El índice de precios al consumo (IPC) de Estados Unidos aumentó un 0,1% en julio tras haberse mantenido sin cambios el mes anterior, lo que dejó la inflación interanual en el 1,7 %, informó este viernes el Gobierno.
Así, la inflación entre julio de 2016 y el mes pasado quedó una décima por encima del dato anterior (1,6%) y lejos aún del 2% que la Reserva Federal (Fed) considera saludable para la economía.
Sin tener en cuenta los precios de los alimentos y la energía, que son los más volátiles, la inflación subyacente aumentó en julio un 0,1%, y se situó en el acumulado interanual en el 1,7%, el mismo dato del mes pasado.
El ligero aumento en el IPC se produjo en parte por el auge en el coste de la vivienda, los alimentos y los cuidados sanitarios, mientras que los precios de la energía descendieron el 0,1% en julio, con la gasolina estancada y un incremento del 0,4% en la electricidad, según el informe del Departamento de Trabajo.
Los precios de los alimentos aumentaron el 0,2%, y registran un incremento del 1,1% respecto a hace un año.
Asimismo, los precios residenciales, que incluyen alquileres de vivienda y suponen un tercio del índice total, crecieron un 0,1% el pasado mes y se encuentran un 3,2% por encima de los 12 meses anteriores.
EFE