Delcy y las cuentas sospechosas
marzo 21, 2015 3:43 am

La canciller venezolana, Delcy Rodríguez, denunció que hay cuentas bancarias «diplomáticas» en Estados Unidos que ya fueron bloqueadas. «Tenemos prueba de ello y tenemos comunicaciones de bancos que nuestras cuentas fueron bloqueadas en el marco de las sanciones impuestas por el Gobierno de Estados Unidos». No especificó a cuáles cuentas o a qué se refiere con «cuentas diplomáticas».

 

Su intervención en la OEA muestra, sin duda, la preocupación del Gobierno por los escándalos financieros que se están produciendo en España, Andorra, Suiza, República Dominicana y en Estados Unidos por intervenciones bancarias por parte de autoridades financieras de los respectivos países en donde mil millonarios flujos de dólares provenientes de Venezuela están bajo investigación, bajo sospecha de lavado de dinero producto de altas comisiones, contratos con sobreprecio y corrupción.

 

En relación al Decreto de Barack Obama para imponer sanciones a funcionarios incursos en «violaciones a los derechos humanos», es otra historia.

Como lo explicó en sus escritos la abogada constitucionalista Thays Peñalver, no se trata de acciones «internacionales o injerencistas», se trata de «sanciones administrativas, no son judiciales y están referidas a personas designadas». En este caso son siete altos funcionarios del gobierno venezolano, por ahora.

 

Y como detalló la subsecretaria de Estado para el Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson, las sanciones estadounidenses van en contra de funcionarios venezolanos presuntamente vinculados a violaciones de derechos humanos y actos de corrupción. «Simplemente queremos prevenir a individuos, quienes creemos han abusado de los DDHH de venezolanos, que viajen o inviertan en EEUU».

 

¿Tienen estos funcionarios cuentas en EEUU? ¿Si es así, esas cuentas no tienen fondos sospechosos? Eso aún no lo han aclarado ni siquiera los afectados por el decreto.

 

Sobre el asunto de congelar cuentas bancarias, Peñalver aclara que son sanciones administrativas basadas en las leyes de emergencia financiera y antilavado de dinero de EEUU. La persona sometida a este proceso administrativo puede presentar una solicitud de remoción, directamente o por intermedio de su apoderado o abogado, un dossier sobre los bienes y responder un cuestionario del Departamento del Tesoro en la que tiene que probar en 90 días el origen de sus fondos. «El congelamiento de activos es simplemente eso, un proceso administrativo en el que el sometido al proceso tiene todos sus derechos, y no es como en Venezuela».

 

De modo, pues, que si se trata de cuentas perfectamente legales en donde los funcionarios pueden demostrar el origen de sus dólares de acuerdo a los ingresos que perciben y sus respectivas declaraciones del impuesto sobre la renta, estos funcionarios podrían recuperar sus bienes. «No como en Venezuela».

 

La medida contra funcionarios venezolanos sería aplicada por el Departamento del Tesoro a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC). Éstas podrían afectar a instituciones o personas vinculadas a esas cuentas sospechosas. Tales acciones no necesariamente están relacionadas con los bancos intervenidos en los países antes mencionados. Pero sin duda el decreto de Obama se extenderá a todas aquellas personas, funcionarios y relacionados que han hecho grandes fortunas en negocios presuntamente ilícitos con el Gobierno. De allí, pues, la preocupación de la canciller venezolana, ya no es solo por los siete funcionarios incluidos en la lista OFAC en la que ya hay unos 40 nombres, sino por lo comprometido que pueden estar altos funcionarios y allegados con fondos colocados o movilizados de manera ilícita.

 

Francisco Olivares

@folivares10