Hay famosos que tienen en muy alta estima a sus mascotas, como la cantante Miley Cyrus, que llegó a contratar una médium para contactar con su fallecido can. Una de estas celebrities ha sido la recién fallecida Lauren Bacall, que en el reparto su herencia tal y como lo estipulaba su testamento, estaba incluida su perrita Sophie.

La popular actriz no dudó en dejarle unos 10.000 dólares. Sophie, de raza Papillón, seguramente podrá disfrutar de ese dinero en sus cuidados. Además, Lauren Bacall estipulaba en el testamento que era su hijo, Sam Robards, quien debería hacerse cargo de ella.

Según informa Page Six, la actriz hizo el reparto de su fortuna, unos 26,6 millones de dólares, entre sus tres hijos, además de otorgarle a sus dos nietos unos 250.000 dólares. El reparto terminó también con 20.000 dólares a su ama de llaves y 15.000 para su empleada doméstica. Lauren Bacall fallecía a los 89 años de edad tras un derrame cerebral el pasado 12 de agosto.

Fuente: ABC.es