Las primeras citas casi siempre son divertidas. Todo es nuevo, ambos se atraen y no hay prisa por llegar a acuerdos realistas sobre una relación. Sin embargo, los primeros días son más importantes de lo que crees, de acuerdo con la psicóloga experta en relaciones Tracy Thomas. «Lo que haces al principio de la relación ( y sí, debes verlo como una relación y no solo como una serie de citas) puede marcarla», explica. En otras palabras, no hay mucho espacio para errores como tú crees, lo que hagas en ese momento pueden hacer la diferencia entre algo casual o formal.

Si tienes problemas para mantener el interés después de un mes o más, puede que estés cometiendo alguno (o varios) de estos errores.

Esperar a que ella haga el primer movimiento

Es el SigloXXI (en teoría las mujeres pueden invitar a los hombres a salir), pero esa no es excusa para que te sientes en el sillón y esperes a que el teléfono suene. Según el coach de las citas, JT Tran, «a las mujeres les gusta que las persigan». «Esperar a que una mujer tome la iniciativa, es una batalla perdida. Puede pasar, pero lo más probable es que no».

No pagar en las primeras citas

En nuestra moderna sociedad, la pregunta ¿quién paga la cuenta? parece complicada. Pero no lo es, según Thomas, «algunos roles de género simplemente están muy arraigados». Además, «en las primeras citas debes mostrar que te puedes hacer cargo». Pagar la cuenta las primeras citas no significa quedar en quiebra, si no puedes pagar tres elegantes cenas, llévala de picnic o al museo.

Pagar por todo

Una vez que ya estableciste que te puedes hacer cargo, puedes dejar de escarbar en tu cartera. «En la cuarta cita, haz una pausa y dale espacio para que ella se haga cargo», indica Thomas. «Debes demostrar que la puedes cuidar, pero si pagas por todo parecerás su papá.» Ella no está buscando eso y apreciará que la dejes hacerse cargo de vez en cuando.

Presumir tu CV

Hacer una lista de todas las asombrosas cosas que has hecho o logrado podría parecer una manera segura de impresionarla, no lo es. «Los hombres son educados para creer que su valor reside en lo que hacen», explica Thomas. «Sin embargo, ella quiere salir contigo, no contratarte.» A las mujeres les cuesta trabajo conectarse con hombres que se la pasan promoviéndose. En vez de hablar de lo que haces, dile lo que sientes, como experimentas la vida, lo que te interesa y lo que te inspira.

No ser tú mismo

¿Crees que puedes impresionar a una mujer con frases bien dichas? Te equivocas, señala Thomas. Aún si lo logras en ese momento, si sigues pretendiendo ella no se quedará. «Pretender ser algo que no eres es el miedo operando,» agrega. «Implica que te sientes inseguro de ti mismo». Así que podrás engañarla algún tiempo, pero no para siempre.

Confundir una buena relación de trabajo con atracción

Salir con una compañera de trabajo no es una gran idea, pero sucede. Pero antes de abordar a tu guapísima colega en la oficina, debes ser capaz de identificar lo que potencia la atracción. «Regularmente la gente crea lazos de supervivencia», explica Thomas. «Digamos que ambos tienen un pésimo jefe o que la empresa en la que trabajan está teniendo cambios. No confundas cercanía con atracción». Prueba esto: invítala a salir, cuando estén fuera de la oficina.

Correr antes de caminar

A algunas mujeres les encantan los gestos románticos, a otras no. Así que si estás empezando a salir con una, lo más probable es que no tengas ni idea de en qué clasificación se encuentra. Así que, antes de aparecer en su puerta con 50 rosas rojas, chocolates, globos y un oso de peluche, como si celebraras el último Día de San Valentín de la tierra, piensa en que podrías estarle poniendo demasiada presión. «Estás procurándola, así que puede que ella piense que tú esperas que haga algo para procurarte a ti.» explica Tran.

Hablar demasiado de ti

Todos aman hablar de si mismos. Eso te incluye a ti, también la incluye a ella. «Las mujeres en mi oficina se quejan todo el tiempo de que los hombres en sus vidas no les hacen preguntas y no están interesados en contestar las que ellas hacen», comenta Thomas. La cosa es así: si tú le preguntas algo sobre ella, prepárate para interactuar (si no lo haces, parecerás un tonto). Y si la respuesta te aburre, tal vez sea tiempo de evaluar la relación.

Estar ausente

Tus 120 seguidores de Twitter pueden vivir sin ti. Si estás en una cita, prohibido tuitear, actualizar Facebook, hacer check in o subir fotos a Instagram. «Apaga todo lo que tenga que ver con aparatos electrónicos y participa», indica Thomas. «No hay nada más importante que la conexión que vas a crear con tu cita y eso se logra estando realmente presente».

Interpretar de más

«Hacer interpretaciones rápidas de sus palabras y acciones puede hacer mucho daño», explica la experta en relaciones Anita Chipala. Acabarás asignándole significados negativos a lo que hace o dice. Chipala sugiere tomar sus acciones lo más objetivamente posible (tardarse en contestarte un mensaje de texto tres horas, significa que se tardó tres horas para contestarte un mensaje de texto).

Rendirte muy rápido

La invitas a salir, dijo que no, a otra cosa entonces ¿verdad? ¡Pues no! El experto en ventas, Grant Cardone, asegura que debes ser «creativo, tener confianza y ser positivo.» Perseguir a una mujer de la misma forma en que persigues a un cliente, puede parecer exagerado, no para Cardone. «Solo parecerás desesperado si intentas lo mismo más de una vez», explica.

Habla

Para evitar caer en la ‘friend zone’: habla. ‘Los hombres caen en la ‘friend zone’ debido a que no aclaran lo que sienten’, explica Thomas. ‘No quieren estropear la relación al poner todas las cartas sobre la mesa, pero es esta actitud de no querer aclararlo lo que frustra sus planes’. Lo más seguro es que no salte a tus brazos en ese momento, pero definitivamente te respetará por ser sincero.

Esperar a la mujer perfecta

¡No existe! ‘Todas las mujeres vienen con fallas y problemas,» indica Chipala. ‘No la descartes de inmediato. Sal con ella desde el punto de vista de lo que tiene para ofrecerte y sus cualidades, a menos que quieras quedarte soltero siempre’.

Fuente: Men’sHealth