere de Cuba.

 

 

 

Para tener comprensión cabal de este escenario, veamos primero qué es la Carta Democrática Interamericana y cuál su origen y finalidad. En este sentido, recordemos que, derrumbado el imperio comunista soviético, Estados Unidos, entonces bajo la presidencia de Bill Clinton, propuso la globalización económica y política de América. Para hacer efectiva la globalización económica con el capitalismo los jefes de Estado y de Gobierno, reunidos en Miami en 1994, acordaron celebrar la Alianza para el Libre Comercio de América Latina (ALCA), extendiendo así el NAFTA (tratado de libre comercio entre Estados Unidos, Canadá y México), con la cual toda América, con exclusión de Cuba comunista, tendría como sistema la economía de mercado. Y con el fin de la globalización política, teniendo la democracia por sistema, se acordó suscribir la Carta Democrática Interamericana, que se firmó el 11 de septiembre de 2001. Casualmente este día Estados Unidos sufrió el mayor atentado terrorista de su historia ejecutado por árabes musulmanes. Esta coincidencia vincula a la Carta contra el terrorismo.

 

 

 

Viéndose aislada, por la caída del imperio comunista soviético, Cuba comunista había constituido en 1990, junto con el brasileño Lula, el Foro de Sao Paulo como Internacional Comunista de América, ahora Narco-Comunista, el cual obtuvo una victoria política contundente contra Estados Unidos, que terminó perjudicando a toda América, al rechazar el ALCA en 2005. No sucedió lo mismo con la Carta Democrática, que sospechosamente fue firmada antes por ellos. Después se vio el motivo. Es que la Carta les sirvió para impedir las rebeliones cívico-militares contra las tiranías comunistas que irían implantando sucesivamente luego de acceder al poder por vía electoral. Dos factores contribuyeron a desnaturalizar la Carta, transformada en escudo protector de las tiranías comunistas: 1) La obsesión de Estados Unidos por el Medio Oriente, que trajo por consecuencia el descuido suyo de América Latina; y, 2) La ceguera del Departamento de Estado que declinó en el Brasil de Lula, en calidad de potencia sub-regional, la vigilancia de la democracia en América del Sur, lo que fue la mayor torpeza política imaginable en quienes debían saber que Lula compartía con Fidel Castro la jefatura de la internacional comunista americana.

 

 

 

La llegada de Luis Almagro a la Secretaría General de la OEA la ha convertido en campo de batalla entre democracia y tiranía. Concidente con su llegada se ha producido un cambio en la correlación de fuerzas en América, a lo que ha contribuido el fin de la presidencia de Obama, el más obtuso de los presidentes de Estados Unidos en cuanto a la realidad política de América Latina.

 

 

 

La elección de Trump y sobre todo el pronunciamiento unánime del Senado de Estados Unidos exigiendo la aplicación de Carta Democrática a la narcotiranía comunista de Venezuela y el que varios presidentes latinamericanos tengan la misma opinión, han precedido a la presentación por el doctor Luis Almagro de su segundo informe a la OEA sobre Venezuela (que iremos analizando sucesivamente), en el cual solicita la suspensión de la narcotiranía comunista, títere de Cuba, como miembro de la OEA sino convoca elecciones generales de inmediato.

 

 

No importa que la OEA no se atreva a tanto. Lo que importa es que el debate mismo en su seno crea las condiciones para que el desenlace de la batalla decisiva se produzca pronto aquí, mediante la unión cívico-militar.

 

 

 

Jesús Petit Da Costa

@petitdacosta

Limpieza total de Venezuela para encaminarnos al éxito

Posted on: marzo 10th, 2017 by Maria Andrea No Comments

Cuando vayamos a redactar la nueva Constitución debemos comenzar por el reconocimiento sincero de que Venezuela ha sido hasta ahora un fracaso total. Y partiendo de esta confesión íntima examinar las causas del fracaso para poder construir el éxito envidiable que será la Venezuela del futuro.

