El Senado brasileño avanza en la aprobación de un proyecto de ley de Internet que garantiza la privacidad de los usuarios, en la víspera de una conferencia mundial sobre la gobernanza de la red en Sao Paulo.
Considerado como una suerte de «Constitución» para Internet que establece garantías, derechos y deberes de internautas, empresas y gobiernos, y que ganó impulso tras las denuncias de espionaje por parte de Estados Unidos, el proyecto de ley, impulsado por el gobierno, fue aprobado el martes por dos comisiones del Senado: Ciencia y Tecnología; y Constitución y Justicia, mencionó AFP.
El objetivo del gobierno es que la ley, aprobada en marzo por la Cámara de Diputados, sea sancionada por el plenario del Senado, coincidiendo con el inicio este miércoles de la conferencia internacional NETmundial.
«El marco civil [de internet, nombre de la legislación] es una herramienta de la libertad de expresión, de la privacidad del individuo y del respeto a los derechos humanos… Muestra el protagonismo de Brasil en un tema debatido en el mundo: seguridad, privacidad y pluralidad en la red», afirmó la presidenta Dilma Rousseff cuando el proyecto de ley fue aprobado en Diputados.
Rousseff, que ha denunciado el espionaje y control estadounidense sobre internet, impulsa la conferencia NETmundial luego de la conmoción generada por documentos filtrados por el exanalista de inteligencia estadounidense Edward Snowden.
Los documentos publicados señalan que la mandataria, sus asesores, la empresa estatal Petrobras y millones de brasileños fueron espiados por la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA).
El proyecto de ley tiene un fuerte apoyo de los Internautas.
Sus principales pilares son las garantías a la libertad de expresión y la protección de la privacidad del usuario ante cualquier violación y uso indebido de sus datos. También defiende la llamada «neutralidad de la red», objetada por grandes empresas de telecomunicaciones y que impide que proveedores cambien la velocidad de la conexión o cobren precios distintos según el contenido al que accede el usuario (más caros para vídeo, o para sitios de otras empresas, por ejemplo).
Para lograr la aprobación del proyecto de ley, que lleva meses en debate, el gobierno renunció a exigir a empresas como Google o Facebook que almacenen información de usuarios en centros de datos brasileños.
Fuente: eluniversal
