logo azul

Cómo duele la Patria

Categorías

Opiniones

Cómo duele la Patria

¿A dónde va con esta conducta que nos resulta incompresible a la mayoría de los ciudadanos?

La insistencia en una pretendida guerra económica para tratar de ocultar lo que no se ahorró, lo que se dilapidó, lo que no se invirtió y con todo lo que se acabó, está llegando a extremos irracionales. El Gobierno Nacional decidió lanzarse por el camino de agudizar la crisis económica y tratar de endosarle las culpas a todo aquel que se pueda, mientras no sea a él mismo. ¿A dónde va con esta conducta que nos resulta incompresible a la mayoría de los ciudadanos?

 

La causa está en el desmantelamiento de nuestro aparato productivo y nuestra dependencia absoluta de lo importado; un modelo que consagró un Estado nuevo rico que pensó que lo sería eternamente. Un gobierno que malbarató esa riqueza y para el cual era más importante el control político de la sociedad y de todas las instituciones del Estado, que generar riqueza con esfuerzo propio.

 

La reaparición de Giordani con su frase «¡Ya somos casi el hazmerreír de América Latina!», fue la guinda que le faltaba a la torta. Dos correcciones: el «casi» sobra y, cambiemos «de América Latina» por «del mundo» para ser más exactos. Para Giordani, somos el hazmerreír; para mí una vergüenza, un caso que debe estudiarse en todas las escuelas de economía del mundo como el país que en dos oportunidades se ganó la lotería y botó el premio en espejismos.

 

La frase no vino sola; fue acompañada de varias otras declaraciones memorables: «Nosotros no hemos podido hacerle un cariñito a la burocracia ni a la tecnocracia venezolana. No la hemos impactado… Y ahora creamos vicepresidencias a granel, ministerios y viceministerios que, por cierto, no existen: son puras invenciones, dado que el ministerio es uno solo. Pero sí hay monasterios, misterios… y esperemos que no se transformen en cementerios». Pero el gobierno al que apoyó Giordani (Chávez) creó ese monstruoso Estado y el actual no pretende por nada del mundo disminuirlo, pues vive de ese clientelismo político traducido en el más ramplón populismo.

 

Otra de Giordani: «Entonces viene la crisis. Que llegue, a ver si adquirimos conciencia de los límites. ¡Qué bueno! Para que tengamos conciencia y nos ajustemos los cinturones, porque no hay dólares ni bolívares…». Cuando los había los botaron y, ahora que no los hay, el gobierno nos anuncia nuevos planes faraónicos y nos dice que tiene los recursos tanto en divisas como en bolívares para ejecutarlos. ¿Hasta dónde llegará la mentira oficial?

 

Giordani dixit: «Al presidente Hugo Chávez le dije una vez: Presidente, el ‘regalado’ se debe acabar. De allí lo que teníamos que hacer a partir del 7 de octubre del 2012…». Pero el gobierno anuncia que Petrocaribe seguirá igual y que también lo que se regala en viviendas y otros cientos de cosas permanecerá igual. El «regalado» es la norma, el esfuerzo propio la excepción en el modelo revolucionario que crearon, y Giordani estuvo allí.

 

Y también dijo: «El principal problema político de Venezuela es la distribución de la renta petrolera. ¿Cómo vamos a construir una sociedad socialista con esos perforadores de la renta enquistados en el sistema financiero?…». Con ellos no se puede construir ni una economía socialista ni capitalista ni de ninguna índole. No son sanos en ningún modelo. Han desangrado a Venezuela, pero allí siguen.

 

Y agregó: «Hay que hacer una ley draconiana contra la corrupción. ¿Por qué no aprobamos esa ley como una primera medida? El pueblo de Venezuela la va a aplaudir. ¿Quiénes no la van a permitir? ¡Los que están en ese proceso, involucrados en el fenómeno de la corrupción!…». ¡Exactamente! Estaban y siguen enquistados en el poder o vinculados directamente a él. Expoliaron miles de millones de dólares y lo seguirán haciendo. No se trata de leyes, ya las hay, se trata de instituciones independientes que las apliquen y los coloquen tras las rejas. Qué daño tan inmenso le han hecho a la democracia al colonizar los poderes públicos, consagraron la impunidad.

 

Y también debemos parar la oreja, dice Giordani: «Oye, ¡dejemos de importar alimentos! ¡Vamos a producir! ¡No te metas en lo que está funcionando! Parece que fuéramos el Rey Midas al revés. Pon a funcionar a Pdvsa, al Seniat, al BCV, al comercio exterior, al sistema financiero. Pongamos a funcionar la electricidad, las empresas de Guayana, las telecomunicaciones, los servicios públicos. Que la gente tenga medicinas y alimentación, y lo pequeño y mediano que funcione bien, déjalo tranquilo…». ¡Cuánta lucidez tardía!, luego de haber acabado con todo lo que tocaron.

 

Toda la declaración de Giordani es, sin duda, la confesión más importante de la burla que ha significado este modelo socialista (sólo de nombre) que ha convertido en muy ricos a pocos y ha multiplicado la pobreza en millones. Cómo duele la Patria al ver estos resultados.

 

gblyde@gmail.com

@GerardoBlyde

Comparte esta noticia:

Contáctanos

Envíe sus comentarios, informaciones, preguntas, dudas y síguenos en nuestras redes sociales

Publicidad

Si desea obtener información acerca de
cómo publicar con nosotros puedes Escríbirnos

Nuestro Boletín de noticias

Suscríbase a nuestro boletín y le enviaremos por correo electrónico las últimas publicaciones.