 

 

 

Reconozcamos que Venezuela es un fracaso político. Lo prueba que dos siglos después de su independencia de España la hayamos perdido, para mayor vergüenza no ante un gran imperio, sino ante una isla arruinada como es Cuba, sin disparar un tiro, por algo insólito e inimaginable: la traición a la patria de civiles y militares que debían defenderla. La dimensión de este fracaso político se mide por el hecho de que somos el único país de América bajo el dominio de otro país, y para mayor humillación arrodillado ante uno de los más pobres y miserables, lo cual demuestra que hemos descendido a lo más bajo que se puede descender políticamente. Lavar esta deshonra exige un escarmiento que se recuerde por generaciones. Impedir que se repita deberá ser la primera previsión constitucional. Siguiendo el ejemplo de los libertadores encabezados por Bolívar debemos pensar seriamente en la pena de muerte o, por lo menos, en la prisión perpetua.

 

 

 

Venezuela es también un fracaso político porque la sucesión de dictaduras ha tenido la culminación en la tiranía de los peores: criminales, ladrones, narcotraficantes y terroristas. No se trata sólo de una tiranía, la que ha sido recurrente desde cuando los civiles se vistieron de militar para conquistar la independencia y desde entonces, ellos y sus herederos en el poder, consideran que el país les pertenece como una indemnización de guerra, que no le cobran a España sino a los venezolanos honestos y trabajadores. Es una deuda que se ha hecho impagable porque crece con los años, en lugar de disminuir amortizada con el saqueo del Tesoro Nacional y de la renta petrolera. A esta deuda, no sólo habrá que declararla inexistente, sino proceder a exigir la repetición del pago indebido haciendo de la cacería de los corruptos y saqueadores del patrimonio público el negocio más lucrativo de la República por las recompensas que reciban sus cazadores como contraprestación a la recuperación de bienes y dinero y a la aprehensión de los criminales, para cuyo castigo no debe haber el impedimento que no permite la extradición a países de justicia más severa contra la corrupción, el narcotráfico y el lavado de dinero.

 

 

 

Tener un gobierno de la delincuencia organizada, caso único en el mundo, se corresponde con el control de carreteras, calles y cárceles por el hampa común, que se ha transformado en autoridad que allí impone su dominio. Forman el ejército criminal de reserva organizado y entrenado por Cuba para fomentar el terror, garantizándose el sometimiento de los venezolanos a la barbarie. Los “pranes” pertenecen a la élite del poder, el cual ejercen efectivamente. Son el detritus de una tiranía en estado de descomposición moral. Hay que combatirlos sin descanso y sin misericordia haciendo de la seguridad democrática el objetivo primario del sistema de justicia.

 

 

 

 

Jesús Petiti da Costa

 

 

Por Confirmado: Francys García

Ahora ir “pa’encima”

Posted on: diciembre 23rd, 2015 by Laura Espinoza No Comments

El 6D hubo un levantamiento cívico contra Maduro y su gobierno títere de Cuba. Fue una rebelión popular usando el arma del voto, de la cual surgió el mandato imperativo dado a los electos de salir de Maduro, primer paso para liberarnos de Cuba, del comunismo y de la narco-tiranía de la delincuencia organizada y así poder comenzar la reconstrucción del país.

 

 
El pueblo se expresó esta vez mediante el voto, porque lo convencieron de que es posible la salida electoral. Ahora le toca a los electos demostrarlo. Y sólo hay un modo de demostrarlo: sacando a Maduro de la presidencia. Si optan por la cohabitación, habrán traicionado a los electores al incumplir el mandato imperativo que recibieron. Si no sale Maduro, quedará claro que no hay salida electoral. Entonces será otra la salida, no sólo de Maduro, sino de los diputados electos también. La crisis económico-social es de tal magnitud que no admite demora para su solución. Y no habrá solución mientras Maduro siga en la presidencia.

