Una mala semana para el madurismo
junio 25, 2016 7:29 am

 

El madurismo, proyecto político venido al mundo básicamente para enterrar al chavismo, no tuvo una muy buena racha esta semana. La verdad no la he tenido desde que llegó al poder, pero lo de estos últimos días ha sido más que trágico, sobre todo porque la golpeada élite política que nos desgobierna está acostumbrada a imponerse.

 

 

 

En todos lados recibieron más palo que gata ladrona y los días por venir no parecen ser diferentes. Les queda solo la propaganda, que sin éxito trata de convertir sendas derrotas en victorias, pero que lejos de generar algún grado de cohesión y credibilidad, generan carcajadas, como las provocadas por nuestra canciller, Delcy Rodríguez, en la Organización de Estados Americanos.

 

 

 

La otrora invicta diplomacia petrolera, recibió luego de unos largos diecisiete años de hegemonía y chantaje en la región, una contundente lección. La región ha cambiado y ya las patanerías no son bien vistas.  Se acabaron los dólares y ahora el chantaje es poco efectivo. Como dicen algunos, en diplomacia no hay aliados incondicionales, hay intereses y hoy la destruida Venezuela no tiene mucho que ofrecer para asegurarse apoyos.

 

 

 

Los aplausos fueron suplantados por burlas, la impresentable señora que nos fue a representar en Washington generó el repudio de las delegaciones presentes en la OEA, que no solo la veían como atorrante, sino con un desconocimiento absoluto de las normas de debate y de la organización. Lamentable que con tanta gente preparada en el campo de las relaciones internacionales, manden a estos “representantes” que no se representan ni ellos mismos

 

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A lo interno no se fueron lisos, el proceso de validación para el referéndum revocatorio, etapa que demás está decir es ilegal y anticonstitucional, se convirtió en una verdadera epopeya histórica para los venezolanos. La cantidad de obstáculos que tuvieron que superar los firmantes fueron asombrosos y cuando hablamos de obstáculos lo decimos de manera literal, porque hasta árboles tumbaron para evitar el objetivo final: que se cumpliera la meta de 1% en todos los estados.

 

 

 

Pero la meta no solo se cumplió, fue superada, lo que le da no solo un carácter heroico a la gesta, sino que impulsa con fuerza la salida democrática de Nicolás Maduro del poder y no porque ellos sean demócratas, sino porque el venezolano es por naturaleza pacifico y se aleja de una confrontación violenta entre hermanos.

 

 

Queda esperar que otra cosa se inventarán, sabemos están en las instituciones para boicotear la paz del país, pero sus provocaciones no pasarán de ser eso, porque para provocar se necesita pueblo que se enfrente contra pueblo y el madurismo hace mucho lo perdió.

 

 

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