Magbis Manuel Mendoza Salas (29), estaba reunido con su hermano y dos amigos en su residencia en la carrera 14 entre calles 7 y 8 del barrio Santos Luzardo, al norte de la ciudad. A las 2:30 de la madrugada de ayer, decidieron salir a comer en la calle, en lo que salen, pasan dos sujetos en una moto, ellos dijeron: «vamos a matarlos”.

Estás palabras hicieron que los jóvenes se devolvieran y se metieran a la casa, pero la moto desapareció. Mendoza Salas salió junto a otro amigo para asomarse en la esquina y ver que todo estuviera tranquilo, pero no contaron con que los motorizados estaban dando la vuelta.

Ellos fueron a correr, pero las balas fueron más rápidas. El amigo fue alcanzado por un proyectil en su pierna izquierda, mientras Mendoza Salas le dieron en la mano y en el cuello. El joven se desplomó en la acera y los motorizados escaparon.

Rápidamente auxiliaron al muchacho, a quien trasladaron hasta el Seguro Social de Barrio Unión. Si bien iba inconsciente, al estar en el centro asistencial despertó; miró a madre y hermano y les pidió que le quitarán todas sus pertenencias, luego de estas palabras falleció.

 
Según comentaron los familiares, Mendoza Salas no tenía enemigo alguno, era un muchacho trabajador y que no le gustaba casi salir, porque se cuidaba mucho de los peligros de la calle. Creen que la persona que lo asesinaron, simplemente dispararon por divertirse.

La víctima fatal deja huérfano de padre a una niña de 6 años, tuvo aspiraciones de ingresar al Cicpc, pero no lo logró, incluso tiene familiares funcionarios. Era el mayor de cinco hermanos y tenía nueve años trabajando como obrero en la Kraft.

Esperan que autoridades hagan justicia y puedan atrapar a los asesinos.

Los seres queridos de Mendoza Salas, indicaron que además la zona es bastante sola y tiene poca iluminación, situación que se presta para que se cometan varios hechos delictivos, sumado a ello no existe patrullaje alguno por la zona.

Fuente: El Impulso