 

 
Está visto que Maduro se propone hacer con la Asamblea recién electa lo mismo que hizo Chávez con el Congreso en 1999. Ya le instaló una especie de Constituyente con el Parlamento Comunal, que es el congreso de los colectivos o bandas paramilitares. Ocupa el hemiciclo vacío del Capitolio que correspondía al Senado. Su función: amedrentar a los 112 diputados. Llegado el caso, interferirán el paso y procederán a la agresión verbal y física, que completarán los sujetos de la “esquina caliente” rodeando el edificio. Recordemos a Maduro dirigiendo desde la cúpula del Capitolio el ataque en la calle con cabillas y garrotes contra los diputados de oposición que salían corriendo. Esta vez sólo tendrá que dar la orden en secreto a sus “comuneros” para que adentro le den una “coñacera”, practicando con ellos el “bullying” o acoso parlamentario semejante al escolar que sufren los estudiantes indefensos de sus condiscípulos.

 

 
Como medida previa para la defensa de la Asamblea convendría que los electos atiendan el consejo de los ex presidentes democráticos y acuerden desde ahora quien la presidirá. Debe ser alguien valiente para que no se repita el bochornoso entreguismo de 1999, cuando el presidente de la Cámara de Diputados, que era Capriles, la entregó a Chávez en lugar de enfrentarlo. En la presente circunstancia la cohabitación sería la forma de entreguismo cobarde al “bullying” parlamentario montado.
La mejor defensa es “ir pa’encima”, comenzando por exigir a Maduro su partida de nacimiento y las de sus padres. El país tiene derecho a saber dónde nació Maduro. Y la Asamblea tiene el deber de comprobar si es venezolano por el lugar de nacimiento (jus soli). El país tiene derecho a saber la nacionalidad de los padres de Maduro. Y la Asamblea tiene el deber de comprobar si tiene otra nacionalidad por su filiación (jus sanguini), que lo inhabilitaría para ejercer el cargo. Es inaceptable que seamos el único país del mundo con un presidente vivo sin partida de nacimiento que además esconde a sus padres.

 

 
Al mismo tiempo debe exigírsele a Maduro la presentación del acta de defunción de Chávez para saber dónde, cuándo y de qué murió. ¿Murió en Caracas o en La Habana? Si murió en La Habana, los que simularon la muerte en Caracas, incluyendo a Maduro, están incursos en delito. ¿Murió en diciembre de 2012 o en marzo 2013? Si murió en diciembre, los que simularon su muerte en 2013, incluyendo a Maduro, están incursos en delito. ¿Murió de muerte natural, por mala praxis médica o precipitaron su muerte los cubanos por inconfesable motivación política? En cualquiera de los últimos supuestos, los que simularon el primero, incluyendo a Maduro, están incursos en delito. Agréguese la historia médica para comprobar si Chávez estaba consciente cuando se le atribuyó haber firmado todo cuanto se presentó como firmado por él desde el 8-12-2012 hasta marzo 2013. Si no lo estaba, los que simularon lo contrario, incluyendo a Maduro, están incursos en delito. Es inaceptable que seamos el único país del mundo con un presidente muerto sin acta de defunción, lo cual compromete al sucesor por ser el que se benefició de smuerte.

 

 

No hacer esta investigación sería repetir el entreguismo de 1999. Peor aún: sería colaboracionismo descarado.
P.D. Mi saludo navideño a todos los presos políticos, comenzando por mi amigo Antonio Ledezma. Los que hemos pasado Navidad en la cárcel como presos políticos sabemos cómo se la vive. Y un saludo muy respetuoso a la señora Machado y a las señoras López, Ledezma y Ceballos, porque a ellas se debe haber ganado la opinión pública internacional para la causa democrática. Dios y la Patria las premiarán. @petitdacosta

 

 

jesuspetitdacosta.blogspot.com

Objetivo político del Vaticano en América

Posted on: septiembre 24th, 2015 by Laura Espinoza No Comments

Cuba ha sido visitada por tres papas (Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco) en 17 años (1998-2015). Esto significa que el Vaticano, que une religión y política (es la única Religión-Estado), tiene un plan para América que está ejecutando. Apartando la finalidad religiosa, el objetivo político del plan se evidencia en estos hechos:

 

 

1.- En 1998 el Vaticano había logrado el objetivo político de la desaparición del imperio comunista soviético en los países cristianos de Europa central y oriental, en función del cual había sido electo Papa Juan Pablo II, quien fue escogido, aparte de sus méritos religiosos, por ser un eslavo, porque eran eslavos los pueblos cristianos bajo el comunismo. Todos los papas italianos habían fracasado en esta tarea política.

