La jefa de estrategia global de materias primas de la firma RBC Capital Markets, Helima Croft, considera que Venezuela es “claramente un peligro para el mercado petrolero global” debido a la drástica caída de su producción petrolera.
“Continuamos sosteniendo que, dado el apretado mercado petrolero de 2018, cualquier interrupción del suministro tendría un impacto desmesurado en comparación con los últimos años cuando el mercado estaba inundado de crudo”, dijo la analista citada por CNBC.
“El peligro claro y presente a tener en cuenta es Venezuela, que podría decirse que ha progresado más allá de la etapa de riesgo dado que la producción está en caída libre”, agregó.
Después de años de fuertes pérdidas de producción, el bombeo está en mínimos de casi tres décadas. En diciembre, Caracas logró bombear 1,7 millones de barriles por día, según S & P Global Platts.
Los analistas esperan que las pérdidas de producción continúen deteriorándose durante 2018, con RBC Capital Markets proyectando una caída de al menos 700.000 a 800.000 barriles por día este año.
“En este contexto sombrío, las elecciones de abril programadas recientemente podrían ser el catalizador de más contiendas civiles y sanciones económicas que erosionarían aún más la producción”, dijo Croft.
Las sanciones petroleras son vistas como una de las pocas opciones que el presidente Donald Trump tiene para dañar realmente al gobierno de Maduro. Mientras tanto, el secretario de Estado Rex Tillerson dijo que el gobierno de EEUU también consideraría el impacto de las sanciones petroleras sobre los ciudadanos venezolanos.
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