Por qué critico la estrategia electoral de la MUD
mayo 5, 2015 9:57 am

Aunque el voto es el instrumento ideal de la democracia, debe realizarse con transparencia y equidad. Cuando eso no existe hay que exigirlo con todos los hierros, no con tímidos manifiestos o mostrando “preocupación”. Esto que les muestro de seguidas ilustra por qué estoy enfrentado a la estrategia blandengue de la MUD en el campo electoral.

 

Un documento elaborado por Roberto Picón, de la Universidad Católica “Andrés Bello”, quien parece liderar el tema para la MUD revela la inmensa brecha que existe entre la claridad con la cual esta organización ve el desastroso sistema electoral venezolano y lo que está haciendo para “resolverlo”. Esta brecha, a su vez, explica la raíz del descontento que ha hecho presa de millones de venezolanos en torno a la actuación de nuestra oposición organizada.

 

Picón comienza diciendo:

 

• El Directorio del CNE no es independiente y no representanta la pluralidad política del país, violando el artículo 296 de la CRBV

 

• Es un hecho público y notorio que dos de las rectoras estaban inscritas en el Psuv antes de asumir su cargo, y que 4 de los 5 miembros han manifestado públicamente su apoyo a la “revolución bolivariana”

 

• Este desequilibrio se manifiesta en múltiples decisiones del directorio que se deciden por un margen de 4 a 1, favoreciendo los intereses del oficialismo en contra de la opinión de -al menos- la mitad del electorado.

 

Continúa diciendo:

 

• A nivel nacional, en 2010 el Psuv superó a la MUD por solo 1% (48% a 47%), sin embargo logró 49% más diputados (97 a 65) ante la AN.

 

La enumeración de lacras electorales chavistas hecha por Picón continúa implacable:

 

• Los recursos públicos son groseramente usados para favorecer a los candidatos del Psuv

 

• Propaganda “institucional” que se confunde con la propaganda electoral (Chávez Corazón de mi patria, Día de la Lealtad a Chávez el 8 de diciembre 2013)

• Incremento del gasto público y endeudamiento con fines clientelares

 

• Uso abusivo de las cadenas y del Sistema Nacional de Medios para transmitir mensajes del presidente en Campaña (a favor de sí mismo o de candidatos del Psuv), sin que los candidatos de la oposición tengan acceso a espacios similares

 

• Uso de edificios públicos para el despliegue de propaganda

 

• Presión a los empleados públicos para hacer aportes económicos a las campañas del Psuv y para participar en actos de campaña electoral

 

• Uso de recursos públicos y funcionarios en campaña electoral lo que viola la CRBV y la Ley Anticorrupción

 

• Dakazo.

 

Picón menciona, además, lo siguiente:

 

• El presidente Maduro aseguró que conocía la identidad de 900.000 electores que no votaron por él en las elecciones del 14 de abril, contribuyendo a crear desconfianza en el voto.

 

Sobre el proceso de identificación, Picón dice lo siguiente:

 

• Desde el 2003 el proceso de cedulación sufrió cambios importantes que permitieron la incorporación de millones de personas indocumentadas al RE con muy pocos controles

 

• La tecnología de Sistema de Identificación en Venezuela es provista por la empresa Cubana Albet.

 

En materia de observación electoral, Picón dice lo siguiente:

 

• Desde hace unos años el CNE eliminó la figura de los observadores internacionales y en sustitución designó los llamados “acompañantes internacionales” los cuales circunscriben la observación al día del acto de votación y no gozan de libertad suficiente para “observar” el proceso en todas sus fases con autonomía incluyendo las auditorías para poder presentar conclusiones y recomendaciones al ente electoral y al pueblo venezolano.

 

• Por otra parte los observadores nacionales están fuertemente limitados por un reglamento de observación que les prohíbe dar alguna declaración sin que la misma haya sido previamente aprobada por el CNE.

 

En base a todas estas observaciones Picón hace una serie de propuestas procedimentales, las cuales no sabemos si han sido o no presentadas al régimen que nos gobierna. Después de un análisis tan aplastante del desastre electoral venezolano, después que demuestra como el sistema está viciado de raíz y que las condiciones para el voto son deplorables e inaceptables, después que revela cómo el régimen abusa de su poder para torcer la voluntad popular, entonces Picón termina diciendo:

 

Si esto no se compone:

 

• Las condiciones electorales dejan mucho que desear, sin embargo los venezolanos votan masivamente. Es un voto valiente y con riesgos

 

• Debe preservarse la voluntad del pueblo de mejorar su situación personal y la de la sociedad por la vía electoral

 

• Nuestra responsabilidad es que estos temas se conozcan y se concreten acciones para que las autoridades electorales respondan a todo el país

 

• Una avalancha de votos arrasa con las condiciones electorales más adversas; pero esa avalancha no vendrá si los electores sienten que no hay quien luche por sus derechos

 

• Esta lucha debe ser práctica e inteligente, concentrándose en lo fundamental.

 

Aquí es que yo estoy en profundo desacuerdo con la MUD. Si el diagnóstico es el que nos ha hecho Picón, aquí no hay más vía que la calle, la protesta abierta. Es imposible seguir asistiendo mansamente al evento electoral en estos términos tan trágicamente asimétricos. Y eso no es lo peor. Lo peor es que cuando se asiste y tenemos la certeza de que nos han hecho fraude, entonces metemos el rabo entre las piernas y nos quedamos callados y vamos a dialogar a Miraflores. ¡No y mil veces no! Esto no debe ser (aunque sí puede ser porque está siendo).

 

Este documento de Roberto Picón, excelente en el diagnóstico, mocho en la receta, es la mejor prueba de que los venezolanos que desean ir a la calle a protestar, incluyendo una huelga general indefinida, no deben ser definidos por otros compatriotas como “radicales” o “revoltosos” o “guarimberos”, haciéndole el juego al régimen. Son ciudadanos quienes ejercen su derecho y su deber constitucional de exigir honestidad, no suplicarla, en los actos del régimen.

 

El régimen está integrado por una pandilla de ladrones e ineptos con quienes la oposición “no radical” desea dialogar. Yo creo que dialogar equivale a oxigenar al régimen.

 

Por eso, le digo a la MUD, como cantaba Héctor Cabrera: “Estas son las cosas que me alejan de ti”.

 

Gustavo Coronel