 

 

Desaparecido el comunismo en la Europa cristiana, el Vaticano dirigió su mirada a la América cristiana. Su objetivo: el fin del comunismo en Cuba. Esto explica la visita de Juan Pablo II, cuando sólo Cuba era comunista y estaba aislada viviendo su pueblo una situación terrible de hambre y escasez que se denominó “período especial”. En tales circunstancias el Papa exclamó: “Que Cuba se abra al mundo y el mundo se abra a Cuba.” Era una exhortación a la apertura político-económica de Cuba que debía corresponderse con el levantamiento del embargo por Estados Unidos.

 

 

2.- No hubo la apertura porque el comunismo se salvó a última hora. En 1999 apareció Chávez regalándole a Cuba la renta petrolera de Venezuela, no sólo para subsistir sino para dominar a América Latina mediante la expansión del comunismo agrupado en una Internacional, el Foro de Sao Paulo. Entonces el Vaticano corrigió su estrategia y decidió repetir la exitosa. Visto que los países cristianos bajo el comunismo son latinoamericanos, eligió papa a un latinoamericano en 2013; vale decir, un conocedor de la idiosincrasia de estos pueblos y la realidad del continente. Así Francisco, no sólo recibe el papado por sus méritos religiosos, sino por considerársele el indicado para la tarea política: la derrota de la Internacional Comunista de América Latina (Foro de Sao Paulo), con el derrumbe de sus gobiernos en los países cristianos. Para lograrlo es fundamental la rendición de Cuba, el Moscú del comunismo latinoamericano, ante las potencias cristianas: Estados Unidos y la Unión Europea. Es lo que está a punto de conseguir.

 

 

Para que no se malogre la operación, el Vaticano cuida de no humillar al que se rinde, sino cortejarlo para que salve la cara. Esto explica la visita del Papa Francisco y su conducta durante la misma.

 

 

Jesús Petit Da Costa

Las dos salidas constitucionales de una situación insostenible

Posted on: marzo 30th, 2015 by Laura Espinoza No Comments

Para la situación del país, que no puede prolongarse más por insostenible, sólo veo, desde mi perspectiva de independiente, dos salidas constitucionales: la renuncia de Maduro o el contragolpe constitucional. La primera tendría por consecuencia el cambio de gobierno, pero mantendría la tiranía cuyo fundamento es la Constitución de facto impuesta por el Golpe de Estado sistemático y continuado que se inició en 1999. Igual a lo que ha pasado con la sucesión de Chávez a Maduro.

 

Su renuncia sería la jugada para salvarse él y a sus compañeros de la prisión e incautación de sus bienes, sólo posible evitando el contragolpe constitucional que pondría fin a la tiranía con la resurrección de la democracia mediante el restablecimiento de la vigencia efectiva de la Constitución de 1961. Si Maduro no renuncia, dará lugar a que entren en acción los que llenen el vacío de liderazgo que padece el país rompiendo con la MUD colaboracionista. Es lo que se deduce de las encuestas y se huele en el ambiente.

 

 

Exigirle la renuncia a Maduro procede debido a su ilegitimidad de origen porque no ha probado haber nacido en el territorio nacional o, en su defecto, de padres venezolanos en el exterior cumpliendo los trámites posteriores, y en todo caso por tener doble nacionalidad como se presume de su filiación materna por lo menos (madre colombiana). Se agrega a lo anterior la inconstitucionalidad de los actos sucesorios, viciados desde el principio por no existir prueba legal del fallecimiento del anterior titular del cargo y de cuándo, donde y de qué murió. Cualquiera en su caso, con un mínimo de sensatez, habría renunciado espontáneamente y en cualquier país serio se lo habrían exigido o lo habrían depuesto por usurpador. Ni él es sensato ni estamos en un país serio porque no hay instituciones que cumplan su rol, por lo cual ocurrirá, si sus propios compañeros no lo hacen renunciar, lo que siempre ha ocurrido en Venezuela: habrá inevitablemente un reventón, en este caso el contragolpe constitucional ordenado por la Constitución de 1961 que sigue vigente, aunque está en suspenso a consecuencia del Golpe de Estado iniciado en 1999 que la declaró inconstitucionalmente derogada.

