Voceros de Coindustria, Consecomercio y Fedeagro coincidieron en señalar que los gastos por concepto de nómina se dispararon exponencialmente este año como consecuencia de los distintos ajustes de salario decretados por el Ejecutivo. Sin embargo, lamentan que ello no se refleje en el poder adquisitivo de los trabajadores.

En este sentido, de acuerdo con los cálculos aportados por Maryolga Eirá, presidenta de la comisión de Asuntos Laborales Conindustria, solo el pago de las utilidades este año sobrepasó, en más de un 200%, los presupuestos de nómina que se hicieron a finales del año 2016 por este concepto, situación que ha afectado a las empresas.

Por su parte, el presidente de Fedeagro, Aquiles Hopkins, dijo que en 2017 los pagos por concepto de nómina se salieron de todo parámetro de planificación con el agravante de que “con los precios que tienen los productos nuestros empleados no pueden tener la alimentación que deberían porque el salario no alcanza ni siquiera para adquirir la canasta alimentaria”.

La presidenta de Consecomercio, María Carolina Uzcátegui, acotó que las utilidades de este año “calculadas sobre la base de los 177 mil bolívares no dejan ningún margen de maniobra a ningún trabajador venezolano”.

Precisó que con el proceso de “devaluación galopante de la moneda cada minuto que pasa representa un mayor deterioro de la economía de cada uno de los venezolanos”.

Cabe destacar que a lo largo de este año el salario mínimo se incrementó en 337%.

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