El almacén está vacío. Un gran “no hay” lo certifica en la vitrina principal de la ferretería con una lista de materiales ausentes del inventario. . Los insumos básicos para la construcción están escasos. La cifra reportada indica que la falla se ha acentuado en 87,72% en promedio.

 
Las cementeras del país trabajan al 30%, lo que se traduce en que las concreteras no tienen, porque lo poco que se produce se destina a la Gran Misión Vivienda Venezuela.

Lo mismo está ocurriendo en el Complejo Siderúrgico Nacional, antiguo Sidetur. La manufactura de cabillas no llegaba al 25% de su capacidad total antes de la paralización de 10 meses que cesó el lunes 5 de octubre. El resultado es que las ferreterías están sin inventario. La afectación en Valencia,  es de una escasez de 100%, detalló, Guillermo Manosalva, presidente de la Cámara de Comercio de la ciudad.

La producción de acero líquido se reactivó con la entrega de electrodos, insumo vital para el funcionamiento de los hornos, cal y briquetas. Pero los materiales alcanzan para dos meses.. Briquetera del Caroní,  estará paralizada hasta febrero de 2016, y el suministro de cal tampoco se hará al 100%, porque la fábrica estatizada tiene fallas de inventario y cuentas por pagar.

Las cifras de la Cámara de Comercio de Valencia son claras. La escasez de alambre dulce se ubica en 95%; la de cables y clavos de acero en 90%; tornillos y clavos dulces en 80%; bombillos nacionales en 75%, y los importados tienen meses en las exhibiciones por los altos precios. Con la caída de la producción de Sidor  y la paralización desde agosto de acero laminado,  las tuberías estructurales se ven afectadas con disminución de manufactura de 90%, y las tuberías pulidas en 82%. Las de plástico PVC están escasas en 83%  por el cierre de la frontera con Colombia., desde donde llega la materia prima.

Los pocos  insumos para la construcción disponibles en el mercado  superan en 2700% los precios establecidos por la Sundde.

El Carabobeño