El niño Cristian José Polo Torrealba, de un año, murió a golpes tras ser violado por su padrastro, lo que conmocionó a los vecinos del barrio La Pedrera, en Maracaibo, por la brutalidad del suceso y por el hecho de que, al parecer, la madre consentía tales abusos.

Familiares del niño, quienes esperaban a las afueras de la morgue de la Universidad del Zulia, declararon que lo habían llevado hace tres días a la emergencia del Hospital Materno Infantil Cuatricentenario y, al ser revisado por los médicos que lo recibieron, alertaron a las autoridades, según publicó el diario regional La Verdaden su página web.

El cuerpo del niño presentó hematomas, irritación en los genitales y una severa infección en la boca, por lo que los galenos llamaron a los detectives del Eje de Homicidios de la Policía Científica quienes detuvieron a Jesús Ruíz Torres, de 21 años y padrastro del niño y a su pareja, la madre del niño, quien presuntamente permitía que el sujeto violara al niño. 

La autopsia reveló que sufría de los abusos desde hace días, también tenía golpes y rasguños. La madre del niño fue liberada luego del interrogatorio.

El pequeño vivía con la pareja en la calle 85 del barrio La Padrera. Los vecinos se percataron de que la madre del menor salió y, al rato, el sujeto se había asomado a la ventana de la vivienda, como cerciorándose de que se había marchado. Luego escucharon los gritos y el llanto del bebé.

Los vecinos pensaron que se debía a la ausencia de la madre, pero estaban lejos de siquiera sospechar lo que realmente ocurría. Media hora después regresó la mujer y corrió con el niño en brazos hasta el hospital; estaba inconsciente, pálido y no reaccionaba a ningún estímulo. Los médicos le informaron que había fallecido antes de llegar.

Familiares del niño aseguraron que el hombre tenía problemas de drogadicción y que la madre también consumía estupefacientes, por lo que descuidaba al niño y no le daba de comer. Vecinos están reuniendo dinero para costear los gastos del funeral.

CD