 

El contragolpe constitucional consistiría en restablecer la vigencia efectiva de la Constitución suspendida. Sería sustituido de inmediato el sistema político instaurado por el Golpe de Estado sistemático y continuado desde 1999. No sólo eso. He aquí lo mejor del Art. 250, precisamente lo que temen los golpistas en el poder: “Serán juzgados según esta misma Constitución y las leyes expedidas en conformidad con ella, los que aparecieren responsables de los hechos señalados en la primera parte del inciso anterior (la derogación por acto de fuerza o por cualquier otro medio distinto al previsto en la Constitución como sucedió en 1999) y así como los principales funcionarios de los gobiernos que se organicen subsecuentemente, si no han contribuido a restablecer el imperio de la Constitución.” Se invertiría la situación actual: todo el alto gobierno iría preso, salvándose únicamente los que colaboren en el restablecimiento de la vigencia efectiva de la Constitución de 1961. Estos pasarían a ser colaboracionistas del gobierno democrático.

Pero lo que les aterra de verdad es perder lo robado ya que la Constitución rehabilitada ordena “la incautación de todo o parte de los bienes de estas mismas personas (los golpistas que nos han gobernado desde 1999) y de quienes se hayan enriquecido ilícitamente al amparo de la usurpación, para resarcir a la República de los perjuicios que se les hayan causado.”

 

Con el fin de asegurarnos de que así sea deberíamos pedirles a todos los gobiernos democráticos del mundo que sigan el ejemplo dado por Estados Unidos: prohibirles la entrada para que no puedan escapar a la justicia de la nueva democracia y congelarle los bienes mientras la República procede a su incautación.

 

 

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@petitdacosta

Resistencia, porque oposición es colaboracionismo

Posted on: enero 14th, 2015 by Lina Romero No Comments

En una democracia existen gobierno y oposición, que se alternan en el poder. Sin alternancia no hay democracia, sino tiranía. En una democracia la oposición accede al poder por la vía electoral, lo cual es posible porque las elecciones son justas: sin ventajismo y sin fraude. Sin elecciones justas no hay democracia. En una tiranía las elecciones son una farsa, por el ventajismo y el fraude. Por ello a la tiranía no se la derrota electoralmente cuando está en juego el poder, como lo demuestra la historia de Venezuela, sino se le pone fin por otro medio: la guerra civil en el siglo XIX y la rebelión cívico-militar en los siglos XX y XXI (23 de enero de 1958 y 11 de abril de 2002). No existe una oposición en la tiranía, ya que oposición implica alternancia.

 

Los que se oponen a la tiranía se organizan en resistencia. Efectivamente “resistencia clandestina” se llamó la que se organizó contra la anterior tiranía, la que creíamos que sería la última. Esa “resistencia clandestina” (porque toda resistencia a una tiranía adopta la forma de organización clandestina) fue la que preparó la rebelión cívico-militar.

 

Tres circunstancias nos diferencian de entonces. La primera, aquella tiranía era ejercida por un gobierno nacionalista. La de ahora es ejercida por un gobierno títere de otro país. La segunda, aquella tiranía era anticomunista, pero sólo de actitud pero sin adoctrinamiento ni fanatismo. La de ahora es comunista, con adoctrinamiento y fanatismo. La última, no hubo partido que se prestara a elecciones fraudulentas. No hubo partido colaboracionista.

