Faltan diez días para el enlace que reunirá a los Windsor en una boda familiar y la polémica en torno a este evento se encuentra más candente que nunca. ¿La razón? El pueblo británico cree que la boda de Eugenia de York, nieta de Isabel II, con Jack Brooksbank no es un acto que deba ser financiado por las arcas públicas. Y tiene algo de sentido, ya que la hija del príncipe Andrés no asume compromisos reales ni tiene agenda. Es decir, que no tiene un cargo o trabajo volcado al servicio de los contribuyentes, encargados de pagar una muy elevada factura nupcial el próximo 12 de octubre.

En teoría, son los padres de dichos novios (especialmente el padre de ella) los que se harán cargo de la cuenta, pero existe un notable detalle que no ha pasado por alto para la asociación Republic: los fondos para la seguridad de dicha jornada provienen de las arcas públicas. En total, unos nada desdeñables 2,5 millones de euros.

Dicha cobertura incluirá un paseo en carruaje para saludar al pueblo, procesión que se asemeja a las bodas de Harry y Meghan o Kate y Guillermo, los cuales obtuvieron similar tratamiento protocolario. O al menos, según aseguran fuentes cercanas a Buckingham, así lo está intentando el príncipe Andrés, que no estaría dispuesto a llevar a su hija al altar con menos relevancia mediática que sus primos. Vaya, que este asunto se presupone un rifirrafe de egos reales.

Berrinches o caprichos aparte, lo cierto es que durante dicho acontecimiento se cerrarán carreteras y habrá una férrea restricción de aparcamiento en el perímetro. De hecho, las medidas de control cortarán todas las rutas que conducen al castillo de Windsor desde las doce de la noche de ese mismo día para reabrirse a una hora aún desconocida.

Internet ya ha reaccionado

Tras conocerse estos detalles, Republic afirmó que este era “un evento privado y personal disfrazado de celebración nacional”, por lo que decidió abrir una petición en línea para que no se subvencionara con dinero del pueblo. En la actualidad, dicha solicitud roza las 300.000 firmas. Asimismo, según una encuesta aportada por dicho grupo antimonárquico, el 76% de los británicos, si tuvieran la opción, preferirían no aportar una libra a dicha celebración.

Vanitatis