Los productores españoles piden acabar con las agresiones que sufren sus camiones La guerra de los melocotoneros franceses por el dumping ibérico Agricultores catalanes protestan por los ataques en la frontera en… Agricultores catalanes protestan por los ataques en la frontera en 2011.

Nunca un melocotón dio tanta guerra. Franceses contra españoles. Los primeros dicen que el «conflicto de los melocotones», como lo han bautizado, nunca ha llegado a estos niveles y denuncian «un dumping ibérico». Dicen que españoles trampean los precios para «acabar con el mercado francés». El melocotón se ha convertido en el símbolo de la competencia desleal, dicen los galos, de sus vecinos españoles, que, por su parte, denuncian las agresiones y la destrucción de la fruta que sufren sus camiones en la frontera y alegan que la crisis de precios afecta a otros países Europa, no sólo a Francia.

«Lo que más nos molesta es la cotización en el mercado al por mayor español (del melocotón), que es el doble del precio de venta en Francia. En España hay un precio medio de 1,10 euros el kilo y aquí la mercancía llega a 57 céntimos».

Luc Barbier es el presidente de la Fédération Nacional des Producteurs del Fruits (FNPF) francesa y expresa el pesar de todo el sector por lo que ellos consideran una práctica ilegal por parte de los transportistas españoles. Critican que estos últimos tiran los precios y que ellos no pueden competir con costes tan bajos, que su producción está bajando y su situación cada vez es más precaria.

La Confederación Española de Productores y Exportadores de Frutas (Fepex) se ha defendido de las acusaciones de sus vecinos y ha asegurado que la crisis de la fruta afecta a todo el mercado europeo, no sólo a Francia. Además, ha pedido acciones contundentes para acabar con los bloqueos y las agresiones que han sufrido los camiones españoles que transportan fruta de hueso en la frontera gala.

Gajes del mercado único

«Francia es un socio privilegiado para nosotros. Pero tienen que entender que nosotros también sufrimos una fuerte competencia por su parte con otros productos como la patata o la manzana. Lo que no se puede pretender es que el mercado único funcione sólo cuando nos interesa. Hay productos españoles, como el melocotón, que son más competitivos que los franceses y otros galos que son más competitivos que los nuestros. Así funciona el mercado único», explica a EL MUNDO José María Pozancos, director de Fepex.

Los franceses critican que sus vecinos venden «el ajo español a mitad de precio» y les acusan de fijar los precios después de la venta, en el momento de la entrega y no del encargo, en función del precio de venta en el mercado. El reglamento francés prohíbe a los transportistas de frutas y verduras cruzar la frontera sin tener un comprador de antemano y un precio fijado por encargo, para evitar que la mercancía se malvenda.

«Estos precios no son sostenibles para nosotros. Muchos nos vamos a ver obligados a cerrar», lamenta Jacques Rouchaussé, de Légumes de Francia. Aunque estas prácticas «siempre han existido», dice Barbier, «nunca han llegado a este nivel».

Para Fepex, esta situación de crisis que vive el sector «afecta por igual a todos los productores comunitarios» y por ello pide días medidas urgentes para garantizar el libre tránsito y para que los mercados se recuperen. «La crisis se acentúa en productos vulnerables como el melocotón, que tienen un periodo de recolección corto y son más perecederos que otros, como la manzana. Esta crisis genera nerviosismo y evidencia que las medidas de gestión de la crisis por parte de la UE no son operativas», dice Pozancos.

Más controles

Los productores franceses se reunieron ayer con el ministro de Agricultura galo, Stéphane Le Foll, para pedir más controles en los camiones que transportan los melocotones y nectarinas a Francia. Según el ministro, en las últimas semanas se han hecho controles a 150 camiones y se han detectado 10 infracciones.

«En el mercado de Perpignan, por cada caja de melocotones franceses entran 16 españoles», critica Barbier. Denuncia que la producción gala, antes de 400.000 toneladas y que podría garantizar el consumo en el país de estas frutas (450.000 toneladas) sin necesidad de comprarlas de fuera, ha caído hasta las 190.000 toneladas. El 60% de la fruta de hueso que se consumo se produce en Francia, frente al 100% de hace una década.

El Gobierno ha anunciado que va a intensificar los controles sobre los cargamentos de frutas que lleguen de España para «verificar que se respetan las reglas del comercio». Se comprobará el origen, la calidad y el precio del producto.

Pozancos, de Fepex, duda de la legalidad de estas medidas desde el punto de vista del derecho comunitario. «No creo que la normativa europea obligue a un conductor a llevar el contrato de compraventa en la guantera», duda.

Además, ha dicho Le Foll, Francia, España, Grecia e Italia han pedido a la Comisión Europea que ponga en marcha medidas excepcionales para regular el mercado. No han dicho si tomarán medidas para evitar la destrucción de la fruta española por parte de los productores patrios.

«En diez años hemos perdido el 50% de la producción. Si seguimos así en otros diez nos dejaremos el 50% que nos queda», ha denunciado Barbier, de la parte francesa. «Si los agentes del estado no hacen los controles necesarios, iremos nosotros a hacerlos a la frontera, con el riesgo de provocar un incidente diplomático», amenaza.

Desde el frente español se piden «medidas eficaces» para gestionan la crisis de precios, que «equilibren la oferta y la demanda y garanticen la viabilidad de nuestras producciones», dice Pozancos.

Fuente: Elmundo.es