Sorpresiva decisión. Alrededor de las 9.00 de la noche y tras cinco horas de audiencia pública y oral en el juicio que se le sigue a Leopoldo López, dirigente de Voluntad Popular, y a los cuatro estudiantes, señalados por los hechos del pasado 12 de febrero, la jueza concedió la medida cautelar al joven Marco Coello, de 18 años de edad.

Las lágrimas y los abrazos afloraron a las afueras del Palacio de Justicia, donde el estudiante de bachillerato se reencontró en libertad con sus seres queridos, tras permanecer más de cinco meses preso.

Carlos García, miembro del equipo de la defensa técnica de Coello, explicó los detalles de la decisión.

“Se trata de una medida cautelar sustitutiva por salud, a raíz de una solicitud de la defensa, fundamentada en una serie de experticias médico-psiquiátricas. El diagnóstico de Marco es trastorno de estrés postraumático con episodio depresivo. Se hablaba de rasgos importantes de depresión con riesgos suicidas”.

García informó que Coello recibirá tratamiento especializado, y que de acuerdo a su evolución podrá retomar sus estudios y optar por su título de bachiller.

“Lo importante es que vaya recuperando la normalidad de su vida, aún cuando seguiremos enfrentando el proceso judicial”.

El joven tiene un régimen de presentación en los tribunales de cada ocho días.

Por Verónica Albarrán

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