Desde el inicio de tu primer periodo, hasta tu más reciente orgasmo, seguro has tenido una pregunta en mente todo este tiempo: ¿qué diablos sucede ahí abajo? Y justo cuando crees conocer bien a tu zona íntima, la verdad es que siempre termina sorprendiéndote, especialmente con problemas de salud
Vaginitis
Lo malo: ¿Mucho fluido, comezón y ardor? Posiblemente tengas vaginitis, una inflamación vaginal debido a una irritación o infección. El culpable más común es la infección por cándida, causada por una sobrepoblación de hongos o, en caso de vaginitis bacteriana, una sobrepoblación de bacterias.
Cómo se siente: Tendrás irritación y flujo gris blanquecino con mal olor, además de consistencia de queso cottage. También presentarás dolor en el sexo y tal vez sangrado vaginal o manchas.
Solución: Si crees que la infección es culpa de un medicamento, consúltalo con tu médico. El hongo y la bacteria suelen confundirse, pero tienen remedios diferentes. Una infección de hongos se trata con medicamentos antihongos, mientras que la bacteria se ataca con antibióticos.
Resequedad
Lo malo: Los niveles bajos de estrógeno son los primeros sospechosos en mujeres mayores de 35 años, pues suelen decaer durante la perimenopausia, así como durante la lactancia.
Cómo se siente: Presenta comezón vaginal, dolor y, a veces, dolor y sangrado durante el sexo.
Solución: Primero debes comprarte un humectante vaginal, así como un lubricante de agua para tener relaciones. Definitivamente no tendrás ganas de tener sexo, pero en realidad es bueno para la resequedad, pues la circulación de la sangre le brinda elasticidad al tejido.
Endometriosis
Lo malo: Este desorden ocurre cuando el tejido que normalmente se forma en el revestimiento del útero (el endometrio), aparece fuera del útero, usualmente en los ovarios, vejiga o algún otro lugar de la pelvis. No se sabe exactamente la causa, pero tiene que ver con los genes y estilo de vida.
Cómo se siente: Se presenta un dolor severo durante el periodo menstrual, así como al tener relaciones o ir al baño. Se estima que una tercera parte de la población femenina vive con endometriosis y también experimenta infertilidad.
Solución: Si tu ginecólogo cree que es endometriosis, te recetará pastillas anticonceptivas para alentar el crecimiento del tejido endometrial. Pero si el dolor persiste, podrías necesitar una laparoscopia, un pequeño procedimiento en el que se retira parte del tejido.
emedemujer
Por Confirmado: MariGonz