 

Estas tres circunstancias asemejan nuestra situación a la Francia ocupada por Alemania. Somos un país ocupado por Cuba, la cual ejerce el gobierno decidiendo la política interior y exterior. Pero la ocupación cubana no se hace con tropas bajo un jefe militar cubano. Se hace poniendo un gobierno títere. Recordemos que la ocupación alemana se acompañó del adoctrinamiento para crear el fanatismo nacional-socialista (nazi).

 

Del mismo modo, la ocupación cubana está acompañada del adoctrinamiento comunista a todos los niveles. Aún más traslada a Venezuela su sistema político, económico y social, del cual es mera copia, lo que nos ha llevado al colapso general. Todo se ha hecho sin obstáculos pero disfrazado de democracia, para consumo externo, contando con la eficaz colaboración de los “colaboracionistas”, que al igual de sus pares franceses inducen a la cobardía y condenan la rebeldía, alegando que nada se puede hacer excepto ocupar los espacios que cede la tiranía. Esta fue la justificación del gobierno de Vichy y de la traición a la patria del Mariscal Petain.

 

Tal como en la Francia ocupada por Alemania, existen aquí tres fuerzas políticas. Cuba representada por los títeres que le sirven. Alrededor suyo, los “colaboracionistas” que le hacen el juego sirviéndoles de comparsa. Estas son las dos fuerzas políticas de la ocupación cubana. La tercera fuerza es la resistencia, a la cual podemos definir como el conjunto de movimientos sociales y políticos que tienen por objetivo la liberación de Venezuela, en su triple sentido: liberarnos de Cuba, del comunismo y de la tiranía.

 

La resistencia francesa nos enseña que, tratándose de un país ocupado, es absolutamente necesaria la alianza cívico-militar. Ante todo, un líder militar que haga el “llamamiento”. Fue el papel de De Gaulle, que siendo militar se diferenció de los traidores. Y al mismo tiempo la resistencia propiamente dicha, organizada y dirigida por civiles. Cuentan los historiadores: “los resistentes fueron hombres y mujeres de todas las edades, aunque a menudo jóvenes, incluso muy jóvenes (adolescentes). En su gran mayoría tenían un oficio y una vida de familia. Había universitarios, maestros, periodistas, ingenieros, curas, obreros, tenderos, artesanos. Sólo una minoría vivía a tiempo completo en una total clandestinidad.” Eran la vanguardia, una minoría que actúa como dinamo del sentimiento popular. La resistencia francesa no tuvo en sus filas siquiera al 2% de la población y le bastó para derrotar a los alemanes. La venezolana en la anterior tiranía, mucho menos y bastó para derrocar al tirano.

 

Pero aclaremos. Mientras la resistencia francesa contra la ocupación alemana fue armada, la resistencia venezolana contra la ocupación cubana no puede serlo. Debe seguir el modelo de la que se hizo contra la anterior tiranía: usar todos los medios de lucha pacíficos, sobre todo la calle, aprovechando todas las oportunidades que se presenten hasta alcanzar el objetivo. Es mi consejo. @PetitDaCosta

 

Fuente: http://jesuspetitdacosta.blogspot.com

¿Quien puede tener interés en matar a Maduro?

Posted on: junio 7th, 2014 by lina No Comments

(Dedicado al Primer Yerno del régimen)

 

Fue Dumas el que acuñó la frase: “cherchez la femme” (busquen a la mujer), que partía de la hipótesis de que el motivo del crimen siempre era una mujer. Luego se la ha usado para indicar por donde debe comenzar la investigación policial: a quién beneficia?

 

En el magnicidio del Primer Vice-Presidente de la República, Juancho Gómez, su hermano el Presidente Juan Vicente Gómez, aplicó esta regla de investigación criminal. ¿A quién beneficiaba el crimen? Desde luego, al Segundo Vice-Presidente, que era su hijo Jos Vicebn﷽﷽﷽aba el crimen? Desde luego, al Segundo Vice-Presidente, que era su hijo José Vicente, que así ascendía a primero en la sucesión. Entonces el padre malicioso, convencido de detrás del hijo estaba la madre intrigante, cortó por lo sano: eliminó la Vicepresidencia y desterró al hijo a Francia, donde vivió hasta su muerte.

