Ángel Aristimuño, presidente de Un Nuevo Tiempo (UNT) en Monagas denunció que el régimen utiliza la radicalización de la cuarenta por el Covid-19 para tratar de ocultar tanto la grave crisis económica, política y social, cómo la grave crisis de gasolina que vive todo el territorio de la entidad monaguense.

«Después de pasar una semana de radicalización obligados y secuestrados por el régimen, sin tener ningún tipo de movilidad de una parroquia a otra, con la excusa de ahorrar la poca gasolina que puede existir en nuestro estado. Esta semana de flexibilización los monaguenses tuvieron que amanecer de 24 a 48 horas para tratar de suministrar combustibles, y mucho de ellos no logran hacerlo», señaló.

El dirigente regional destacó que «en cada esquina, cada estación de servicio del estado Monagas se están desarrollando protestas, en las que han habido detenidos por exigir sus derechos y reclamar al régimen lo que está ocurriendo».

«El régimen condena a los ciudadanos a hacer largas colas y amenaza a quienes las hagan con ponerle sanciones de 10 y 15 unidades tributarias. La realidad es que los 12 municipios de la entidad no tienen cómo suministrar gasolina, situación que causa daño a los productores y empresarios, quienes son amenazados y están pasando hambre», enfatizó.

Aristimuño recordó que el estado Monagas, que fue uno de los primeros productores de petróleo, hoy atraviesa esta tragedia liderada por un régimen que no le importa el ciudadano y no le importa el pueblo.

Finalmente, hizo un llamado en nombre de todas la fuerzas vivas del país a respaldar un Gobierno de Emergencia Nacional que permita traer gasolina para el pueblo y solventar la crisis generalizada que aqueja a los venezolanos.