Ante la posibilidad de una derrota electoral en las próximas elecciones parlamentarias, el gobierno inició una nueva fase de persecución política y judicial para desmoralizar a las fuerzas democráticas y socialistas que son disidentes del actual régimen, según Joel Pantoja, coordinador nacional de Izquierda Democrática Ambientalista (IDEA).

 
A su juicio, «se busca revitalizar la etapa termidoriana que sufrieron otras revoluciones en la historia donde una burocracia corrupta frustró los sueños de cambio de un pueblo por su bienestar».

Pantoja recordó que desde IDEA se ha denunciado que el actual gobierno «no es ni socialista, ni de izquierda, ni bolivariano, muy al contrario es nacionalsocialista, es decir, usa los ideales patrióticos y populistas exacerbados para el dominio sectario, autoritario, militarista, caudillista y burocrático de la sociedad y sus instituciones».

 
Además resaltó que uno de los libros usados por el PSUV es el escrito por el partido obrero nacionalsocialista alemán llamado «Mi Lucha». Pantoja denunció que hay numerosas similitudes entre ambos partidos. «Por ejemplo, sin césar el PSUV y sus líderes divinizan la imagen de Hugo Chávez, como figura incuestionable de nuestra historia, recurso muy propio del nacionalsocialismo, para procurar el seguimiento exaltado, ciego cuasi religioso de un importante sector del pueblo venezolano».

Urgen medidas

 
La polarización entre el PSUV y la MUD hace que se sigan postergando las medidas que se deben tomar para la implementación de un sistema productivo sustentable.

 
Para Pantoja la crisis que se registra en Venezuela no solo es política ni económica, sino que urgen tomar medidas para proteger al medio ambiente. Informó que con solo la venta de la basura que se genera en un año se puede registrar ganancias de 100 millones de dólares, «que se traduce en la construcción anual de 33 escuelas, 10 hospitales o 300 comedores populares para nuestros abuelos».

NOTA DE PRENSA