El problema de los servicios del país no se resuelve con un listado de tareas por hacer

“Venezuela ha mostrado una severa involución en los últimos 20 años en la prestación de servicios públicos. No hay agua y tampoco electricidad. Existen restricciones prolongadas en todo el país y las empresas gubernamentales son incompetentes para atenuar la crisis y mucho menos resolverla”, fue el diagnóstico que hizo el Ingeniero José María de Viana, ex presidente de Hidrocapital y Movilnet, durante el Foro Catástrofe de los Servicios Públicos: Agua, Electricidad y otros organizado por el Grupo Orinoco, Energía y Ambiente.

 
Durante la actividad realizada el 28 de abril en el Auditorio del ITER-UCAB, en la urbanización Altamira de Caracas, de Viana, hizo hincapié en que las empresas de servicios públicos se desprofesionalizaron y sustituyeron el capital humano capacitado por la lealtad militante. «En un sistema democrático la disposición al voto está íntimamente relacionada con la calidad de los servicios, cuando en un país éstos son deficientes, comienza un período de inestabilidad política»

Para el también profesor de Ingeniería Civil de la UCAB la revolución del siglo XXI sólo causó miseria, pese al inmenso caudal de dólares que ingresó durante la bonanza petrolera. “Los daños en materia de salud y economía son catastróficos”, dijo.

También afirmó que la transformación del estado actual de los servicios pasa por la creación de una nueva Institucionalidad, que nos conduzca a la formación de empresas competentes y responsables sobre la base del talento y  el mérito. Así mismo aclaró que la ausencia de una cultura de mantenimiento sostenida se ha resuelto en otras ciudades del mundo, como es el caso de Medellín (Colombia), con la creación de una empresa pública con índices de desempeño de altísima eficiencia y productividad, quienes en la actualidad incluso proveen servicios a otras naciones del continente.

 
Un panel de expertos conformado por el ingeniero Eduardo Buroz Castillo, profesor de postgrado en gestión ambiental en la UCV y la UCAB, el ingeniero Jesús Augusto Gómez Medina, consultor  en ingeniería de recursos hídricos y el abogado Carlos Alberto Romero Mendoza, ex coordinador de la reforma política institucional de la COPRE, coincidió en señalar que la gestión de una empresa de agua potable y saneamiento es un esfuerzo colectivo de los receptores del servicio y de los funcionarios que lo prestan. Debe entenderse que esta es una tarea compleja, que requiere preparación, procedimientos, apego a las normas, evaluaciones, controles y libertad de actuación, conforme rigurosos cánones de comportamiento empresarial y voluntad de servicio.

 
Gómez Medina se refirió a la grave situación del sistema eléctrico y destacó en términos de generación se debe utilizar «tanta hidroelectricidad como sea posible y tanta termoeléctrica como haga falta».

 
Las palabras de bienvenida estuvieron a cargo del Coordinador del Grupo Orinoco. Dr. Arnoldo José Gabaldón, quien subrayó que es imperativo un cambio de rumbo en lo que respecta a las políticas públicas. Hay que regresar a la profesionalización y tecnificación de las empresas de servicios. «La administración del Estado debe tener un plan institucional eficiente, sin posiciones políticas que perviertan su funcionamiento».

 
El objetivo de la actividad fue brindar a los asistentes la información necesaria sobre el estado actual de los servicios públicos y el desempeño de los entes del estado responsables de su mantenimiento y calidad,  además de ofrecer posibles soluciones para la colectividad en vista de la grave situación que atraviesa el país en esta materia.  NP