El muro del Atlético de Madrid resistió la aplanadora del Bayern Munich
mayo 3, 2016 5:40 pm

Atlético de Madrid logró clasificarse a la final de la Champions League tras eliminar al Bayern Munich, que pese a haber ganado el partido por 2-1, sucumbió gracias a la victoria de los españoles en la ida por 1-0, valiéndose de la norma del gol en condición de visitante.

 

 

El Bayern, como buen local, manejó la posesión, generó múltiples ocasiones y de principio a fin se volcó al ataque, buscando siempre la remontada.

 

 

El Atlético, por su parte, volvió a demostrar por qué es el conjunto menos goleado de toda Europa: en octavos dejó su arco en cero; mientras que en cuartos y semis, recibió apenas tres goles (dos en el Camp Nou y uno en el Allianz Arena).

 

 

Ventaja del Bayern

 

 

El primer tiempo se caracterizó por ser un monólogo del Bayern, que en frente tenía a un Atlético que renunció completamente a la tenencia de la pelota, y que lo único que intentaba era generar un contragolpe, pero los alemanes, con su presión alta, recuperaban el esférico a los pocos segundo de perderlo.

 

 

Tras varias oportunidades de Robert Lewandoski, Thomas Muller, Arturo Vidal y Phillip Lahm, los alemanes abrieron el marcador al minuto 31 de la primera parte, gracias a un cobro de tiro libre de Xabi Alonso al borde de la media luna. El español mandó un disparo rastrero que se desvió (para infortunio de Oblak) en las piernas de José María Giménez, por lo que el meta no alcanzó a tapar el remate pese a haberse lanzado.

 

 

Y apenas dos minutos después, al 33, pudieron ampliar su ventaja, luego de que Giménez sujetara a Javi Martínez dentro del área en un tiro de esquina. El árbitro no dudó en decretar la pena máxima.

 

 

Cobró Muller (hacia su izquierda) pero Oblak adivinó la trayectoria y tapó, para el alivio de los suyos.

 

 

Apareció Griezmann

 

 

Ya en la segunda mitad, Diego “Cholo” Simeone decidió sacar a Augusto Fernández para dar entrada a Ferreira Carrasco, enviando un mensaje de que no se seguirían replegando.

 

 

Y en la primera clara que tuvo el Atlético, empataron el partido. Al 53, Antonie Griezmann cortó una salida del Bayern, se combinó con Fernando Torres, que se le devolvió un pase filtrado, y el francés, en un mano a mano, la mandó a guardar.

 

 

De allí en adelante las acciones se emparejaron, a tal punto que los locales, si bien remataban más, no generaban mayor peligro con sus jugadas, mientras que los visitantes se asentaron en la cancha y hacían temblar a los alemanes cuando conseguían atacar.

 

 

Dos cabezazos en el área son gol

 

 

Cuando más cómodos lucían los rojiblancos, Lewandoski puso en ventaja al Bayern, al minuto 75. El polaco, de cabeza, puso a los suyos nuevamente en ventaja, tras ser asistido, con un testarazo de Vidal, que antes había recibido un centro de Alaba desde la izquierda.

 

 

Sufrieron hasta el final

 

 

Con 15 minutos aún disponibles en el cronómetro, la tónica fue similar a la del primer tiempo, con los locales volcados al ataque, mientras que los visitantes aguantaban como podían.

 

 

Y justamente en el momento de mayor tensión, Carrasco se fue por la banda izquierda, y cerca del área (fuera) fue derribado por Vidal, ante lo que el juez, erróneamente, pitó penalti.

 

 

Cobró Torres, pero, como Muller, también erró. Bayern, nuevamente, atacó, y lo intentó con Alaba, Muller y Lewandowski, pero Oblak, en tres oportunidades, se mandó tres paradones que terminaron significando el pase de los españoles, que en tres años, jugarán su segunda final de Champions.

 

 

Ovación Deportes