 

Desde entonces no hubo Vice-Presidente con derecho a la sucesión. Ocurrió, sin embargo, que en 1948 se instaló un gobierno colegiado llamado Junta Militar de Gobierno. Lo presidía el coronel Carlos Delgado Chalbaud, que estaba acompañado por los oficiales del mismo grado: Marcos Pérez Jiménez y Luis Felipe Llovera Páez, en la práctica primero y segundo vicepresidentes. Sucedió que a Delgado lo asesinaron, después de haberlo secuestrado, cuando estaba próximo a cumplir dos años en la presidencia. Todo el mundo le imputó el magnicidio a Pérez Jiménez, que era el beneficiario. Los hechos posteriores confirmaron la regla.

 

Por estos antecedentes los redactores de la Constitución de 1961 descartaron restablecer la Vice-presidencia de la República. Optaron por crear la incertidumbre sobre la sucesión con este mecanismo: se encargaba por treinta días el presidente del Congreso, que era electo cada año, hasta que el mismo Congreso elegía al sucesor, por lo cual ningún magnicida tenía asegurado el cargo de presidente.

 

Llegó al poder el difunto y, por su incultura política (demostró ser ignorante en historia de Venezuela), cayó en la trampa de restablecer la vice-presidencia. Creyó que, siendo de su libre nombramiento y remoción, lo podía sacar del juego antes de que le hiciera daño. Se ve que tampoco había leído las tragedias griegas ni a Shakespeare, en las cuales el magnicida es siempre el príncipe heredero, su amado hijo, que se le mete por los ojos al padre y lo ciega, mientras los complotados hacen el trabajo.

 

¿A quién benefició la muerte del difunto? Al príncipe heredero del padre amado. ¿Fue una muerte natural? Eso dicen los complotados. ¿Alguien ha visto la historia médica y el informe del facultativo junto con el acta de defunción? Nadie. ¿Quién puede tener interés en ocultarlos? Sólo un magnicida. Nadie más. ¿Es que hubo magnicidio? No lo sabemos, pero toda muerte sospechosa de un presidente huele a magnicidio.

 

Tiene año y medio el misterio de la muerte del difunto, a quien vimos por última vez el 08-12-12. Nunca más habló ni se apareció. Sin desvelarse este misterio, viene ahora el sucesor y denuncia que lo quieren matar. Suponiendo que sea cierto, quién puede tener interés en matar a Maduro? Si Maduro muere, Leopoldo López no asume la presidencia. Tampoco María Corina Machado. Ni Diego Arria. Ninguno de ellos. La historia y la literatura enseñan que, tratándose de magnicidio, el primer sospechoso es el vice-presidente Arreaza, que además está en el secreto de la muerte de su suegro. Y más sospechoso aún, se hizo de la vicepresidencia con el cuento de que lo había dispuesto el suegro, cuando posiblemente estaba ya muerto. Este cuento de Arreaza lo hace sospechoso a la enésima potencia, si agregamos que vive como presidente en la residencia presidencial, formando parte de la familia real cuyos miembros, sobre todo las mujeres, no esconden su ambición y su decisión de ejercer el poder por derecho hereditario.

 

Si matan a Maduro, quién lo sucedería? El vice Arreaza, que debe convocar a elecciones. Y quién sería, con su apoyo, el candidato natural del gobierno? Su mujer o su cuñada, herederas legítimas de su padre. Faltaría más que a Arreaza lo crecieran las agallas queriendo ser el sucesor. Lo liquidaría su familia por afinidad.

 

Pero para matar a Maduro los complotados necesitarían el consentimiento de los Castro, que son sus dueños. Sus anillos de seguridad son todos cubanos. Por este motivo habría que ir a Cuba a convencer a los Castro. Esto no lo pueden hacer Arria, María Corina y López, porque no tienen acceso a los Castro que, por el contrario, los aborrecen.

 

 

Entonces: cherchez la femme. Por aquí debe comenzar la investigación.

 
REFLEXIONES 54 04-06-14

 

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