Poner morritos en exceso o intentar ser una estrella del porno (sin serlo) no ayuda, créenos.
¿Te has sentido incómoda alguna vez intentando ser sey y consiguiendo el efecto contrario? Por ejemplo, cuando estás en la cama con tu mejor conjunto de lencería y él aparece con su tableta para ver la final de la Liga. Y así se acaba pasando la noche y tú quedas a dos velas.
¿Podría ser entonces que en vez de seducir a tu chico lo estés espantando? La respuesta es sí. Pero no te colapses. Hemos investigado un poco para saber cuáles son esas cosas que les da más yuyu que morbo. ¿Preparada?
1. Poner voz de bebé. Solemos hacerlo cuando estamos entre amigas o cuando nos dirigimos a él pensando que es un gesto tierno. ¡Pues cuidado! No les gusta nada y lo ven como algo totalmente cursi.
2. Rociarte con perfume. Dejar rastro con un olor sugerente está bien, pero no nos pasemos. ¡No hay que ducharse con perfume! Cada ocasión merece una fragancia diferente, pero por regla general, los más discretos y suaves son la clave. El resto, ¡que lo hagan las feromonas naturales!
3. Poner morritos. Lo sabemos, nos sale de forma innata sobre todo cuando escuchamos la palabra ¡selfie! Pues mejor busca una postura más natural y saca tu mejor sonrisa, porque para ellos pierdes todo su sex appeal.
4. Zapatos incómodos. A quién no le gusta subirse a unos stilettos o zapatos con tacón de vez en cuando. Pero si quieres ir a una cita con uno de ellos aún sabiendo que en unas horas te habrán destrozado los pies, mejor dejarlos en el armario. Principalmente por nosotras, pero a ellos tampoco les gusta salir con una chica que está sufriendo pudiendo ir cómoda. ¡Cuanto más natural, mejor!
5. Ser explícita en situaciones incómodas. Si eres de esas chicas sin pelos en la lengua ¡fantástico! Pero según qué temas, mejor tratarlos en la intimidad. Así que hablar de las cosas sucias que vas a hacer con tu chico mientras cenas en familia quizás no es el mejor momento.
6. Tratar un pene como si no fuera un pene. No es un juguete, ni un dulce, ni un joystick. Es un pene y ellos quieren que lo tratemos como tal y dejemos de lado la idea del pene-friendly.
7. Too much brillos. Está bien vestir de vez en cuando con prendas que brillen, pero tampoco es necesario ir embadurnada de purpurina cual Mariah Carey. ¡Todo en su justa medida!
8. Beber para impresionar. Es absurdo que creas que te tienes que emborrachar para ser más guay o para impresionar. ¡Al contrario! NI a ellos les gusta que te pases con el alcohol para pretender ser otra ni a nosotras nos hace ningún bien.
9. Intentar ser una estrella del porno. Primero, no todo lo que sucede en las películas es verdad. Pero, además, tampoco hace falta que les preparemos un espectáculo como si estuviéramos rodando una peli para adultos. ¡Tus movimientos más naturales serán los más sexys!
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