No pudo tener mejor cierre la jornada festiva del día de Martin Luther King de la NBA con la exhibición encestadora que el escolta Klay Thompson dio en el Staples Center, de Los Angeles, donde los actuales campeones de liga, los Warriors de Golden State vencieron por paliza de 111-130 a los diezmados Lakers.

Thompson anotó 44 puntos, incluidos 10 triples de 11 intentos, y acabó el partido con 17 canastas de 20 tiros de campo, siendo una auténtica fuerza ofensiva que nunca pudieron frenar los jugadores de los Lakers.

Thompson estableció una nueva marca en la historia de la NBA al anotar los primeros 10 tiros de triple que hizo y ayudó a los Warriors a conseguir la octava victoria consecutiva global y el séptimo fuera de su campo, las mejores en lo que va de temporada.

El escolta titular de los Warriors anotó 23 puntos en el tercer periodo al acertar los siete triples que intentó que permitió a los Warriors ponerse con ventaja parcial de 36 tantos que dejó el partido decidido.

El joven pívot croata Ivica Zubac se encargó de liderar el ataque de los Lakers al aportar 18 puntos como reserva tras anotar 7 de 8 tiros de campo y 4 de 4 desde la línea de personal, además de capturar cuatro rebotes y puso un tapón.

Los Lakers siguieron sin sus jugadores estelares como el alero LeBron James, y los bases Lonzo Ball y Rajon Rondo.

El equipo angelino tiene marca perdedora de 5-9 en los 14 partidos que han disputado desde que está de baja James, con un tirón muscular en la ingle izquierdo, que se generó el pasado Día de Navidad en el duelo que protagonizaron frente a los Warriors, en el Oracle Arena de Oakland, y que ganaron por 101-127.

El entrenador de los Lakers, Luke Walton, dijo que esperaba que James pudiese estar de vuelta con el equipo esta semana cuando el equipo dispute cinco partidos consecutivos en el Staples Center.

EFE