Tío de embarazada asesinada en atraco: “Ella quería estudiar para PNB”
septiembre 23, 2014 9:24 am

Conmoción. Ésta es la palabra que se acerca a definir el sentimiento que se vivía en la calle 187B, del barrio La Polar. En una de sus viviendas, velaban, ayer, el cuerpo de Yoselín del Valle Polanco Soler, de 23 años, asesinada en el barrio 24 de julio el pasado sábado. Yoselín tenía dos meses de embarazo.

 

“Ella quería ingresar a la Policía Nacional Bolivariana (PNB)”, dijo muy consternado su tío, José Polanco, en la acera de la calle de tierra donde habló. Polanco, demostraba estar dolido y a la vez molesto. “La delincuencia nos está matando”.

 

“El Gobierno tiene que ponerle freno a las motos. En ellas nos están asesinando. Aquí tenemos que vivir como en un toque de queda, porque ya a las 7:00 pm no se puede estar en la calle. Hasta las universidades van a tener que poner otros horarios”, dijo.

 

Dentro, en el ataúd, reposaba el cuerpo. Varias coronas de flores emitían su aroma por la casa. Vecinos y conocidos acompañaban a la familia en el momento de dolor.

 

“Era la menor de cinco hermanas, la menor de las hembras. Imagínate, toda la familia está destrozada”, concluyó Polanco.

A un lado de la casa, Wilson Jesús Urdaneta esperaba. “Yo estaba en la calle, tomándome unas cervezas. Llegué a llevarle la cena y ella estaba conversando con mi hermana y mi cuñado. Estuve poco tiempo. Volví a salir y me llamaron a los cinco minutos diciéndome que había habido una tragedia. Cuando regresé, la encontré muerta en el piso”, dijo, casi en un susurro.

 

Los delincuentes, que iban en una moto, llegaron a la casa, donde se encontraba Yoselín, con una cuñada y el esposo de ésta, a atracarlos. “Solo se llevaron el bolso del cuñado, y la gorra, porque ellas dejaron los teléfonos dentro de la casa. Pero cuando se iban, el cuñado golpeó a uno de los malandros con una silla. Eso desencadenó todo”, explicó el tío.

 

“Cuando ellos llegaron a robar no tenían pistola, sino un pico de botella. Después que mi cuñado les pega con la silla, se van, pero regresan con una pistola. Apenas pararon la moto, mi hermana los vio y comenzaron a correr hacia dentro de la casa, pero Yoselín se ca yó y el tiro le dio en la cabeza”, refirió Urdaneta, ahondando en detalles. No dio tiempo llevarla a ningún hospital. Murió en el sitio. Eran las 9:00 pm.

 

“Le entró una bala por detrás de la oreja izquierda y le salió por la frente”, relató el tío.

 

Yoselín tenía una niña de cinco años, y estaba viviendo con Wilson desde hacía cuatro años. La casa donde ocurrió todo era de la mamá de Wilson Urdaneta, y allí vivían hacía aproximadamente un año.

 

“Todo se ha vuelto peligroso, el riesgo está en todas partes”, relató Polanco. El sepelio se realizó, ayer, a la una de la tarde, en el cementerio Municipal de San Francisco.

 

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