Así están las cosas
junio 15, 2013 11:40 am

¿Còmo estaràn las cosas en el gobierno de Venezuela que sale el canciller retratado hecho unas Pascuas con el Secretario de Estado norteamericano y en seguida se va el Presidente de la Asamblea Nacional a retratarse con Fidel Castro? El titular del parlamento, que en la famosa grabación del señor de la ex-hojilla es pintado como el enemigo público (hasta entonces privado) número uno de la cubanización, tiene que ir a pararse firme delante del Comandante en Jefe. Serìan “opiniones del compañero Silva que no nos quitan el sueño” como declaró el aludido sin desmentirlas, pero para La Habana cogió tan pronto pudo. Asì es el peso que los gobernantes de la isla tienen en nuestra nomenklatura roja.

 

Segùn las informaciones provenientes de la capital cubana, versión oficialìsima del Sibci, con el Presidente Raùl Castro, conversò acerca del excelente estado de las relaciones bilaterales, el apoyo del gobierno cubano a la “revolución bolivariana” y la necesidad de preservar “las conquistas irreversibles del pueblo” venezolano. En el “animado y fraternal encuentro” con Fidel Castro, “recordaron emocionados el legado” del difunto Presidente, dialogaron sobre los desafíos que tiene por delante la revolución venezolana y la situación alimentaria mundial, asì como recorrieron cultivos “capaces de generar altas cifras de proteínas para la producción de leche y carne”. Sì, entendió bien el amigo lector, Cabello fue a Cuba a informarse còmo producir alimentos. No he leído si tuvo oportunidad de preguntar a cubanos del pueblo llano, los que sufren la libreta de racionamiento, las colas, la escasez y el mercado negro, còmo està en verdad el abastecimiento en esa naciòn hermana. A su llegada, el Presidente de la Asamblea Nacional fue recibido por su colega cubano Esteban Lazo, quien preside un cuerpo monocolor, como le gustaría a Cabello que fuera el de aquí, pero que muy seguramente trata a sus diputados con màs respeto que èste.

 

En el Zulia se implantò el racionamiento tecnológicamente mejorado, con chip y control en una iniciativa conjunta del gobierno regional, ahora del Psuv, y el nacional por intermedio de la Cantv. Armado el zafarrancho de protesta, porque no son los zulianos precisamente amigos de aguantar callados, y habiendo retumbado la noticia a nivel nacional, Maduro resolvió echar para atrás el chip, calificándolo de “locura” y, màs allà, opinando que de seguro “se le fundiò el cerebro” a quien inventò eso. El gobernador Arias Càrdenas, característicamente, dijo yo no fui, pero admitió el racionamiento. El detalle es que el mentado chip de racionamiento lo diò a conocer su secretario de gobierno Blagdimir Labrador quien anunció el control por un “sistema integrado a un servidor de Cantv que se va a direccionar desde el ejecutivo regional para monitorear las compras” de 20 productos regulados.

 

Y, entendámonos, si a dònde fue Cabello a educarse en materia de abastecimiento es al Cuba, hasta el gato sabe que el kit antillano incluye libreta de racionamiento y mercado negro.

 

La verdad es que mientras miremos para allà estaremos equivocados, y solo veremos crecer la escasez, los precios, la especulación, porque lo que es la producción, nada. A diferencia de Cuba, que nos tiene a nosotros, aquí hay petróleo para pagar enormes importaciones, pero con la regaladera cada vez exportamos menos y, a la hora de cobrar, mucho menos. Asì que las divisas comienzan a escasear y, en su angustia, el gobierno no hace sino licuar el valor real del bolívar.

 

Si usted quiere confesarse va a la iglesia, no a un mabil o a aquello que en otro tiempo se conocía con el circunloquio de “los kilómetros”, y si quiere organizar una parranda, no es apropiado ir a preguntarle a nuestra excelsa patrona. En Cuba no tienen el remedio para nuestra enfermedad. Al contrario, la contagian. /JM

 

Por: Ramón Guillermo Aveledo