Vestalia Sampedro: Gobierno errático impide que veamos luz al final del túnel
octubre 8, 2015 4:37 pm

La medida tomada por Makro de dejar de vender a particulares en la gran Caracas, para direccionar sus productos a las bodegas populares, promovida y avalada por el alto gobierno, no es más que una señal de la incapacidad del gobierno para resolver la crisis, que tiene como epicentro no la falta de distribución como alegan, sino la falta de producción y disminución de importaciones, con lo cual simplemente desaparecieron los productos, altamente demandados por una población desesperada que teme quedarse sin alimentos.

 
Constituye una restricción a las libertades económicas que demuestran la gravedad de inventarios. El mismo Estado con todo el poder económico acumulado, la cacareada soberanía alimentaria, disposición de una supuesta red de producción y distribución, no puede garantizar el suministro y en consecuencia presiona al sector privado para que le garantice la llegada de lo que hay, a su base electoral, descontenta y harta del sufrimiento a que ha sido sometido por sus propios gobernantes.

 
Esto no puede asumirse como lo lógico y normal en una sociedad libre de economía mixta, esto solo es una foto de la gravedad del asunto, sobre lo cual no dejamos de llamar la atención, la  falta de inoperancia de quienes gobiernan muy a pesar de todo el poder y control acumulados. Un gobierno serio, sensibilizado ante la realidad de sus conciudadanos, estaría dando la cara al país informando la verdad de la situación para que todos sepamos a qué atenernos y en consecuencia actuar, por el contrario deja que el desorden avance y cada cual ingeniándosela para sobrevivir a todo esto que nos ocurre.

 
El pueblo debe mantener el foco, el problema es el modelo económico impuesto, no sirvió, no funcionó y quienes están en el poder, no trabajan para corregir, para cambiar por tanto no pueden ser objeto de nuestra confianza, porque no buscan nuestro bien, sino la mera permanencia en el poder, en eso gastan sus recursos, ideas y tiempo, pero no para construir soluciones aplicables a nuestra realidad.

 

 

Nota de prensa