Testimonio: “Estamos inseguros incluso en la iglesia”
enero 30, 2015 9:20 am

La inquietud del padre Carlos Guzmán, párroco de la iglesia Nuestra señora de Fátima, del Centro Cívico de Puerto Ordaz, es la descomposición social de la que es presa toda Venezuela, cuando hasta las iglesias son blanco frecuente del hampa.

 

 

“Estamos inseguros, incluso en la iglesia. Es algo que en ninguna sociedad debería darse” advirtió vía telefónica a Correo del Caroní. El sacerdote Guzmán fue uno de los 50 asaltados durante la reunión de la pastoral de Ciudad Guayana, cuando este martes por la noche, cuatro sujetos armados ingresaron al teatro de la iglesia Virgen del Valle, localizada en la urbanización Mendoza de Puerto Ordaz, donde estaban reunidos, y despojaron a los asistentes de sus teléfonos celulares y dos laptops.

 

 

“Eran muchachos jóvenes, se notaba que no eran avezados en el delito porque no se robaron cosas de valor que estaban ahí como el video beam o el resto de las laptops, y nos pidieron el favor de que les diéramos las cosas” informó, aclarando que no hubo maltratos ni heridos.

 

 

Robos frecuentes

 
Así como la iglesia Virgen del Valle ha sido asaltada varias veces en años anteriores y en lo que va de 2015 contabiliza ocho robos, la parroquia Fátima también ha corrido con suerte parecida. Fue objeto de atracos cinco veces en 2014 y el nuevo año se estrenó con el asalto de la semana pasada, cuando un sujeto rompió una de las ventanas de la iglesia y logró sustraer uno de los monitores de audio.

 

 

El sacerdote indicó que todas las parroquias del municipio Caroní han sido objeto de robo, menos la iglesia Nuestra Señora de Coromoto, en Los Olivos.

 

 

Como medidas particulares, Guzmán enfatizó que “para una iglesia es muy costoso contratar vigilancia privada, supone un costo fuerte, porque ya mantener la infraestructura, jardinería, y esas cosas, cuesta trabajo”.

 

 

Para Yelili de Rojas, colaboradora de la iglesia Nuestra Señora de Fátima durante los últimos 22 años, la situación “es muy triste. En la misa de las 6:00 (de la tarde) puedes contar la gente con los dedos de las manos, y es por la inseguridad. Antes no era así”.

 

 

La feligresa le pide al Estado “que nos dé protección, como era antes. Este es un país católico y antes la iglesia era respetada. El Gobierno tiene que hacer algo, parece que los motorizados (de la policía) están de adorno”.

 

 

El sacerdote Guzmán recordó que el 31 de diciembre de 2014 “en la iglesia San Buenaventura(de El Roble, San Félix) robaron al padre Mathías Camuñas en plena misa”, empero, en la parroquia afectada no dieron mayores detalles del caso ya que el párroco no se encontraba en el lugar.

 

 

 

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