El Banco de España elevó este viernes dos décimas, a 2,4%, su previsión de crecimiento de la cuarta economía de la eurozona para 2019.
El banco central se muestra así más optimista que el gobierno socialista de Pedro Sánchez, que prevé para este año un crecimiento del PIB del 2,2%.
La revisión al alza se debe a que «la tasa en el primer trimestre resultó ser una décima mayor de la anticipada hace tres meses», escribió el Banco de España en su informe trimestral de proyecciones.
En el primer trimestre del año, el PIB se incrementó un 0,7% respecto a los tres meses anteriores, una aceleración inesperada. En el segundo se pronostica que el Producto Interior Bruto crezca también más de lo previsto, indicó la institución.
En lo sucesivo, el Banco de España prevé una ralentización del crecimiento, que debería ser del 1,9% en 2020 y el 1,7% en 2021, contrariamente al gobierno, que para esos años apuesta por un 2,2% y un 2,1%.
El crecimiento «seguirá sustentándose sobre el dinamismo del gasto doméstico privado», añade el Banco de España, incidiendo en el incremento de los salarios y los bajos tipos de interés, dos fenómenos que estimulan el poder de compra de los hogares.
La subida de los sueldos, una de las apuestas estrella de Pedro Sánchez, que incrementó el salario mínimo un 22%, «es, a priori, menos propicia para el avance del consumo» que la creación de empleo, matizó el Banco de España.
El desempleo, flanco débil de la economía española, sigue reduciéndose tras haberse disparado durante la crisis de 2008-2013, pero afecta a un 14,7% de la población activa, según los últimos datos disponibles.
Sobre este punto, el banco central mejoró también sus previsiones, en 4 décimas.
Según prevé, la tasa de desocupación se reducirá al 13,8% a fines de año, y se ubicará en el 12,4% a fines de 2020 y el 11,8% a fines de 2021.
En cuanto a las amenazas sobre la economía española, la institución cita las medidas proteccionistas en otros países, la posibilidad de un Brexit sin acuerdo, y la fragmentación política derivada de las últimas elecciones legislativas en abril.
Y es que Pedro Sánchez, vencedor de las elecciones sin mayoría absoluta, deberá cerrar acuerdos continuamente con otros partidos políticos para ser investido y luego para sacar adelante los Presupuestos y las leyes.
AFP
